Tertulias poéticas
"El espacio puede tener un horizonte y el tiempo un final, pero la aventura del aprendizaje es interminable". Timothy Ferris. La aventura del Universo.
miércoles, 18 de junio de 2025
UN LIBRO, UN POEMA (Eva Beriain)
martes, 17 de junio de 2025
LA LUNA Y SUS CICLOS
![]() |
Fuente: De la Tierra al universo |
Suele resultar difícil explicar, sin más apoyo que el de las palabras, que la Luna tiene un período orbital alrededor de la Tierra de 27,32 días y que el tiempo que transcurre entre dos fases es de 29,53 días. Surge el desconcierto e incluso la incredulidad (¿no te estarás confundiendo?, dice alguien). Es más, después de alguna frustrante experiencia en este sentido, ahora no suelo nombrar estas cosas, recurro a datos sencillos como la distancia, los nombres de algunos cráteres, de algunos mares y dejo que el personal disfrute viendo con detalle imposible para unos prismáticos la superficie de la Luna, que es lo que más gusta.
![]() |
Fuente: Descubrir la Luna |
El período orbital o sidéreo es el tiempo que tarda la Luna en dar una vuelta completa alrededor de la Tierra, tomando como referencia las estrellas fijas. Es de 27.32 días.
La diferencia entre un período y otro se debe al movimiento de traslación de la Tierra alrededor del Sol, lo que hace que la Luna necesite un poco más de tiempo para volver a estar en la misma posición relativa respecto al Sol y la Tierra. Mientras la Luna completa una vuelta alrededor de la Tierra, la Tierra se ha desplazado unos 27º sobre su propia órbita alrededor del Sol (recordemos que es el sistema Tierra-Luna el que se desplaza con respecto al Sol y que en ese desplazamiento, si tomamos el recorrido de nuestro planeta como una línea más o menos recta, el de la Luna sería una línea ondulante que a veces va por fuera y otras por dentro —en el segundo gráfico se puede apreciar bien lo que digo—).
lunes, 16 de junio de 2025
IRLANDA VISTA POR... JAMES JOYCE
GAS DE UN QUEMADOR
Señoras y señores, aquí están reunidos
para saber por qué la tierra y los cielos han temblado
a causa de las sombrías y siniestras mañas
de un escritor irlandés en tierras extranjeras.
Me envió un libro hace diez años:
lo leí unas cien veces,
del derecho, del revés, por arriba, por abajo,
de lejos y de cerca.
Lo imprimí todo hasta la última palabra
mas con la gracia de Dios
las tinieblas de mi mente se rasgaron
y entreví el vil propósito del autor.
Pero tengo un deber para con Irlanda:
guardo su honor en mis manos,
tierra de encanto que siempre mandó
a sus escritores y artistas al destierro
y con espíritu de chanza irlandesa
traicionó a sus caudillos uno por uno.
Fue el humor irlandés, húmedo y seco,
el que arrojó cal viva a los ojos de Parnell;
son los cerebros irlandeses los que salvan de la ruina
la barcaza que hace agua del obispo de Roma
pues todos saben que el Papa no puede eructar
sin el permiso de Billy Walsh.
¡Oh Irlanda mi primero y único amor
donde Cristo y César uña y carne son!
¡Oh tierra de encanto donde el trébol crece!
(Permítanme, señoras, que me suene).
Os manifiesto, sin que me importen un pito vuestras censuras,
que imprimí los poemas de Mountainy Mutton
y una obra teatral que escribió (la habéis leído, seguro)
donde se dice “bastardo”, “bujarrón” y “ramera”,
y otra pieza sobre la Palabra y San Pablo
y sobre algunas piernas de mujer que recordar no puedo,
escrita por Moore, caballero auténtico,
que vive de sus rentas con el diez por ciento.
![]() |
Ejemplar de la B. C. |
imprimí el breviario de Cousins
aunque (les ruego me perdonen) tales versos
provocarían acidez en sus traseros.
Imprimí folklore del norte y del sur
de Gregory la de la Boca Dorada.
Imprimí poetas tristes, tontos y solemnes.
