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miércoles, 15 de octubre de 2025

UN LIBRO, UN POEMA (Sholeh Wolpé)

Ejemplar del KM
 #unlibrounpoema 

Como se puede ver ppor la entrada de hoy, mi mayor fuente de lectura y aproximación a los libros continúa siendo la biblioteca del Koldo Mitxelena. Gracias a ella esta semana he conocido a Sholeh Wolpé, una poeta nacida en Teherán, galardonada con premios como el PEN/Heim en el 2014, el Midwest Book Award en el 2013, el Lois Roth Persian Translation Prize en el 2010, y ha recibido estancias y residencias artísticas en los EE. UU., México, España, Australia y Suiza. en la actualidad, según se puede leer en la contraportada de este ejemplar, reside entre Barcelona y Los Ángeles. En esta misma contraportada nos advierten de que quien lee a Wolpé queda atrapado en su mundo, que desgrana complejidades del exilio, el hogar, la familia, el amor y todo lo que queda por el camino. Así en este Ábaco de la pérdida, cuyas cuentas nos van refieriendo cada una de las pérdidas que el camino le ha ido dejando a la poeta, aunque no todo cuanto recoge el poemario lo son, como podemos leer en los cuatro últimos apartados. 



Del primer apartado, El color de la pérdida, tomo este poema:


CUENTA II

La pérdida es una lengua

que todos hablamos bien,

un gemido que resuena

entre las costillas, la desdicha

que se convierte en dicha.





Del segundo, Al mundo le crecen murallas de espino, este otro:

CUENTA III

Todos los viernes el abuelo nos lleva a mí y a mis hermanos a un circo lleno de tigres, elefantes, caballos y hombres sin camisetas con mallas relucientes. Hay mujeres más pequeñas que mi cuerpo de niña, animales más grandes que mi cuarto. Todo es extremadamente divertido hasta que aparece el gigante de cuatro caras. Mis brazos empiezan a temblar. Los escalofríos me recorren hasta la punta de los dedos. El abuelo me toca el hombro y me dice: Es solo una máscara en su cabeza.

Pero yo sé que no

porque todo lo que se ama

—un hermoso día con el abuelo

en aquel circo de Teherán,

el algodón de azúcar pegajoso derritiendo

su canción rosada en mi boca,

mis hermanos, traviesos, con dientes de alegría—

arde siempre hacia un futuro

aún por llegar,

fuegos artificiales en mi mente,

chispas soldadas a cada recuerdo.





Del que ceirra la colección, Recuento, el que cierra el poemario:

CUENTA III

Escucha, 

nada es demasiado insignificante 

para la gratitud.


        Un toque a medianoche, una patadita

        en el vientre,

dientes en la boca,

este cuenco de arroz humeante.


Una mujer en el café del pueblo 

observa a su hija tomar té

de una taza redonda y lisa como su cabeza,

                                            calva por la quimioterapia,

radiante bajo el sol de la mañana.


Un hombre monta su tienda de cartón a un lado de la carretera

y se tapa hasta el mentón con una colcha azul desechada para protegerse del frío.

Otro se salta un bache con su Tesla

y dice: MIERDA, haciendo que sus hijos se rían a carcajadas.


        La mujer se llevará a su hija a casa

y le besará las mejillas aún calientes.


Dilo:

        gratitud.


Las sábanas de algodón, el techo, tu aliento;

la servilleta de papel arrugada en la que escribo

        y esta pluma barata en su último tramo de tinta.

***
Espero y deseo que el acuerdo de tregua entre Hamas e Israel pueda llevar una paz duradera y estable a la región. 

Si quieres la paz, no hables con tus amigos; habla con tus enemigos.  

Moshe Dayan  



Fuente: Wikipedia
Mapa de los conflictos armados en curso (número de muertes violentas en el año actual o anterior):      Guerras mayores (10 000 o más). Palestina, Ucrania, Sudán, Etiopía, Myanmar (Birmania).      Guerras menores (1 000–9 999).      Conflictos (100–999).     Escaramuzas y enfrentamientos (1–99).

miércoles, 2 de abril de 2025

UN LIBRO, UN POEMA (Ernesto Cardenal)

Editorial
 #unlibrounpoema 


Continúo con los aniversarios dentro de esta sección en la que hoy le toca el turno al poeta, sacerdote y revolucionario nicaragüense, Ernesto Cardenal (1925-2020), a quien no he dedicado hasta ahora ninguna entrada en este blog. El centenario de su nacimiento es un buen motivo para deshacer esa ausencia. 

