sábado, 18 de noviembre de 2023

IBARROLA EN DONOSTI

😢Hasta siempre
 
Tal vez Ibarrola ostente dos récords entre los grandes artistas vascos contemporáneos con obra en las calles de la ciudad: ser el más vandalizado y tener la obra más desconocida. 

De las tres —que yo sepa— obras escultóricas que podemos ver en la ciudad, dos de ellas pueden encontrarse en lo más alto de una triste y lamentable lista de obras de arte hostigadas. El monolito del puerto, por hostigamiento ideológico (afortunadamente, desde hace unos años, disfruta de un período de tranquilidad).


La que lleva por título Las siluetas, por hostigamiento grafitero descerebrado e ignorante. Y tanto ha sido y sigue siendo, que las huellas son ya indelebles a pesar de las sucesivas limpiezas. Una obra magnífica, que por sí sola merece la pena el paseo hasta la plaza en que está instalada





La tercera, Juego de niños, además de recordarnos que Ibarrola siempre fue un creador abierto a la utilización de materiales muy diferentes y utilizar estilos compositivos muy distintos, en este caso profundamente dinámico, seguramente solo es conocida por el vecindario del barrio que en su momento incluso la calificó de "fea y poco adecuada". 



Por cierto, este Juego de niños realizado con traviesas de ferrocarril se encuentra a menos de cien metros de la anterior, en la plaza contigua, que dispone, cómo no, de juegos para niños. 

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viernes, 17 de noviembre de 2023

A VUELTAS CON LOS CLÁSICOS Y CONTRA LA VIOLENCIA

Ejemplar de la biblioteca de Aiete
Los clásicos grecolatinos son una fuente inagotable de inspiración, reflexión y enseñanza. Este título, Pensar como Ulises, de Bianca Sorrentino, es el penúltimo ejemplo de esa afirmación. 

Utiliza la autora con buen criterio y mucha habilidad el juego de citas y alusiones que la literatura y el pensamiento contemporáneo realiza amparándose en las obras clásicas de la literatura griega, y demuestra —una vez más— cómo la mayor parte de los temas sobre los que hoy seguimos dando vueltas —igualdad, justicia, política, violencia, cuerpo...— pueden encontrar socorro si acudimos a las enseñanzas que se esconden en los textos clásicos.

Me gusta especialmente el capítulo 5, En una lucha sin fin, en el que hay un apartado que lleva por título "¿Para qué sirve el canto en tiempos de violencia?" y que, aunque no lo mencione la autora, es evidente que tiene como telón de fondo el famoso dictum de Adorno sobre lo de escribir poesía después de Auschwitz como un acto de barbarie.

Copio un par de párrafos:
 
El arte contiene la realidad además de representarla; y no importa si se hace portadora de verdades parciales o de inauditas mentiras: su poder en todo caso es clamoroso porque toca cuerdas del alma de otro modo inaccesibles. Con seguridad, el relato que escucha Odiseo está plagado de omisiones, malentendidos, interpretaciones más o menos correctas, y, sin embargo, es emotivamente relevante, ya que actúa sobre los puntos clave del olvido y del recuerdo, llena un vacío, recompone los fragmentos, arroja luz sobre el sentido de la verdadera vida encuadrando bien su imagen. el canto de Demódoco, que en el conflicto encuentra su origen y del conflicto es en cierta medida celebración, es necesario para Ulises a fin de recuperar su humanidad, de reafirmar el deseo de paz que ahora motiva su viaje (se está refiriendo al libro VIII en el que Demódoco, cantor ciego, celebra la gesta de Troya. Página 103).

Y en el párrafo siguiente (p 104) dice:

La capacidad que la poesía tiene de despertar el alma de su indolente sopor y llamarla de nuevo a la vida precisamente a partir de las barbaries de la historia es evidente también en la obra del heredero latino de Homero. Según Seamus Heaney, premio Nobel de literatura en 1995, en las Bucólicas es Virgilio quien hace resonar la pregunta que acucia a todos los poetas: "¿para qué sirve el canto, para qué sirve el arte en tiempos de violencia?" (Podéis encontrar la respuesta en Seamus Heaney Virgilio nella Bann Valley).

Sea como fuere, y sin entrar en el debate, Sorrentino ha escrito un hermoso libro en el que se demuestra por enésima vez el valor y la actualidad de los clásicos, así como la impronta que han dejado en los autores contemporáneos. Por si alguien lo ponía en duda.

