Y si esa hipotética persona es juguetona y le gustan los retos, la resolución de problemas lógico-matemáticos y ponerse a pensar en soluciones durante un ratito, mejor que mejor, porque Frabetti ofrece hasta 14. Un ejemplo: Sabiendo que uno de cada cuatro años es bisiesto excepto si es divisible por cien pero no por 400, ¿cuánto dura exactamente un año? Por supuesto, para quienes no tienen ganas de enredarse o, después de intentarlo, no dan con la respuesta correcta, el autor ofrece las soluciones.
Otra virtud del libro es que está perfectamente surtido de imágenes, esquemas y anécdotas varias para que la comprensión de lo que se explica pueda ser entendida rápidamente y sin dificultad. Y no descuida las microbiografías de aquellas personalidades que trajeron algún avance en el pensamiento matemático en su momento, colocadas, como es de suponer, en el contexto del tema que se desarrolla.
Incluye, además, una esencial y brevísima, pero muy sabrosa y bien comentada bibliografía recomendada; un pequeño glosario para quien lo necesite si es que llega el caso, y una relación de blogs y páginas webs (todas ellas en activo en la hora en que redacto estas líneas) para no perder la pista al tema.
La editorial ha subido las primeras 20 páginas para que se pueda comprobar que lo que aquí digo es verdad. Bromas aparte, me parecen muy útiles porque en esas primeras páginas está el índice, lo que permite hacernos una rápida idea de cuál es el contenido del libro.
Ideal para regalo si conocéis a alguien en vuestro entorno que empiece a manifestar la irresistible atracción de los números.