Supongo que E. Cardenal es más conocido en ámbitos ajenos a la literatura por su participación en la revolución sandinista (llegó a ser ministro de cultura en el gobierno surgido de ella) y como miembro muy destacado de la teología de la liberación. Sea como sea, hoy está aquí como poeta, oficio este que le llevó a ser distinguido con algunos de los premios más destacados del género. Así, por ejemplo, recibió el Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda en 2009 y Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana en 2012.


He elegido poema "Oración por Marilyn Monroe" porque me parece un texto en el que se encuentra muy bien representado el estilo del poeta, especialmente en ese modo tan suyo de conjugar lo social, lo religioso y lo coloquial. Por cierto, si queréis leer un buen comentario de Silvia Rivera Alfaro sobre el poema, pinchad aquí



ORACIÓN POR MARILYN MONROE

Señor
recibe a esta muchacha conocida en toda la tierra con el nombre de Marilyn Monroe
aunque ese no era su verdadero nombre
(pero Tú conoces su verdadero nombre, el de la huerfanita violada a
los 9 años
y la empleadita de tienda que a los 16 se había querido matar)
y que ahora se presenta ante Ti sin ningún maquillaje
sin su Agente de Prensa
sin fotógrafos y sin firmar autógrafos
sola como un astronauta frente a la noche espacial.
Ella soñó cuando niña que estaba desnuda en una iglesia 
                        (según cuenta el Time)
ante una multitud postrada, con las cabezas en el suelo
y tenía que caminar en puntillas para no pisar las cabezas.
Tú conoces nuestros sueños mejor que los psiquiatras.
Iglesia, casa, cueva, son la seguridad del seno materno
pero también algo más que eso…
Las cabezas son los admiradores, es claro
(la masa de cabezas en la oscuridad bajo el chorro de luz).
Pero el templo no son los estudios de la 20th Century-Fox.
El templo —de mármol y oro— es el templo de su cuerpo
en el que está el Hijo del Hombre con un látigo en la mano
expulsando a los mercaderes de la 20th Century-Fox
que hicieron de Tu casa de oración una cueva de ladrones.
Señor
en este mundo contaminado de pecados y radioactividad
Tú no culparás tan solo a una empleadita de tienda.
Que como toda empleadita de tienda soñó ser estrella de cine.
Y su sueño fue realidad (pero como la realidad del tecnicolor).
Ella no hizo sino actuar según el script que le dimos.
—El de nuestras propias vidas—. Y era un script absurdo.
Perdónala Señor y perdónanos a nosotros
por nuestra 20th Century
por esta Colosal Super-Producción en la que todos hemos trabajado.
Ella tenía hambre de amor y le ofrecimos tranquilizantes.
Para la tristeza de no ser santos
                                              se le recomendó el Psicoanálisis.
Recuerda Señor su creciente pavor a la cámara
y el odio al maquillaje —insistiendo en maquillarse en cada escena—
y cómo se fue haciendo mayor el horror
y mayor la impuntualidad a los estudios.

Como toda empleadita de tienda
soñó ser estrella de cine.
Y su vida fue irreal como un sueño que un psiquiatra interpreta y archiva.
Sus romances fueron un beso con los ojos cerrados
que cuando se abren los ojos
se descubre que fue bajo reflectores
                                                     y apagan los reflectores!
y desmontan las dos paredes del aposento (era un set cinematográfico)
mientras el director se aleja con su libreta
                                         porque la escena ya fue tomada.
O como un viaje en yate, un beso en Singapur, un baile en Río,
la recepción en la mansión del duque y la duquesa de Windsor
                   vistos en la salita del apartamento miserable.

La película terminó sin el beso final.
La hallaron muerta en su cama con la mano en el teléfono.
Y los detectives no supieron a quien iba a llamar.
Fue
como alguien que ha marcado el número de la única voz amiga
y oye tan solo la voz de un disco que le dice: WRONG NUMBER.
O como alguien que herido por los gángsters
alarga la mano a un teléfono desconectado.
Señor:
quienquiera que haya sido el que ella iba a llamar
y no llamó (y tal vez no era nadie
o era Alguien cuyo número no está en el Directorio de Los Ángeles)
                                       ¡contesta Tú el teléfono!