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jueves, 16 de noviembre de 2023

EL AFFAIRE ARNOLFINI, Jean-Philippe Postel

Ejemplar de la biblioteca de Aiete
 De cuantos libros sobre obras de arte o artistas he leído este es el que más se aproxima al género narrativo, a la novela, lo que hace de él una lectura adictiva. No, no es una novela, es un ensayo sobre lo que conocemos como El matrimonio Arnolfini o Retrato de Giovanni Arnolfini y su esposa, que se encuentra en la National Gallery de Londres. Y no lo digo por toda esa cantidad de elementos simbólicos que aparecen repartidos por la habitación, a los que era tan aficionada la representación pictórica de aquel tiempo. 

No, no es por eso, ni mucho menos. Se trata de que el trabajo de investigación lo plantea su autor como un relato de intriga en el que los hechos y las evidencias —cuando existen— se nos van presentando poco a poco, al mismo tiempo que nuestra curiosidad por el desvelamiento del caso van creciendo. Pero, ay, este no es un relato de ficción en el que quien escribe tiene todas las respuestas y nos las va a ofrecer al final del mismo. Se trata de una investigación real para intentar averiguar si quienes ahí figuran son realmente los Arnolfini o es el propio Jan van Eyck; si el espejo nos está mostrando la realidad tangible y material o en él se ven imágenes que están más relacionadas con el mundo de las creencias; si la mujer está o no embarazada, o incluso si está realmente presente o es de una aparición. 

Zuecos de uno y de otra, velas encendidas y apagadas, naranjas, pequeños adornos en forma de esculturas de los asientos, inscripciones en latín, la colocación de las manos, los colores de los ropajes, el perro que es perro o no lo es, el rosario colgado junto al espejo, la propia historia del lienzo y sus viajes por Europa hasta terminar donde ahora está... Todo, absolutamente todo tiene su porqué, aunque tal vez nunca lleguemos a conocer quiénes son esas dos personas que no se miran. La realidad no siempre nos ofrece todas las respuestas.

Absolutamente recomendable para quienes rehúyan el ensayo sobre arte porque creen que es aburrido, o demasiado serio, o difícil de entender. 

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miércoles, 15 de noviembre de 2023

UN LIBRO, UN POEMA (T. S. Elliot)

Editorial
Nota previa: 

Desde hace unos días, paralelamente a esta sección Un libro, un poema he iniciado en WhatsApp, en el apartado "novedades", la publicación diaria de un poema bajo el hashtag (#) un poema al día. Es, lógicamente, una fórmula absolutamente efímera, pasadas las 24 horas, desaparece, pero quienes tenéis mi número podéis ver el poema, que cada día será de un libro distinto... 

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#unlibrounpoema

Elliot ya es un clásico del siglo XX y no necesita presentación de ningún tipo. Guste o no, se haya leído o no, todo el mundo sabe que es el autor de obras tan influyentes en su época como La tierra baldía o Cuatro cuartetos.

Hoy dejo aquí, en traducción de José María Valverde

LA CANCIÓN DE AMOR DE J. ALFRED PRUFROCK


Si yo creyese que mi respuesta fuese
a persona que alguna vez volviera al mundo,
esta llama quedaría sin más sacudidas.
Pero como jamás desde este fondo
volvió nadie vivo, si es verdad lo que oigo,-+
sin temor de infamia te respondo.

DANTE, INFERNO, XXVII


Vamos entonces, tú y yo,
cuando el atardecer se extiende contra el cielo
como un paciente anestesiado sobre una mesa;
vamos, por ciertas calles medio abandonadas,
los mascullantes retiros
de noches inquietas en baratos hoteles de una noche
y restaurantes con serrín y conchas de ostras:
calles que siguen como una aburrida discusión
con intención insidiosa
de llevarnos a una pregunta abrumadora…
Ah, no preguntes "¿Qué es eso?"
Vamos a hacer nuestra visita.

En el cuarto las mujeres van y vienen
hablando de Miguel Ángel.

La niebla amarilla que se restriega el lomo en los cristales de las ventanas,
el humo amarillo que se restriega el hocico en los cristales de las ventanas,
metió la lengua lamiendo los rincones del atardecer,
se demoró en los charcos quietos sobre los sumideros,
dejó que le cayera en el lomo el hollín que cae de las chimeneas,
resbaló por la azotea, dio un brinco repentino,
y, viendo que era una suave noche de octubre,
se enroscó una vez en torno a la casa y se quedó dormido.

