lunes, 14 de octubre de 2019

ELLAS NECESITAN NUESTRA AYUDA

Fuente: AI.
Marinel, de 21 años, proviene de un pequeño pueblo costero de Filipinas. En noviembre de 2013, su comunidad fue devastada por un tifón. Las casas fueron arrasadas, las escuelas diezmadas y la vida de las personas destruidas. Seis años después del desastre, muchos residentes de las comunidades costeras, incluida su propia familia, aún no han sido reubicados. Los proyectos de vivienda no han terminado, y muchos de los compromisos del gobierno aún no se han materializado.

Marinel está estudiando para convertirse en trabajadora social, pero dedica cada momento de su tiempo libre a luchar por su comunidad y fomentar políticas contra el cambio climático en todo el mundo. En 2017, Marinel testificó en la investigación sobre cambio climático y derechos humanos iniciada por la Comisión de Derechos Humanos de Filipinas. También asistió a la Conferencia de la ONU sobre el cambio climático en París en 2015 como parte de la delegación juvenil international. "El cambio climático no es una fantasía, es una realidad y nos está afectando a todos, ahora. Mi padre es pescador y si el cambio climático continúa, significará que tendrá que pescar cada vez más lejos en el mar porque no hay muchos peces. Esto lo hace más peligroso para él. Si no puede obtener suficiente comida para ganarse la vida o alimentarnos, entonces significa que podría tener que abandonar la escuela para trabajar y ayudar a mantener a la familia". 


(Texto de Amnistía Internacional España).


Fuente: AI.
El 31 de agosto la periodista Hajar Raissouni fue detenida con su novio a la salida de una clínica en Rabat. También fueron detenidos su médico y otras dos personas que trabajan en la clínica.

Aunque en el informe médico no hay pruebas de que Hajar se sometiera a un aborto, según su abogado, el 30 de septiembre Hajar y su novio fueron condenados a un año de cárcel por delitos relacionados con el aborto y mantener relaciones sexuales extramatrimoniales. El médico que practicó el presunto aborto fue declarado también culpable y condenado a dos años de prisión, y a dos miembros de su personal les impusieron condenas condicionales de prisión, de un año y ocho meses, respectivamente.

Hajar ha relatado que le interrogaron sobre sus artículos de carácter político y sobre su familia, vinculada a movimientos islámicos en Marruecos. ¿Acusarla de aborto en Marruecos, un país donde está penalizado en casi todas las circunstancias, es solo una excusa por sus artículos críticos con las autoridades? No sería descabellado. Nos tememos que su detención tenga una motivación política y esté relacionada con su trabajo como periodista.

Finalmente, recordamos: Según el derecho internacional, las mujeres tienen derecho a tomar sus propias decisiones en materia sexual y reproductiva. Tipificar como delito servicios de salud, incluido el aborto, que sólo necesitan las mujeres es discriminación de género.

Tu firma sigue siendo importante para pedir que se anulen todas las condenas.

(Texto de Amnistía Internacional España).

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