De Oración Por Marilyn Monroe y otros poemas (1965).

En este momento, que yo sepa, hay dos editoriales que han publicado su Poesía completa, Trotta y Espasa.

La edición de la editorial Trotta se presentó en la Casa de América y se realizó como celebración del 95 cumpleaños del poeta. El Niño de Elche interpreta al final de la presentación el "Salmo 21".


***


miércoles, 22 de enero de 2025

UN LIBRO, UN POEMA (Ana María Moix)

Ejemplar de la Biblioteca Central
 #unlibrounpoema

De Ana María Moix no había leído nada más que los 11 poemas recogidos en la ya célebre antología de Castellet, Nueve novísimos, por lo que cuando vi este ejemplar en la biblioteca, me hice inmediatamente con él. 

Reproduzco este lento, hermoso, meditativo y nostálgico poema:

Mi ciudad es un pueblo grande con tranvías
donde de cuando en cuando aún se escucha a Chopin.

Entre sumerio-acadios e hititas
asomábamos la cabeza por la ventana.
Llovía.
La aventura de la vida se quedó
en la última posesión que nos quiso perder.

En la calle hay gente aún.

No recordé nada 
después de aquel instante.
"Ha muerto", dijeron,
y pensé si sería la muerte un feliz olvido.
Después murieron los hititas,
los sumerios,
el orden jónico,
el alif y la raíz íbera;
murieron todos los de aquella tarde
en el bar de la facultad.
Solo quedó un pueblo grande con tranvías
donde aún se escucha a Chopin.

Luego volvieron, más tarde,
con libros recién abiertos.
Mis labios en  el agua sucia del lago
reían: adoraban a Pirandello
y no entendían el teatro de Brecht.
Era en mil novecientos sesenta y seis.

"Ha muerto", dijeron, en el patio,
bajo las arcadas de la facultad.
Pensé si sería la muerte aquello
de amarles tanto
y pensé si valía la pena que fueran
mi resurrección.

Entre el regalo de la muerte que se ofrece
y el descanso de la vida que se pierde
hubo un árbol
                    (palmera, definió un amigo poeta),
nido de dioses, sobra de siempre;
hubo un momento.
Después de entonces no recordé nada.
Sigilosa, a caballo entre vida y muerte
surge otra orilla, camino de sombras
pasó la de Gustavo Adolfo Bécquer.

"Ha muerto", dijeron, "Ha muerto".

Volví más tarde. Pórticos,
columnas, arcos, sombras;
allí estaba como siempre el lago,
allí hablaban, hablaban, hablaban como antes
todos.

Mi ciudad es un pueblo grande con tranvías,
dije, pero no entendieron, porque
leían todos ellos Viejo Barrio
y aún velaban por la noche los hititas,
los sumerios,
el orden jónico,
el alif y la raíz íbera.

¡Qué jóvenes eran para mis aún no veinte años!
¡Qué sabia e inhumana la voz de las cosas!

Quise irme
para no oírles hablar de Sartre,
Dios, Marx o Ionesco.
Malos son los hititas o el arte sasánida;
peor era amarles y sentir su muerte cada tarde
de mil novecientos sesenta y seis
hablando de Franco.

Vi entonces un rostro. Pensé un momento
tras el que no recordé nada.
Vi entonces un rostro. Sentí
que eran muertos, como los hititas,
los sumerio-acadios,
el orden jónico,
el alif y la raíz íbera;
y hablaban, hablaban, hablaban de Pirandello.

Regresamos andando a casa.
Juntos volvimos a coger los libros.
La filosofía y sus problemas no nos interesaban.
La ciudad es un pueblo grande con tranvías,
dije, sacando la cabeza por la ventana.

No sé si lo oyeron. Abrimos los libros
por la primera página. No estaba el arte sasánida,
solo largas cuentas, sumas y rayas.

Faltó el tiempo justo entre sumerios e hititas
para gritar a la gente qué era aquello.
Bastó la breve ausencia del copto
para comprenderlo.

No recordamos nada
desde un lejano momento.

La ciudad era un pueblo grande con tranvías
y todos creían que habíamos muerto.