Y claro que habrá tiempo
para el humo amarillo que se desliza por la calle,
restregándose el lomo contra los cristales de las ventanas;
habrá tiempo, habrá tiempo
de preparar una cara para encontrar las caras que encuentras;
habrá tiempo de asesinar y de crear,
y tiempo para todos los trabajos y los días de las manos
que levantan y dejan caer una pregunta en tu bandeja;
tiempo para tí y tiempo para mí,
y tiempo aún para cien indecisiones,
y para cien visiones y revisiones,
antes de tomar té con tostadas.

En el cuarto las mujeres van y vienen
hablando de Miguel Angel.

Y claro que habrá tiempo
de preguntarse "¿Me atrevo?", y "¿Me atrevo?"
tiempo de volver atrás y bajar la escalera,
con un claro de calvicie en medio de mi pelo
(dirán: "¡Cómo le está clareando el pelo!")
mi chaquet, mi cuello duro subiendo firmemente hasta la barbilla,
mi corbata rica y modesta, pero afirmada con un sencillo alfiler-
(dirán: "Pero ¡qué delgados tiene los brazos y las piernas!")

¿Me atrevo
a molestar al universo?
En un minuto hay tiempo
de decisiones y revisiones que un minuto volverá del revés.
Pues les he conocido ya a todos, les conozco a todos—
he conocido los anocheceres, mañanas, tardes,
he medido mi vida con cucharillas de café:
conozco las voces que mueren con una caída agonizante
bajo la música de un cuarto de más allá.
Así ¿cómo podría hacerme ilusiones?

Y he conocido ya los ojos, los conozco todos—
los ojos que te miran fijos en una expresión formulada,
y cuando esté formulado, despatarrado en un alfiler,
cuando esté clavado y retorciéndome en la pared,
¿cómo empezaría entonces
a escupir todas las colillas de mis días y maneras?
Y ¿cómo podría hacerme ilusiones?

Y he conocido ya los brazos, los conozco todos—
brazos con pulseras y blancos y desnudos
(¡pero, a la luz de la lámpara, con vello parado claro!)
¿Es perfume de un traje de mujer
lo que me hace divagar así?
Brazos que se extienden en una mesa, o que se arropan en un chal.
¿Y cómo hacerme ilusiones entonces?
¿Y cómo iba a empezar?

........................................................

¿Diré que he pasado al oscurecer por estrechas calles
observando el humo que se eleva de las pipas
de hombres solitarios en mangas de camisa, asomados a la ventana?

Debería yo haber sido un par de ásperas garras
corriendo por los fondos de mares silenciosos.

.......................................................

!Y la tarde, el anochecer, duerme tan pacíficamente!
Alisada por largos dedos,
dormida… cansada… o se hace la enferma,
extendida en el suelo, aquí junto a ti y a mí.

¿Debería yo, después del té con pastas y helados,
tener la energía de forzar el momento hasta su crisis?
Aunque he visto mi cabeza (ya ligeramente calva) presentada en una bandeja,
no soy ningún profeta —y no se trata aquí de nada importante;
he visto chisporrotear apagándose el momento de mi grandeza,
y he visto al eterno Lacayo, alargándome mi abrigo y riéndose con disimulo,
y, en resumen, tuve miedo.

Y habría valido la pena, después de todo,
después de las tazas, la mermelada, el té,
entre la porcelana, entre un poco de charla tuya y mía,
habría valido la pena
descabezada de un mordisco el asunto con una sonrisa,
apretar el universo en una bola
echándolo a rodar hacia alguna pregunta abrumadora,
decir: “Soy Lázaro, venido de entre los muertos,
vuelto para decíroslo todo, os lo diré todo”-,
si alguna, poniéndose una almohada junto a la cabeza,
dijera. “No es eso lo que yo quería decir en absoluto.
No es eso, de ningún modo”.

Y habría valido la pena, después de todo,
después de las tazas, la mermelada, el té,
entre porcelana, entre un poco de charla tuya y mía,
habría valido la pena
descabezar de un mordisco el asunto con una sonrisa,
apretar el universo en una bola
echándolo a rodar hacia alguna pregunta abrumadora,
decir: "Soy Lázaro, venido de entre los muertos,
vuelto para decíroslo todo, os lo diré todo"—,
si alguna, poniéndose alguna almohada junto a la cabeza,
dijera: "No es eso lo que yo quería decir en absoluto.
No es eso, de ningún modo".

