Río Duero |
cabeza de Extremadura,
con su castillo guerrero
arruinado, sobre el Duero;
con sus murallas roídas
y sus casas denegridas!
Soria es, qué duda cabe, mucho más que sus poetas; pero Soria tiene más brillo, más encanto y más profundidad si callejeamos por ella con unos cuantos textos en la mano.
No quiero hacer aquí la competencia al Ayuntamiento de la ciudad ni a los guías sorianos que tienen su ruta machadiana, a buen seguro, muy bien organizada. Sólo es una sugerencia de paseo con algunos textos de Bécquer, Gerardo Diego y A. Machado.
El Mirón |
Claustro de S. Juan del Duero |
mi lateral, oblicua, alta mirada
de pájaro. Tu enigma, tu cruzada
te dejó puro, oh claustro, oh flor del Duero.
Tus cánones, antífonas, corales
juegan al corro de las cuatro esquinas,
que a la luz de la luna de las ruinas
varía sus mudanzas espectrales.
¿O quedaste inconcluso, criatura
perfecta, como estás, abierto al cielo?.
Nieves, soles, escarchas, tu ventura
respetan, tus cadenas y tu anhelo.
¿Alzará el vuelo un día tu hermosura?
Callejeando por la ciudad descubriremos enseguida el instituto donde dio clases de francés Machado, la iglesia donde se casó o la campana de la audiencia que daba la una, en la misma Plaza Mayor. Pero, seguramente, lo que primero vais a descubrir es el casino, porque al lado de la entrada hay una escultura de G. Diego tomando café y una silla vacía para que podamos fotografiarnos a su lado. En este casino tocaba el piano el poeta del 27, además de leer y escribir. También está situado el reciente museo Casa de los poetas, dedicado, cómo no, a G. Diego, A.Machado y G.A. Bécquer. Por cierto, en el portal de entrada conviven sendos poemas de Diego y Machado. Podéis entreteneros argumentando sobre cuál os gusta más o menos.
Me dejo muchos lugares y textos para que los vayáis descubriendo por vuestra propia cuenta, aunque si hacéis uso de los enlaces, tenéis material para organizaros una completa ruta paisajístico-literaria. En todo caso, si vais algún día a Soria, no olvidéis echar en la maleta algún libro de esos tres poetas.