***

miércoles, 9 de octubre de 2024

UN LIBRO, UN POEMA (Edgar Lee Masters)

Editorial
 #unlibrounpoema

Dicen que E. L. Masters (1868-1950) es autor de un solo título, la Spoon River Anthologhy (1915), ¡pero que título! Por supuesto, escribió más. Ocurre que el éxito —vendió 80.000 copias en cuatro años y en 1940 iba por las 70 ediciones— de esta galería de difuntos fue de tal magnitud y tal reconocimiento que todo lo demás quedó siempre a la sombra de este estupendo y divertidísimo libro de poemas.

La Antología de Spoon River es un deliciosa creación en la que los muertos (inventados, pero no tanto) establecen una amena relación a través de sus epitafios-monólogos, y nos ofrecen una caricaturesca y satírica visión de los EEUU de principios del siglo XX. 

Masters era abogado laboralista y conocía bien los problemas que aquejaban a la gente humilde de su país. Esto, más sus estudios de griego clásico y una lectura atenta y minuciosa de la Antología Palatina le servirán para componer uno de los mejores retratos de la sociedad americana que conozco. 

Como ya publiqué el poema que abre la colección, "La colina", en euskera y en castellano, hoy coloco aquí los tres siguientes:


HOD PUTT


Aquí mi tumba, junto a
la del viejo Bill Piersol,
que se hizo rico traficando con los indios y que
acogiéndose luego a la suspensión de pagos
logró salir más rico que antes.
Harto yo de miseria y mucho curro,
viendo cómo crecían Bill Piersol y otros en opulencia,
una noche atraqué a un viajero cerca del Proctor`s Grove
y lo maté sin querer,
por lo que me juzgaron y colgaron.
Así me acogí yo a la suspensión de pagos.
Ahora, todos los que nos acogimos a ella, cada uno a su manera,
dormimos juntos, codo con codo.




OLLIE MCGEE


¿Os habéis fijado en un hombre mustio y cabizbajo
que deambula por el pueblo?
Es mi marido, que con secreta crueldad,
nunca confesada, me robó juventud y belleza.
Hasta que, llena de arrugas y con los dientes amarillos,
perdida la dignidad y de vergüenza humillada,
me bajaron a esta tumba.
¿Y qué creéis que le roe a mi marido por dentro?
¡La cara de la que fui y la otra que hizo de mí!
Las dos le están llevando al sitio donde yazgo.
Logro mi venganza después de muerta.




FLETCHER 
MCGEE


Fue ella quien me robaba la fuerza a cada instante,
quien me robaba la vida hora tras hora,
quien me dejó seco como una luna enfebrecida
que va debilitando al mundo sobre el que gira.
Pasaban los días como sombras,
rodaban los minutos como estrellas.
Fue ella quien transformó la pena de mi corazón en sonrisas.
Era un trozo de arcilla por esculpir.
Mis secretos pensamientos se convirtieron en dedos:
se alzaron hasta su frente pensativa
y la marcaron con la arruga del dolor.
Dieron forma a los labios, le hincharon las mejillas
y le hundieron los ojos en cuencas de dolor.
Mi alma penetró la arcilla
luchando como el mismo diablo.
No era mía, no era suya,
tenía otra distinta, pero su resistencia
le modeló un rostro que odiaba,
un rostro que me daba miedo mirar.
Cegué las ventanas, eché los cerrojos,
me acuclillé en un rincón…
Pero entonces se murió y me dio caza.
Me dio caza para los restos.

(Traducción: Jaime Priede).

Ya véis, son un poco deslenguados y locuelos, pero muy atractivos y cariñosos si les ofrecéis atención. No se la neguéis, os recompensarán con su maravillosa gracia.

***

miércoles, 19 de noviembre de 2025

UN LIBRO, UN POEMA (Gerard Manley Hopkins)

Editorial
 #unlibrounpoema 


Salvo algunas traducciones esporádicas en revistas o en antologías generales  —caso aparte es el libro de D. Alonso Poetas españoles contemporáneos—, esta, creo, es la primera ocasión que se traduce al castellano una cantidad importante de poemas de G. M Hopkins (1844-1889) para formar con ellos una antología que pueda ofrecer al lector de este idioma una idea fehaciente de su quehacer poético. 

Hopkins, si bien es un poeta del siglo XIX,  permaneció inédito hasta 1918, año en que su amigo y también poeta, Robert Bridges, dio a conocer una primera edición de su poesía. 

No busquéis la belleza de su poesía en la fe de un hombre de iglesia, sino en su expresión.



LA GRANDEZA DE DIOS


El mundo lo blasona: la grandeza de Dios.