Imprimí a Patrick cómo-se-llame.
Imprimí al gran John Milicent Synge
que se remonta sobre un ala angélica
con la camisola del aventurero que tomó como botín
de la bolsa de viajante del gerente de Maunsel.
Mas nada quiero saber de ese condenado sujeto
que anduvo por aquí vestido de amarillo austriaco,
declamando italiano por horas
a O’Leary Curtis y John Wyse Power
y escribiendo de Dublín, sucia y querida,
de tal forma que ningún impresor, ni aun africano, lo toleraría.
¡Mierda y cebollas! ¿Pensáis que imprimiré
los nombres del monumento a Wellington,
Sidney Parade y el tranvía de Sandymount,
la pastelería de Downes y la confitura de Williams?
¡Que me condene si lo hago… que al fuego me condene!
¡Hablar de los Topónimos irlandeses!
Me asombra, por mi alma,
que el autor olvidase mencionar Curly’s Hole.
No, señoras, mi imprenta no tomará parte
en libelo tan burdo contra mi madrastra Erin.
Me apiado de los pobres: he aquí la razón por la que empleé
a un escocés pelirrojo para que me lleve las cuentas.
¡Pobre hermana Escocia! Su sino es horrible.
Ya no encuentra más Estuardos que vender.
Mi conciencia es pura como la seda china,
mi corazón es blando como la manteca.
Colm les podrá decir que hice una rebaja
de cien libras en el presupuesto
que le anticipé para su revista irlandesa.
Amo a mi país: ¡lo juro por los arenques!
Ojalá pudierais ver cómo lloro
cuando pienso en los trenes y barcos de emigrantes.
Por eso publiqué a los cuatro vientos
mi guía de ferrocarriles del todo ilegible.
En el vestíbulo de mi institución impresora
la pobre aunque digna prostituta
practica la lucha libre cada noche
con su artillero británico de ajustados pantalones
y el forastero aprende el don de la charla
de la ebria y roñosa ramera dublinesa.
¿Quién fue el que dijo: no resistáis al mal?
He de quemar ese libro con la ayuda del diablo.
entonaré un salmo mientras lo veo arder
y guardaré las cenizas en una urna de una sola asa.
Haré penitencia con pedos y gemidos
de hinojos sobre mis rodillas.
Esta próxima cuaresma descubriré
mis nalgas penitentes al aire
y sollozando junto a mi imprenta
mi horroroso pecado confesaré.
Mi capataz irlandés de Bannockburn
hundirá su diestra en la urna
y su devoto pulgar estampará una cruz
Memento homo sobre mi trasero.
domingo, 15 de junio de 2025
KAPUSTIN, 8 ESTUDIOS PARA PIANO, PRELUDIO
sábado, 14 de junio de 2025
EXPOSICIÓN EN OKENDO DE LOS TALLERES DE DONOSTIA KULTURA
![]() |
Okendo Kultur Etxea |
viernes, 13 de junio de 2025
NADIA FABO EN "Poesía y Pensamiento" 2025
Nadia Fabo Andrés (Donostia, 1975), si no me equivoco, se formó como poeta en el taller de Karmelo Iribarren, aunque podemos suponer que ya mucho antes de pasar por él creaba versos. Lo cierto es que el reconocimiento como poeta empezó a partir de que obtuviera el Primer Premio del XI Certamen de Poesía María Luisa García Sierra, en 2019, con el poemario Un antílope en la garganta. Seguidamente llegaría la mención especial en el XXIX Premio de Poesía Cáceres Patrimonio de la Humanidad, en 2020 con el poemario Tina Turner en la cola del híper. En 2021 publicó Tenderete (LUPI, 2021). Al año siguiente ganó el XXXII Premio de Poesía Blas de Otero de Majadahonda con el poemario Hija. El año pasado hizo doblete, pues resultó ganadora del XVIII Premio Internacional de Poesía Ciudad de
Pamplona con el poemario Pitx, y ganadora del II Premio Internacional de Poesía Marpoética, un verdaderamente prestigioso premio, con el poemario Consejos de economía doméstica para extremófilos, que además del sustancioso premio en metálico, lleva consigo la publicación del libro en Visor. Los poemas que lee en el vídeo pertenecen a este último título.
