¿Dónde mi amor se demora?
A caballo se fue ya.
Ay, ¿ahora quién me amará?
*
He amado y amaré.
Cada día de mi vida,
tanto más feliz seré.
¡Qué gentil mi amigo es!
He amado y amaré.
Él me ama, yo bien lo sé:
hace bien, pues soy su amiga,
y mi ley le guardaré.
Las canciones de mujer, denominadas así por el protagonismo de la mujer, que expresa el sentimiento amoroso de forma directa, espontánea e intensa, tuvieron un lugar relevante en la primitiva lírica popular de las lenguas europeas. Surgen
en fechas muy tempranas (entre los siglos XI y XIII) a partir de un sustrato folclórico común. Suelen ser anónimas y de transmisión oral. Iban unidas especialmente al canto y a la danza. Posteriormente, cuando los autores cultos empezaron a apreciar la belleza de estas composiciones de temática amorosa y voz femenina, fueron recogidas por escrito, gracias a lo cual se han conservado. Con frecuencia, estos autores utilizaron dichas composiciones como molde para la creación de su propios poemas, de manera que, en ocasiones, es imposible saber si los textos conservados son creaciones populares auténticas o reelaboraciones de poetas cultos (Josefina, en el blog
Goliardos, trovadores, juglares. Jarchas, poesía galaico-portuguesa, poesía en catalán, poesía del cancionero. Como no vamos a entrar en discusiones académicas, ni tampoco se trata de realizar un ejercicio de erudición, sino de disfrutar de aquellos textos antiguos que han impregnado la memoria colectiva, se admiten hasta las composiciones de lo que ha quedado acuñado en los manuales de historia de la literatura como romancero viejo. Podéis leer una amplia muestra en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes.
- Cantigas de amigo de Martin Codax
- 500 Cantigas d’ Amigo
- Jarchas
- Moaxajas
- La canción de mujer: arcaísmo e innovación (Conferencia de Francisco Rico).