    En llamaradas saldrá, cual brillo de lámina agitada;

    cual rezumado aceite exprimido se engrosa en grandiosidad.

¿Por qué los hombres no reconocen su vara?

Generaciones lo han pisado, 
pisadopisado;

    y todo lo marchita el comercio, manchado y nublado el afán;

    y viste el borrón del hombre y comparte el olor del hombre pelado

está el terreno ahora y, calzado, el pie no lo puede notar.



Pero a pesar de todo, jamás 
la naturaleza se gasta;

    allí vive la más preciosa lozanía muy dentro de las cosas;

y aunque la última luz deje el poniente oscurecido,

    oh, en la orla del oriente surge la aurora,

porque el Espíritu Santo sobre el mundo torcido,

    empolla con su cálido pecho y con , ah, fúlgidas alas.







LA NOCHE ESTRELLADA


¡Mira a las estrellas! ¡Alza la vista al cielo!

    ¡Mira sentada en el aire esa raza ígnea!

    ¡Las bellas villas, ciudadelas en círculo!

¡Los foscos bosques en que se hunde el diamante! ¡Los ojos de los elfos!


¡Las grises praderas frías donde yace el oro, el vivo oro,

     el blanco rayo donde bate el viento! ¡Álamos aéreos en llamas!

    ¡Palomas, copos, flotando en un temor de granja!

¡Y bien! Todo se compra, es recompensa todo.



¡Compra, pues! ¡Puja! ¿Qué? Preces, paciencia, 
votos, limosnas. 

¡Mira, mira: marasmo de mayo, como ramas del huerto!

    Mira: flor de marzo, como en sauces que mela el amarillo.

Esos son en verdad el granero: de puertas adentro moran

los tresnales. Esta estacada brillante guarda dentro

    de casa al esposo Cristo, su madre y todos sus santos, a Cristo.







PAZ


¿Cuándo, paloma torcaz, Paz, plegarás tus alas tímidas

y terminarás tu vagar en torno a mí, y estarás bajo mis ramas?

¿Cuándo, cuándo, Paz, querrás, Paz? No seré hipócrita

ante propio mi corazón. Admito que a veces vienes; pero

esa paz poco a poco es poca paz. ¿Qué paz pura permite

alarmas de guerra, las desalentadoras guerras, su muerte?



¡Oh cierto, Paz, que mi Señor debería dejarme en su lugar

algún bien! Y así deja la Paciencia 
exquisita

que asciende a la P.az postrera. Y cuando la Paz aquí se hospeda

Él viene con algo que hacer, no viene a arrullar,

viene a empollar y posarse.


***
Si quieres la paz, no hables con tus amigos; habla con tus enemigos.  

Moshe Dayan  



Fuente: Wikipedia
Mapa de los conflictos armados en curso (número de muertes violentas en el año actual o anterior):      Guerras mayores (10 000 o más). Palestina, Ucrania, Sudán, Etiopía, Myanmar (Birmania).      Guerras menores (1 000–9 999).      Conflictos (100–999).     Escaramuzas y enfrentamientos (1–99).

miércoles, 1 de octubre de 2025

UN LIBRO, UN POEMA (María Gómez Lara)

Ejemplar del KM
 #unlibrounpoema

 

María Gómez Lara (Bogotá, 1989) ha publicado, que yo sepa, Después del horizonte (2012), Contratono (Visor, 2015) y El lugar de las palabras (Pre-Textos, 2020), Palabras piel (Frailejón, 2023) y Don Quijote a voces (Pre-Textos, 2025).

Entre otras características que la poesía debe tener para que un texto sea reconocido como poesía está el punto de vista, la mirada distinta sobre el tema que se enfoque, lejos del tópico, del lugar común. 

He aquí dos poemas muy bien construidos, absolutamente alejados del tópico y muy bien trabajados en su ritmo interno. Espero que la ausencia de puntuación no solo no sea un obstáculo para poder verlo, porque es esa misma ausencia la que proporciona, junto la división versal y los espacios en blanco, el ritmo en los poemas. 