jueves, 12 de junio de 2025
RETRATOS DE AMANTES (Margherita Luti), 14
![]() |
La fornarina. Rafael. Fuente: Wikipedia. Sitio original: Galería Nacional Barberini Corsini |
miércoles, 11 de junio de 2025
CHUS PATO EN DONOSTIA
![]() |
Editorial |
Poesía reunida. Volumen II (1996)
Poesía reunida. Volumen III (2000)
Poesía reunida. Volumen VII (Sonora)
Poesía reunida. Volumen IV (2004-2008): Próximamente
Poesía reunida. Volumen V (2009-2013): Próximamente
Poesía reunida. Volumen VI (Un libre favor): Próximamente
martes, 10 de junio de 2025
LA LUNA LLENA MÁS BAJA EN UNOS CUANTOS AÑOS
![]() |
La luna llena saliendo por detrás de la aguja del Buen Pastor |
Si te ha parecido que la Luna está un poco más baja en el cielo de lo que solía estar en otras ocasiones con luna llena, eres gran observador, y, efectivamente, no es una impresión, es una realidad.
Dentro de los varios movimientos que tienen los cuerpos celestes, los dos más conocidos, pues nos los explicaban en la escuela, el de rotación y el de traslación (girar sobre sí mismos y girar en torno a otro cuerpo celeste mayor, en el caso de la Tierra, alrededor del Sol), existe el de precesión que es el que tiene cualquier cuerpo que gira (un peonza, por ejemplo) y que consiste en que el eje de dicho cuerpo realiza una rotación lenta. Aquí el de la Tierra, que es igual que el de la peonza, la diferencia es solo de tiempo y de tamaño. Una vuelta completa dura aproximadamente 26000 años, así, cuando pasen 12000 años, será Vega la que marque de forma aproximada nuestro polo norte celeste:
![]() |
Fuente: fisicavirtual |
En ese ciclo, se producen eventos conocidos como grandes paradas lunares, cuando la Luna alcanza sus posiciones más extremas en el cielo. La última gran parada ocurrió en 2006, durante este junio de 2025 nos toca la siguiente, es decir, que tenemos la luna llena más baja sobre el horizonte en unos cuantos años, para los que estamos en el hemisferio norte, mientras que para quienes la observan desde el hemisferio sur, tendrán la luna llena más elevada.
TITÁN Y NOSOTROS
![]() |
Titán con Saturno al fondo. Fuente: NASA |
Que el futuro es una simple hipótesis sobre la que se pueden decir muchas cosas, pero que nadie conoce es una afirmación exacta. Por más vendedores de fantasías diversas que aparezcan en los medios de comunicación —en los que cada vez abundan más los charlatanes de todos los colores, similares a los de las redes sociales, cuyo fin último es conseguir mucha audiencia, pero no informar con exactitud de lo que hablan—, el futuro es incognoscible, por la sencilla y simple razón de que es futuro.
Viene esto a cuento de algunas fantasías que me han llegado durante las últimas semanas por diversos medios en torno a Titán, el satélite más grande de Saturno, con un diámetro de 5150 km, un poco menos de la mitad que el de la Tierra, y que gracias a su tamaño fue descubierto en el lejano 1655 por Christiaan Huygens.
Sin duda, la astronomía y sus sensacionales y llamativos datos pueden resultar muy atractivos, pero una cosa es especular sin conocimiento para llamar la atención y conseguir seguidores y otra muy distinta realizar hipótesis con conocimiento de causa.
Así es como el conocimiento habla: página 393 del manual De la Tierra al universo:
Titán es, y lo será durante los próximos eones, un mundo helado. Pero dentro de unos cuatro o cinco mil millones de años, el Sol abandonará la secuencia principal y se transformará en una gigante roja. Entonces la temperatura superficial de Titán aumentará, los hielos de la superficie se fundirán y los depósitos de moléculas orgánicas complejas, inmovilizados durante eras, se liberarán en un mar de agua, con amoniaco y metano en disolución.