Y habría valido la pena, después de todo,
habría valido la pena, 
después de las puestas de sol y los jardincillos delante de casa, y las calles regadas,
después de las novelas, después de las tazas de té, después de las faldas que se arrastran por los suelos,
y esto, ¿y tanto más?
¡Es imposible decir precisamente lo que quiero decir!
Pero si una linterna mágica proyectara los nervios como estructuras en una pantalla:
habría valido la pena
de que alguna acomodándose una almohada o tirando a un lado un chal,
y voliéndose a la ventana, dijera:
"Eso no es en absoluto,
eso no es lo que quería decir en absoluto."

.......................................................

¡No! No soy el príncipe Hamlet, ni tenía por qué serlo;
soy un noble del séquito, uno que sirve
para hacer bulto en una comitiva, empezar alguna que otra escena,
aconsejar al príncipe: sin duda, un fácil instrumento,
respetuoso, contento de ser útil,
político, cauto y meticuloso;
lleno de elevado fraseo, pero un poco obtuso;
a veces, incluso, casi ridículo—
a veces, casi, un Bufón.

Envejezco… envejezco…
Tengo que llevar vueltas en los bajos de los pantalones.

¿Me saco raya en el pelo por detrás? ¿me atrevo a comerme un melocotón?

Me pondré pantalones blancos de franela, y pasearé por la playa.
he oído a las sirenas cantándose unas a otras.
No creo que me canten a mí.
Las he visto cabalgar en las olas mar adentro
peinando el blanco pelo de las olas echando atrás
cuando el viento sopla el agua hasta ponerla blanca y negra.

Nos hemos demorado en las cámaras del mar
junto a ondinas enguirnaldadas de algas, en rojo y pardo,
hasta que nos despierten voces humanas y nos ahoguemos.

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martes, 14 de noviembre de 2023

MARISA ITURRIZA PRESENTA "TIEMPOS DIFÍCILES"

Editorial


La novela, como bien nos cuenta la autora en el vídeo, es una historia íntimamente relacionada con la historia reciente del País Vasco. Su padre es uno de aquellos "niños de la guerra" que embarcaron en Bilbao hacia Inglaterra. De hecho, la segunda parte, que es la que se ocupa de aquel traslado y de la estancia en aquellas tierras, ha sido recogida en la página web basquechildren.org. Ahí podéis leer la segunda parte completa.

La novela podéis adquirirla en Arzu liburudenda (Hondarribia), entrando en contacto con la autora o haciendo el pedido a la editorial.

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lunes, 13 de noviembre de 2023

RUBENS

Autorretrato. Fuente: Wikipedia.

Rubens (1577-1640) fue diplomático, políglota, intelectual, erudito y el pintor más afamado y celebrado de su tiempo. Su estilo dinámico y colorista ejerció un enorme impacto en la Europa del primer tercio del siglo XVII. 

Se formó como artista en los talleres de Verhaecht, van Noort y van Veen. En Italia aprendió de la obra de Tiziano, Rafael y Leonardo. Fue pintor de la corte del archiduque Alberto de Austria y aunque su capacidad y sus deberes diplomáticos le obligaron a viajar por Italia, Francia, España y Reino Unido, pasó la mayor parte de su vida en Amberes.

Pintó paisajes, retratos, pintura histórica, escenas religiosas, mitológicas —podéis ver una nada despreciable muestra en este enlace— e infinidad de bocetos. El Museo del Prado dispone de una gran cantidad de información en forma de vídeos, textos y material gráfico.



Y ya puestos, un poemita que le  dediqué en El fecundo rumor de las miradas, título al que estoy añadiendo más poemas y que tengo la intención de reeditar.

RUBENS


La vida irrumpe generosa,
enérgica,
como si estuviera enamorada
de sí misma
y de sus formas.
Faunos, diosas y caballos,
y hasta cristos, reyes y paisajes
la celebran.
Y parece que la vida les responde
afirmativamente.


Carnalidad latente,
no hay culpa ni castigo.
Todo esfuerzo se dirige
hacia la felicidad.