MI PRIMER POEMA CARDIOCÉNTRICO

I


"la palabra corazón no aparece nunca en sus poemas dijo un poeta y
amigo muy generoso para elogiarme
ella expresa el dolor con la ruptura de las partes duras los huesos las
rodillas los codos y su envoltura la piel"




pues aquí va 
mi primer poema cardiocéntrico:

en la pantalla una radiografía de tu cerebro

te muestran una mancha en forma de corazón perfecto         bien delimitado 
lesión indeterminada en el lóbulo frontal izquierdo 
los neurólogos no la reconocen 
posible tumor de bajo grado 
y el mundo se te cae al suelo de repente te desplomas 
no puede ser cierta esta pesadilla oí mal que por favor ya me despierte

tengo algo en el cerebro

parece un mal chiste de la vida
ahora sí
se le fue la mano en la ironía
y eso que ya hace años
aprendiste a reírte de tristeza
 
pero tanto sufrir por amor
tanto que no te quisieron
 
tanta soledad
tanto amor que ocupaba el hueco completo de la ausencia
 
tú que conociste todas las formas d elo que no es amor
 
viste tantas sutilezas de la pena
que lo que nunca hiciste
fue dibujar corazones
 
nadie te dio nunca
una caja de chocolates en forma de corazón
con corazoncitos de chocolate adentro 
ni bombas ni confetis de corazones
nadie te dio nunca un ramo de rosas rojas
con un moño gigante y una tarjeta estampada de corazones
todos los san valentín los pasaste en tu casa en pijama
y declarabas toque de queda
para estar tranquila
para que no te pusieran un corazón de crema en el café
para que no te restregaran en la cara el amor ajeno
 
nadie te dijo te mao
porque solo supieron no quererte
 
cada uno a su manera
cada uno con su herida
cada uno fue dejándote
su propia cicatriz irrepetible
 
 
 
II 
 
por eso lo tuyo fue al cerebro
 
lo tuyo fue pensar
repetirte una y otra vez voy a estar bien
a esta sobrevivo
peores golpes me han dado
 
por eso
 
aprendiste pronto a razonar
a recurrir a la lógica
aunque no tenga sentido nada
puedo llorar llorar acoplar la fuerza
decirle a mi cerebro que me salve:
 
que piense cosas para sostenerme a flote
 
cosas por ejemplo
esto no es contra ti
y ya pudiste rearmarte muchas veces
 
por ejemplo tú eres fuerte
y no hay confabulaciones de los astros
sino una racha de mala suerte
(inexplicable) (inagotable) (eterna)
 
pero explícala
 
búscale por dónde
(dicen que la imaginación también está en el cerebro)
invéntale algún orden
 
lo tuyo fue salvarte con palabras
 
entonces habla
dile a tu cerebro        repítele
que por favor no se enferme
en forma de corazón
 
que mucho he sobrevivido
 
para que ahora me enferme
de todo el amor que no tuve
 
de tanto que pensé
para salvarme
 
para que ahora me muestren
esta imagen 
del corazón desafiante
burlándose de mí
 
 
III
 
agujas hospitales los brazos maltratados
ya no me encuentran las venas
me conectan electrodos tengo miedo
 
tal vez de tanto dolor
 
de pensar para no sentir
acabé sintiendo hasta la médula
hasta que mi pobre corazón herido
se me escondió en la cabeza
 
para cubrirse del derrumbe
para esquivar las flechas
para creerse a salvo
 
para darse un rato 
una tregua una trinchera 

 
 
 
*** 
 
 



DON QUIJOTE CAÍDO
 

otra vez estrellado contra el suelo:
me duele la espalda me tallan los huesos
cómo tragar más polvo me pregunto     cómo moverme aquí sin escudero 
tendré que quedarme entonces quedarme quebrado quedarme cascado tanto                 suelo tanto tanto que van a 
llamarme quizás el caído caballero el de la triste figura aquí pegado a la tierra               que más da 

sé que estas son aventuras de los andantes caballeros y este será un capítulo en         mi larga historia de eso no queda duda la pregunta      es ahora     qué                hacer con las heridas las cortadas los raspones 

dónde ensamblar el cuerpo cómo levantarme cómo seguir andando el caballero             roto

con qué fuerza lograr cargar mis armas oxidadas
 
donde cabrán los molinos los gigantes

los vi te digo que los vi ahí estaban lo juro y fue ese sabio encantador los transformó otra vez les salieron astas a los brazos que venían a atacarme

fue el sabio encantador para dañar la aventura de este pobre hidalgo una vida sin         matices 
un gris sin explosiones