El Sol se mantendrá en su fase de gigante roja durante unos 500 millones de años. En la Tierra, la vida tal vez se originó hace entre 4000 y 3800 millones de años, en cuanto el gran bombardeo le dio la más mínima oportunidad. ¿Es este el futuro que le espera a Titán? En cualquier caso, la lentitud de la evolución en la Tierra lleva a creer que la posible vida titaniana futura no llegaría más allá de los microorganismos simples.
Aún existe un problema añadido: cuando la temperatura de la atmósfera aumente, Titán ya no será capaz de retenerla. Cuando más prometedor parezca su futuro, es posible que Titán se convierta en un satélite más.
Hay quien ha propuesto que Titán será el refugio de la humanidad (en el improbable caso de que exista en esa remota era) cuando el Sol llegue a la fase de gigante roja. Sea como sea, con toda probabilidad no nos veríamos reconocidos en los seres que intentaran refugiarse en Titán. La evolución, actuando durante miles de millones de años ininterrumpidamente, nos habrá reducido al papel de lejanísimos antepasados.
Esto es cuanto hoy se puede decir sobre el futuro nuestro y el de Titán. Es tan apasionante como interesante, pero no es nada más que una hipótesis en el improbable caso de que existaMOS en esa remota era. Lo demás es sensacionalismo, desconocimiento o mala intención.
***
lunes, 9 de junio de 2025
SOBRE NIETZSCHE, EL ARTE Y LA CIENCIA
En el parágrafo 25 del tercer tratado del libro De la genealogía de la moral podemos leer lo siguiente:
¡No! No se me venga con la ciencia cuando lo que estoy buscando es el opuesto natural del ideal ascético, cuando lo que pregunto es: «¿dónde está la voluntad opuesta, en la que un ideal opuesto vendría a expresarse?» La ciencia no se apoya en sí misma, ni mucho menos, para poder serlo; se mire por donde se mire, antes necesita un ideal del valor, un poder creador de valores, a cuyo servicio pueda creer cuyo servicio pueda creer en sí misma, — ella misma jamás crea valores. Su relación con el ideal ascético no es en absoluto de oposición; es más, viene incluso a representar en su configuración interna la fuerza impulsora. Examinándolo con cuidado, vemos que su conflicto, su lucha no concierne para nada al propio ideal, sino sólo a lo que es su defensa exterior, su disfraz, su teatro de máscaras, a lo que con el tiempo queda endurecido, significado, hecho dogma — negando lo exotérico del ideal, la ciencia le devuelve la libertad a la vida que hay en él. Ambos, ciencia e ideal ascético, están plantados, desde luego, en el mismo suelo — esto ya lo he apuntado antes —: a saber, la misma sobrevaloración de la verdad (más exactamente: la misma fe en que la verdad no es ni valorable ni criticable), razón por la cual son necesariamente cómplices, — de tal modo que, en el supuesto de que se los combata, no se les puede combatir y poner en cuestión si no es siempre de manera conjunta. Cualquier valoración del ideal ascético trae consigo inevitablemente también una valoración de la ciencia: para darse cuenta de eso conviene Saro la mirada y aguzar el oído cuanto antes! (Lo que se opone al ideal ascético de manera mucho más radical que la ciencia — lo avanzo ya, aunque más adelante volveré a ello con mayor detalle — es el arte, — el arte, en el cual queda justificada la mentira, y la voluntad de engaño tiene de su parte a la buena conciencia: así lo intuyó el instinto de Platón, el mayor enemigo del arte que Europa haya tenido (p 191).Recordemos que cuando Nietzsche nos habla del ideal ascético nos está hablando de esa forma de entender la vida como camino de sufrimiento y de renuncia a los impulsos vitales (el gozo, la ilusión, la alegría de vivir, el disfrute de nuestro cuerpo...), que todo eso estaba unido a las viejas creencias cristianas de la vida como trayecto plagado de espinas para ganar la otra, la del más allá. Esta forma de entender la vida estaba intrínsecamente unida a la creencia de que la Verdad, lo mismo que el Bien, está garantizada por Dios. Pero si quitamos a Dios (Dios ha muerto), todo el edificio de la verdad metafísica, incuestionable e inmutable, se viene abajo.