Fuente y ©Museo del Prado

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domingo, 12 de noviembre de 2023

SINFONÍA Nº 6, Shostakovich

 

Después de acudir el viernes al concierto de la Orquesta Sinfónica de Euskadi —gracias mil veces, Jaime— sigo todavía en modo shostakovich y vuelvo a sumergirme en esta 6ª sinfonía que, según dicen quienes saben de estas cosas, es un poco rara por lo de los tres movimientos tan distintos: el primero de reminiscencias mahlerianas, y los siguientes mucho más breves y juguetones. Para quien hoy necesite una buena dosis de energía, que vaya directamente al tercero —31' 05''— y que se deje animar. Con eso ya tiene para echarse a la calle y comerse el domingo.

Dirige: Leonard Bernstein.

Interpreta: Filarmónica de Viena.

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viernes, 10 de noviembre de 2023

FOTOTEKA BIZILEKU, Juankar Hernandez

Sua bezain beroa (Caliente como el fuego).

La Casa de Cultura de Egia acoge en su sala de exposiciones una muestra de los trabajos del artista y bloguero Juankar Hernandez. Bajo el título de Fototeka bizileku —que es el nombre del blog donde publica—, se recogen veintiuna muestras de su quehacer artístico, en el que se combinan con la técnica del collage la fotografía, el óleo, pintura acrílica y tinta. 

Intentsitatea (Intensidad).

Iragarrezintasuna (Impermeabilidad).

Ukitu argia (Toque claro).

A la entrada de la sala disponéis de hojas a manera de guía, donde aparecen los títulos de las obras, el correo del autor y las redes sociales en las que muestra su actividad creativa.


HORARIO:

De lunes a viernes: 10:00 - 14:00 / 16:00 - 20:30


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jueves, 9 de noviembre de 2023

OCULTACIÓN DE VENUS POR LA LUNA

Hoy, 11:15.

Recojo aquí estas imágenes para todas aquellas personas que por unas u otras razones no hayan podido ver el eclipse de Venus tras la Luna que se ha producido esta misma mañana. 

En el tránsito por detrás de nuestro satélite Venus ha empleado poco más de media hora.
 
Hoy, 11:52.

Por si acaso alguien se despista con eso de la luna menguante que tenemos ya en su fase final y se extraña de que Venus no haya aparecido inmediatamente después de la escasa superficie lunar visible, debemos recordar que siempre está entera, aunque cada día se vea una porción distinta de ella. Eso se debe a que Luna, Sol y Tierra están continuamente en movimiento y desde nuestro planeta vemos cada día un sector diferente, que va en aumento hacia la luna llena, o en disminución hacia la luna nueva, en razón de la zona iluminada por nuestra estrella que podamos ver desde nuestra posición. Por esa razón he colocado esa tenue línea azul, para marcar toda la superficie del satélite.

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NOSOTROS DOS EN LA TORMENTA

Ejemplar de la biblioteca del Ernest Lluch
Dos protagonistas. Uno pertenece al Ejército Revolucionario del Pueblo; otro, a Montoneros. Pero estos dos no son los que están en la tormenta, aunque también, porque toda Argentina estaba en los años 70 sumida en una dolorosa tormenta. Amigos desde la infancia, ambos se reúnen y charlan, tal y como se recoge en la portada, sobre el tejado del galpón del montonero cuando la militancia y las organizaciones respectivas lo permiten. Y entre dudas, afirmaciones, sueños y consignas, uno de ellos suelta: Se supone que la muerte tiene que tener un significado, Alejandro. Pero cuantos más muertos hay, menos significa cada muerto (p 435). No dejéis escapar la afirmación, dadle alguna vuelta. 

Pero voy con los dos, el padre y el hijo. Sí, también están los familiares, y los vecinos, y toda esa gente con la que habitualmente nos relacionamos, porque la vida nos pone mucha gente alrededor. Los dos son Alejandro (el del ERP) y su padre. Un padre que sabe dónde está su hijo y cuyo mayor miedo es que un día deje de verlo porque le llegue la noticia de que ha caído en algún enfrentamiento. Un padre que reflexiona inútilmente: Y sí, hijo. Eso es lo que hacen los fanáticos. En lugar de ver que las cosas son múltiples, son confusas, son cambiantes, se mueven entre categorías puras de luces y oscuridades, infiernos y paraísos, pasados y porvenires. No. Me equivoco. El plural les queda grande. Una luz, un paraíso, un porvenir. Y ustedes, por supuesto, deben juzgar a todos y proceder en consecuencia. Porque son los dueños de la verdad (p 432).