mis ojos vieron lo que pudieron les pesaba el hidalgo miraba Don Quijote

y el sabio encantador no supo que los cambiaba porque quería pelear     y dónde            los dejo ahora     qué hacer con tantos brazos tantas piernas enormes tantas         cabezas agitándose

yo Don Quijote de la Mancha quería ser el héroe de una batalla libresca y lo soy lo         soy lo soy cascado Yo Don Quijote de la Mancha aunque me arda la piel

iba a blandir mi espada a salvar a la doncella

iban a ir los gigantes a llevarle mi victoria

escribirían sobre mí los autores de esta historia

las famosas aventuras de Don Quijote de la Mancha el más valiente el más                   enamorado


era fácil transformar molinos en gigantes lo difícil fue al revés     pero es que el          sabio me sigue para jalarme el hidalgo a mí a Don Quijote armado caballero          lo difícil fue volver
cómo volver ahora me habrán quemado los libros y aparecer de nuevo
roto deshecho quebrado

fue ese sabio encantador por sabotearme:

yo no quería estas astas que me pesan encima

yo iba a reemplazar el aire por el fuego
 
 *** 

Si quieres la paz, no hables con tus amigos; habla con tus enemigos.  

Moshe Dayan  



Fuente: Wikipedia
Mapa de los conflictos armados en curso (número de muertes violentas en el año actual o anterior):      Guerras mayores (10 000 o más). Palestina, Ucrania, Sudán, Etiopía, Myanmar (Birmania).      Guerras menores (1 000–9 999).      Conflictos (100–999).     Escaramuzas y enfrentamientos (1–99).

miércoles, 23 de octubre de 2024

UN LIBRO, UN POEMA (Ósip Mandelstam)

 #unlibrounpoema   

Tomo dos poemas de Tristia  (1916-1921), segundo libro de la poesía de Mandelstam. Todo él se halla bajo la influencia de la Revolución de Octubre. En realidad Tristia es el diario del poeta y de la revolución en forma de homenaje a Ovidio y a Pushkin. A Ovidio porque es el símbolo más universal del destierro y sirve de enlace entre el mundo clásico y el mundo eslavo. A Pushkin porque en Rusia siempre ha sido considerado por sus compatriotas como el símbolo de la dignidad del poeta perseguido.

La fecha en la que está escrito hace que no solo se pueda leer como un diario en torno a los decisivos acontecimientos que están ocurriendo en su país, sino que también se deja traslucir el ambiente bélico europeo

La razón por la que he recogido esos dos poemas es porque mientras en el primero, "El decembrista", el poeta saluda a la Revolución de Octubre, poco después la ilusión y la esperanza puestas en ella han desaparecido totalmente, tal y como podemos leer en el segundo, "Tristia". 


EL DECEMBRISTA


—¡Que el senado pagano sea testigo!—
¡Estos hechos no mueren!
Encendió la pipa y se abrochó la blusa.
Al lado juegan al ajedrez.


Trocó su sueño ambicioso por una cabaña
en los sórdidos confines de Siberia
y una pipa adornada en su boca mordaz,
que clamó la verdad en el mundo de la pena.


Chapotearon por vez primera las barcas germanas,
Europa lloraba cautiva,
y las negras cuadrigas se encrespaban
en las vueltas triunfales.


En los vasos flambeaba a menudo el ponche azul.
Y con el gran rumor del samovar
en voz muy baja hablaba la amiga renana,
guitarra amante de la libertad.


—¡Aún suscita vivas voces
la dulce libertad del ciudadano!
Pero los ciegos cielos no quieren sacrificios:
son más seguros el trabajo y la constancia.


Todo se ha enredado, y no hay nadie a quien decir
que el frío poco a poco invade todo.
Todo se ha enredado, y es dulce repetir:
Rusia, Leteo, Lorelei.


***



TRISTIA


Estudié la ciencia de la despedida 
en las calvas quejas de la noche. 
Rumian los bueyes y la espera se alarga, 
la última hora de las vigilias de la ciudad.
Sigo el rito de esta noche del gallo, 
cuando, tras llevar una penosa carga, 
los ojos llorosos miraron a lo lejos, 
y lágrimas de mujer se mezclaron con el canto de las musas.

¿Quién puede saber al oír la palabra “despedida” 
qué separación nos aguarda? 
¿Qué nos anuncia el canto del gallo 
cuando la llama arde en la Acrópolis? 

