Siempre que ha estado en mi mano, he procurado el acceso libre y gratuito a cuanto produzco. Soy consciente de que la creación poética no tiene ni el alcance ni la necesidad ni la funcionalidad ni el interés social del conocimiento tecnológico, científico, médico o industrial. Algunos descubrimientos pueden salvar vidas humanas; otros pueden dar de comer a muchas familias. La creación artística, como mucho, puede ofrecer satisfacción estética y emocional, servirnos de refugio en algunas ocasiones.
De este rumor me daría por muy satisfecho si pudiera ayudar a alguien a despertar el interés y la curiosidad por la belleza que la humanidad ha intentado aprehender a través de los siglos y sobre la que todavía no terminamos de saber en qué consiste ni tampoco llegamos a ponernos de acuerdo.
Me he apoyado en unas pocas obsesiones y debilidades —algunas procedentes de los ya lejanos años del bachiller— para intentar resolver mis propias dudas o expresar, sencilla y llanamente mi profunda admiración. Están ordenadas cronológicamente, tal y como podríamos encontrarlas en una historia del arte. Las imágenes que utilizo forman parte del conocimiento compartido. Todas están referenciadas y, salvo unas poquitas que son mías, todas provienen de Wikipedia.
Ya sé que hay que vencer muchas resistencias, temores y vergüenzas para expresar las opiniones por escrito. Me haríais un poquito más feliz si fuérais capaces de escribir alguna frase —no tiene por qué ser laudatoria— comentando vuestra impresión después de leer el poemario. Muchas gracias y que la lectura os sea grata.
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Путин, немедленно останови войну!