Eduardo Sacheri nos cuenta las idas y venidas de dos militantes, sus convicciones, sus relaciones, sus miedos y sus alegrías desde un punto de vista muy efectivo para el relato y para quien lee, porque desaparece el narrador omnisciente y son los propios personajes quienes nos van dando a conocer sus propias vivencias y pensamientos. Al dinamismo del texto contribuye de manera muy efectiva el hecho de que cada capítulo (siempre muy breve) se centre en un personaje y una situación diferente, lo que produce una sensación de agilidad y un muestrario de perspectivas que favorecen que el interés lector se mantenga siempre vivo. 

Todo este recorrido por diversos contextos —pisos francos, domicilios familiares, lugares de atentados, universidad, transportes...—, además de aportar agilidad al relato, propicia la presentación de personajes distintos de la sociedad bonaerense de la época, lo que permite al autor ofrecer un amplio friso social de aquel momento y disponer de muchos puntos de vista, tantos como para que tal vez hoy podamos sentarnos (...) a recordar esos años lejanos y difíciles en los que no podíamos conversar diez minutos sin discutir, ni quince sin pelear (p 277). Habla de Argentina, pero se puede poner cualquier otro lugar y época. Y todo ello en deliciosa habla d'ayá, ché.

No me extrañaría nada que dentro de poco hubiese película.

Si queréis oír al propio autor ofreciendo sus explicaciones, disponéis de una gran cantidad vídeos donde poder hacerlo. 

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miércoles, 8 de noviembre de 2023

LITERAKTUM 2023


 Ya se ha publicado el programa completo de actividades del Literaktum 2023 que comienza la próxima semana. Y si vives en la ciudad o te puedes acercar a ella, lo puedes conseguir en papel en cualquiera de las bibliotecas/centros de cultura. 


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UN LIBRO, UN POEMA (Octavio Paz)

En librerías.
#unlibrounpoema

Esta magnífica antología de textos —prosa y verso, ensayo y creación— del inmenso Octavio Paz supuso mi primer conocimiento de la escritura del mexicano y el nacimiento de una fascinación que perdura desde entonces. La antología corrió a cargo del escritor Julián Ríos, autor, por cierto de maravillosa Babel de una noche de San Juan. 

De la antología tomo este poema que pertenece a la colección Ladera Este:


EJE


Por el arcaduz de sangre

Mi cuerpo en tu cuerpo

                                 Manantial de noche

Mi lengua de sol en tu bosque

                                           Artesa tu cuerpo
Trigo rojo yo

                  Por el arcaduz de hueso

Yo noche yo agua

                         Yo bosque que avanza

Yo lengua

              Yo cuerpo

                            Yo hueso de sol

Por el arcaduz de noche
 
                                  Manantial de cuerpos

Tú noche del trigo

                          Tú bosque en el sol

Tú agua que espera

                            Tú artesa de huesos

Por el arcaduz de sol

                              Mi noche en tu noche

Mi sol en tu sol

                      Mi trigo en tu artesa

Tu bosque en mi lengua

                                  Por el arcaduz del cuerpo

El agua en la noche

                            Tu cuerpo en mi cuerpo

Manantial de huesos

                              Manantial de soles


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lunes, 6 de noviembre de 2023

PUSHKIN NARRADOR

Al comenzar a redactar esta entrada, la había titulado como "El otro Pushkin". Ese título tenía sentido para este espacio en el que doy mucha mayor atención al género poético y que nació para servir de apoyo a las tertulias irunesas. He decidido cambiarlo porque para la inmensa mayoría de la gente que lee no tendría sentido. En todo caso, el "otro" Pushkin, sería el que escribía poemas. En fin, sea como fuere, aquí estoy haciendo publicidad del Pushkin novelista, o si lo preferís, recomendando un par de novelas que tal vez sean los dos títulos más destacados de la obra de este genial escritor ruso: Eugenio Oneguin y La hija del capitán.