Y en la aurora de una nueva vida, 
cuando en el zaguán perezosamente rumia el buey, 
¿por qué el gallo, heraldo de la nueva vida, 
en la muralla de la ciudad agita sus alas?

Y yo amo el hilo de la costumbre, 
se desliza la canoa, susurra el huso. 
Mira, a nuestro encuentro, como pluma de cisne
vuela ya, descalza, Delia. 
¡Oh, mísera trama de nuestra vida, 
donde es tan pobre el lenguaje de la alegría! 
Todo pasó antes, todo se repetirá de nuevo. 
Y sólo es dulce el instante del reconocimiento.

Que así sea: una figura transparente 
yace inmaculada en el plato, 
como la piel tersa de una ardilla. 
Una muchacha, inclinada hacia la cera, la contempla. 

No nos toca adivinar la suerte del Érebo. 
Para las mujeres es cera lo que para los hombres es cobre. 
A nosotros sólo en las batallas nos habla el destino, 
y a ellas, les es dado morir leyendo el futuro.



***


miércoles, 30 de abril de 2025

UN LIBRO, UN POEMA (Hafiz de Shiraz)

 Traducción: Enrique Fernández Latour

#unlibrounpoema


Este poeta y místico sufí debía de tener una memoria portentosa, pues se decía de él que era capaz de recitar el Corán de memoria. En realidad, pocos detalles de su vida han llegado hasta hoy, por lo que la aureola de misterio que lo envuelve no nos deja saber muchas cosas sobre su biografía.

Sea como fuere, lo que importa es su obra, que ha tenido una gran influencia en la literatura persa posterior a él y ha ocupado a numerosas personas durante muchas hora en el estudio y análisis de sus poemas.​

Su estrofa favorita fue la gacela, ghazal, gazal, gazel o ghazel, que todos esos nombres han sido utilizados alguna vez para la misma cosa, aunque a nosotros nos suene más la primera opción, por lo de las gacelas de Lorca.

Como curiosidad, merece recordar que el asteroide 12610 Hãfez, lleva su nombre y que el compositor polaco Karol Szymanowski musicó bajo el título de Las canciones de amor de Hafez varios poemas suyos traducidos al alemán.



EL AMIGO PERDIDO

¿Dónde está el amante que no ha hallado su hermano en el dulce martirio?
No le falta razón al lamento de Hafiz.
Su historia es extraña historia y es su tono maravilloso.
Fieles creyentes:
en otro tiempo tuve un amigo al que podía confiar todas mis penas:
corazón que las compartía y que me daba su consuelo.
Cuando yo gemía en medio de la tempestad,
él sólo sabía hablarme de las tranquilas riberas.
Pero cuando me extravié en los caminos del amor, perdí mi amigo.
En vano he buscado, llorando, sus huellas.
En la embriaguez de mi desesperación, tened piedad de mí; de mí,
que alguna vez fui juicioso y sutil y que ahora no soy sino
un pobre hombre cuya razón vacila.
Cuando mis palabras eran inspiradas por el amor,
cada una de ellas era saludada a su paso.
Pero no elogiéis más la cordura de Hafiz,
puesto que sois testigos de su locura.





NO TE AFLIJAS

No te aflijas: la belleza volverá a regocijarte con su gracia;
la celda de la tristeza se convertirá un día
en un jardín cercado lleno de rosas.
No te aflijas, corazón doliente: tu mal, en bien se trocará;
no te detengas en lo que te perturba:
ese espíritu trastornado conocerá de nuevo la paz.
No te aflijas: una vez más la vida reinará en el jardín en que suspiras
y verás muy pronto, ¡oh, canto de la noche!,
una cortina de rosas sobre tu frente.
No te aflijas si no comprendes el misterio de la vida.
¡Tanta alegría se oculta tras del velo!
No te aflijas si, por algunos instantes, las esferas estrelladas
no giran según tus deseos, pues la rueda del tiempo
no siempre da vueltas en el mismo sentido.
No te aflijas si, por amor del santuario, penetras en el desierto
y las espinas te hieren.
No te aflijas, alma mía, si el torrente de los días
convierte en ruinas tu morada mortal, pues tienes el amor
para salvarte de ese diluvio.
No te aflijas si el viaje es amargo y la meta invisible.
No hay camino que no conduzca a una meta.
No te aflijas, Hafiz, en el rincón humilde en que te crees pobre
y en el abandono de las noches oscuras,
pues te quedan aún tu canción y tu amor.


***