La verdad, el conocimiento real, sin mediaciones extrañas que se interpongan, vendría dado, por consiguiente, por la investigación, el análisis de datos y experimentos, el contraste continuo de los estudios e indagaciones que la comunidad científica lleve a cabo de manera permanente. Lo que quiere decir que la verdad se va construyendo a medida que nuestro conocimiento va siendo más completo y detallado. No existe una verdad establecida para siempre en el ámbito del mundo físico.
Un ejemplo sencillo, que se entenderá rápidamente, es el de nuestro conocimiento astronómico. Hasta la revolución científica creíamos que cuanto veíamos en el cielo giraba en torno a la Tierra. Éramos geocentristas. Desde Galileo, quedó demostrado que Tierra y demás planetas giran en torno al Sol. Pasamos a ser heliocentristas, pero nuestro universo estaba reducido a una ínfima porción de la Vía Láctea. Con el tiempo, pudimos ver mucho más lejos y empezamos a descubrir que el pequeño universo de antaño estaba formado por miles de millones de galaxias, que se originó, según el modelo cosmológico estándar, en una gigantesca explosión (Big Bang) y que tiene aproximadamente 13800 millones de años.
He puesto un ejemplo tomado sobre el conocimiento astronómico. Igualmente podría haber sido uno sacado de la química, la biología, la geología, o cualquier otra disciplina de las ciencias naturales. He tomado el de la astronomía por lo sencillo que es y porque cualquier persona sin ningún conocimiento previo lo entiende. Esto es así hoy y lo era también a finales del XIX, que es cuando Nietzsche escribió su Genealogía.
Lo que me parece verdaderamente sorprendente es la afirmación que aparece en las últimas líneas que he transcrito: Lo que se opone al ideal ascético de manera mucho más radical que la ciencia — lo avanzo ya, aunque más adelante volveré a ello con mayor detalle — es el arte, — el arte, en el cual queda justificada la mentira, y la voluntad de engaño tiene de su parte a la buena conciencia.
Curiosamente, el arte de la segunda mitad del siglo XIX (desde la pintura a la música, pasando por la literatura) estaba profundamente impregnado de convicciones metafísicas, religiosas, espirituales e incluso mágico-esotéricas en muchas ocasiones. No era precisamente el mejor ejemplo para desprenderse de las verdades incuestionables. El arte, hoy como ayer, tiene muchas virtudes y puede ofrecernos grandes satisfacciones, pero difícilmente es capaz de ofrecernos una visión de lo real global con la que podamos manejarnos por la vida, la nuestra, la de todos los días.
Estoy convencido de que Nietzsche se equivocaba y puedo citar muchos artistas de ahora y del siglo XIX apegados a verdades inmutables de fuerte olor metafísico, pero no conozco a ninguna persona dedicada a la investigación científica que afirme que la ciencia posee la verdad incuestionable de los hechos.
***
domingo, 8 de junio de 2025
ABENDLIED, R. Schumann
Schumann (1810-1856) es posiblemente el más romántico de los músicos románticos, esto es, al que más características propias del movimiento musical conocido con ese nombre se le pueden atribuir. Además, también tiene en su haber, triste haber, algunas de las vicisitudes y desgracias que tendemos a asociar con el espíritu romántico.
Como compositor —la desgracia de su dedo le apartó a los 21 años de su carrera como virtuoso del piano—, son especialmente notables las numerosas canciones que compuso por su profundo lirismo y delicadeza, capaces de conmover a cualquiera.