De la primera resulta sorprendente —tal vez no para la época (1831)— que sea una novela en verso y que algunas traducciones respetan. El término sorprendente no lo digo por lo del verso, sino por lo de novela. La época era proclive a los poemas extensos con cientos y miles de versos, pero Pushkin es consciente de que no está escribiendo un poema, sino una novela. Y, esto es importante, no la recomiendo por la forma de escritura que eligió para plasmar la vida del protagonista, sino porque es un magnífico reflejo de la sociedad de la época y, sobre todo, de eso que ha dado en llamarse la plasmación del hombre superfluo, ese ser inútil, innecesario, que pasa por la vida sin tener ningún propósito útil para nadie, tampoco para el mismo. Por cierto, la plasmación de este personaje tuvo más de una representación en la literatura: 1836, La confesión de un hijo del siglo (Musset); 1850, Diario de un hombre superfluo, y 1859, Nido de hidalgos (Turguénev). Eso, que yo conozca.

La hija del capitán
, ahora sí, escrita en prosa, es una magnífica incursión desde la literatura romántica en la narración de carácter realista y con apuntes históricos más que notables. Palabras de Gógol: En comparación con La hija del capitán, todos nuestros relatos y novelas no son más que una empalagosa mezcolanza. La pureza y naturalidad alcanzan en ella tan alto grado, que la propia realidad parece artificial y caricaturesca. Ahí es nada. 

Y ya puestos a recomendar, me atrevo a decir, para quien pueda leer en euskera, que la traducción de José Morales Belda es una traducción más rica y con mayor cantidad de matices que la que yo leí en castellano hace ya mucho tiempo y que es la que está recogida en el volumen 16 de la colección Las mejores novelas de la literatura universal, Cupsa, 1983.

En cualquier caso, lo importante no es el matiz de que a mí me guste más un traducción que otra. Supongo que traducciones buenas habrá muchas. Lo importante es que para conocer a un autor se lea su obra, ya sea en prosa o en verso, y lo ideal sería que pudiéramos hacerlo en el idioma en que escribió, pero afortunadamente las traducciones nos ponen siempre al alcance textos a los que no tendríamos acceso si no fuera por ellas.  

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domingo, 5 de noviembre de 2023

PHOENIX CONSORT (The road home - Con amores, la mi madre)


Bajo esta ondulada techumbre me cobijé del temporal del jueves en la esperanza de que las moduladas voces del Phoenix Consort me ofrecieran también un remanso de belleza que me hiciera más amable el día. Y, ciertamente, así ocurrió. Incluso en mayor dosis de la que esperaba. 

Este conjunto vocal, que se especializa en música coral y que está formado por artistas jóvenes, que son o que han sido estudiantes de la Universidad de Durham, resultó ser una agradabilísima sorpresa. Tanto es así que me animé a grabar los dos últimos temas y poder dedicarles esta sección de los domingos. Por desgracia, la grabación está realizada con un teléfono y carece de la calidad de sonido que el grupo se merece, por eso os invito a que paséis por su página web y disfrutéis de un sonido mejor con el que apreciar verdaderamente la calidad de sus voces.


Tell me, where is the road
I can call my own, 
That I left, that I lost 
So long ago? 
All these years I have wandered, 
Oh when will I know 
There's a way, there's a road 
That will lead me home? 

After wind, after rain, 
When the dark is done, 
As I wake from a dream 
In the gold of day, 
Through the air there's a calling 
From far away, 
There's a voice I can hear 
That will lead me home. 

Rise up, follow me, 
Come away, is the call, 
With the love in your heart 
As the only song; 
There is no such beauty 
As where you belong; 
Rise up, follow me, 
I will lead you home.



Con amores, la mi madre,
con amores m´adormi.

Así dormida soñaba,
lo qu´el corazón velaba,
Qu´el amor me consolaba,
Con más bien que merecí.

[Adormeciome el favor,
Que amor me dio con amor,
dio descanso a mi dolor,
la fe con que le serví].


Juan de Anchieta

La última estrofa la he colocado entre corchetes porque, os habréis dado cuenta, esa estrofa no la cantan.

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sábado, 4 de noviembre de 2023

EUSKAL IRUDIGILEAK, 20 URTE

Exposición en el Centro Cultural Aiete.

 Hasta el 26 de noviembre







Pdf del libro que conmemora el vigésimo aniversario de la asociación.

Horarios:

De martes a viernes: 16:00 - 20:30
Sábados: 10:00 - 14:00 / 16:30 - 20:00
Domingos: 10:00 - 14:00
Lunes y festivos: cerrado

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