Buena prueba de su espíritu romántico y de la extremada belleza recogida de sus lieder es esta sutilísima Canción de tarde sin texto de ningún tipo, que fue escrita para piano, pero que ha sido adaptada a numerosos instrumentos y combinaciones entre ellos.
sábado, 7 de junio de 2025
UNA SOCIEDAD CADA VEZ MÁS POLARIZADA
![]() |
Ejemplar del CBA |
Esta impresión mía la encuentro, de repente, objetivada con datos en un interesante libro, Los peligros de la moralidad, del psiquiatra Pablo Malo. El ensayo, como bien se puede deducir por el título, se ocupa de otro tema, pero algunos datos de una encuesta que en él encuentro hacen hincapié en mi impresión y la corroboran. Son datos referidos a la sociedad estadounidense.
En el capítulo La división Ellos/Nosotros y el tribalismo moral (pp 145-202) se exponen resultados de las encuestas de opinión realizadas en diversos momentos, pero siempre en torno a 2020, un poco antes y un poco después. Todas ellas arrojan siempre los mismos resultados sobre la "justificación del uso de la violencia contra el otro partido": de las más antiguas a las más recientes la proporción de personas que justifican el uso de la violencia siempre crece, y lo hace igualmente entre republicanos y demócratas, con un pequeño aumento mayor entre la gente que se sitúa más al extremo de cada uno de esos dos partidos. Los porcentajes asustan. No son 2% o del 5%, sino de un más de un tercio de la población encuestada.
Desde que recuerdo haber pensado sobre problemas y comportamientos sociales, siempre he tenido la impresión de que la pertenencia a un grupo determinado tiene mucha más importancia en nuestros acciones y manifestaciones que el ejercicio de la racionalidad. Sin duda, hay excepciones y personas capaces de abstraerse de su pertenencia a una familia determinada, pero, me temo que, por lo general, la respuesta mayoritaria es dejarse llevar por el grupo al que pertenecemos. Los comportamientos tribales (en el peor sentido de la palabra) surgen lo mismo ante una situación política, deportiva, religiosa, cultural, económica, festiva, histórica o lo que sea. Somos nosotros frente a ellos.
Si a esta forma de responder colectivamente ante los problemas, obstáculos, contratiempos y demás inconvenientes que vayan surgiendo, añadimos la incapacidad de líderes y representantes sociales para establecer espacios de colaboración y entendimiento; antes bien, hacen justamente lo contrario: señalar diferencias, establecer límites e incompatibilidades, crear discursos y proponer argumentos para señalar al otro como responsable de los males que nos aquejan, no es nada sorprendente que la división social sea cada vez mayor. Y conviene recordar que cuando en lugar de puentes lo que se abre entre grupos son abismos, las consecuencias son siempre nefastas.
No sé hasta dónde se puede seguir tensando la sociedad antes de que estalle un conflicto, pero sería deseable que más pronto que tarde empezáramos a cambiar la orientación de nuestros discursos para reconducir la situación y buscar espacios de cooperación y no de exclusión y desavenencia.
***

viernes, 6 de junio de 2025
EL MERCADO DE LOS DUENDES, Christina Rossetti
![]() |
Editorial |
En lo que es el campo de la literatura, la nómina estaría formada por los hermanos Rossetti, —Dante y Christina, hijos de un refugiado político italiano, lo que explica el apellido—, William Morris y Charles Swinburne. De los cuatro, ella será la única dotada de un temperamento auténticamente religioso —Esteban Pujals— que se manifestará claramente en buena parte de su obra, en la que podemos encontrar poemas que tienen por tema principal el amor, otros que giran en torno a la naturaleza y, por supuesto, los que son claramente de inspiración y temática religiosa.
De El mercado de los duendes la crítica académica, la no académica y la enloquecida —disculpadme el exabrupto— ha dicho muchas cosas. Su carácter alegórico, es cierto, puede dar pie a excentricidades varias como interpretaciones, atención, marxistas, feministas, feministas lésbicas, queer, lésbico-incestuosas, imaginistas, eróticas, mercantilistas y hasta vampíricas. La imaginación al poder.
Una parte de la crítica lo catalogó en su momento como infantil. Sobre esto ironizaba con mucho humor Harold Bloom en Poemas y poetas: En cierto sentido, es una poesía para niños, aunque ciertamente han de ser niños de todas las edades extremadamente inteligentes.
Juzgad por vuestra cuenta: