martes, 15 de abril de 2025

DÍA MUNDIAL DEL ARTE

Localización

Porque, acaso, como pensaba Flaubert, el arte sea la menos falaz de todas las mentiras.

Porque cada obra de arte es una invitación a sumergirnos en una nueva realidad, en un modo diferente al habitual de contemplar el mundo y de contemplarnos.

Porque cada manifestación artística es una expresión extraordinaria de la humanidad que, a su vez, nos humaniza.

Porque la vida es una enigma y el arte nos ayuda a revelarlo.


Por estas y por otras muchas razones hoy celebramos el Día Mundial del Arte.


***
 

lunes, 14 de abril de 2025

EL ROMÁNTICO, William Boyd

    Ejemplar del KM
Novela de viajes, novela de aventuras, novela histórica, novela ficción... No debería utilizar esta expresión tautológica, pero es tal la cantidad de novelas que últimamente se escriben con deshechos autobiográficos, que no solo se agradece que alguien recurra a la imaginación propia para crear un relato, sino que, además, parece necesario reivindicarla como indicativa de un género, el género por antonomasia. 

William Boyd nos ofrece las aventuras de Cashel Greville Ross, gran viajero, de naturaleza inquieta y romántica, con tendencia a la soledad y coleccionista de grandes momentos de la historia, lo que da muy buen resultado en la novela, como un atractivo más de ella para quien lee y para quien esctibe.

El hecho de que la narración se abra con una nota que nos habla de un manuscrito del protagonista, da pie al autor a mantener una cuestión que para muchos puede resultar relevante. Es la cuestión de qué dejamos después de que hayamos muerto, una vez que desaparecemos de la vida del resto de las personas. Cuestión nada baladí en algunas de las historias escritas por una parte de las más destacadas plumas británicas contemporáneas — Julian Barnes, Kazuo Ishiguro, Ian McEwan, Martin Amis...—.

En este sentido, y aunque Boyd sea un autor más asequible, más interesado en elaborar una historia llena de sucesos extraordinarios que en las implicaciones del estilo narrativo, lo que hace que su lectura resulte más atractiva para un público más numeroso, la cuestión central se mantiene viva a lo largo de todo el relato, como esa aparente paradoja entre una vida llena de plenitud y momentos brillantes que, inexorablemente, se va convirtiendo en casi nada —un manojo de cartas, unos pocos dibujos, algún pequeño objeto y un poco más—.

Pero tal vez la mayor habilidad y atractivo de la novela sea lo que les ocurre a los personajes que por ella desfilan y, en ocasiones, el uso del humor para subrayar determinadas situaciones como, por ejemplo, el juego entre la batalla del Nivelle y la de Waterloo cuando el protagonista despierta aturdido y con la preocupación de cuál sería mejor nombre para una narración. O como cuando Boyd hace que su protagonista juegue al billar con un Byron quemado por el sol y establece el paralelismo entre "páginas enteras de piel" y "manuscritos de integumento".


Divertida, irónica, muy fácil de leer. Irreverente en ocasiones y siempre interesante, El romántico resulta ser una lectura apasionante que nos recuerda que la vida avanza permanentemente a trompicones.

***

 

domingo, 13 de abril de 2025

DESDE UN LEJANO LUGAR, Hōzan Yamamoto


Descubrí a Hōzan Yamamoto (1937-2014) y su Desde un lejano lugar gracias al programa de radio Atriles entre los árboles, de Mercedes Menchero. Por desgracia, no he encontrado ningún vídeo en el que aparezca recogida esta pieza musical, por lo que he tenido que recurrir a un audio.

Después de oír el programa de radio, he estado escuchando más creaciones del músico japonés, sobre todo en Spotify. Él era un especialista del shakuhachi, una flauta tradicional de caña, que era la que utilizaban los monjes de uno de los muchos grupos practicantes del budismo zen.

Dejaos llevar por esta sugestiva y acariciadora música. 

Los intérpretes son:

Hōzan Yamamotoshakuhachi.
Masakazu Yoshizawapercusión.

Que la música os sea favorable.

***


sábado, 12 de abril de 2025

MIL VECES UN INSTANTE, Teresa Margolles


Supongo que si no se es londinense que frecuente la zona, el resto de los seres humanos difícilmente podríamos saber qué es esto que vemos y dónde se encuentra. Y es que hasta el dónde ha cambiado mucho. 

Efectivamente, el lugar ha cambiado mucho. Podríamos decir que estamos en el centro de la ciudad, porque es aquí donde los celebrantes de Nochevieja se juntan, pero también es el sitio preferido para congregaciones de protesta, concentraciones de todo tipo de ONGs y hasta las celebraciones de judíos rusos, de año nuevo chino y, por supuesto, conciertos de música de todo tipo de estilos. Incluso existe una página donde informarse sobre los acontecimientos que se celebran ahí.

Esta gran plaza, asfixiada por el tráfico y por las voraces palomas hasta el año 2000, recibió un enorme alivio cuando se prohibió la circulación que la atravesaba por todas partes, lo mismo que dar de comer a las palomas. Ahora hay mucho más espacio para deambular tranquilamente y menos polución atmosférica y sólida. Pero vayamos al caso.

En Trafalgar Square se levantaron cuatro pedestales, uno en cada una de las esquinas de la plaza. Sobre ellos se colocaron los típicos personajes de relumbrón histórico que se colocan en todas las plazas céntricas de todas las ciudades del mundo. En este caso: Jorge IV, Charles Napier y Henry Havelock. Tres, no cuatro. El cuarto, el que falta, iba a ser Guillermo IV, pero nunca se puso. Y así transcurrieron más de 150 años, que son años, hasta que llegó el año 1999.

A la Royal Society of Arts se le ocurrió lo del Fourth Plinth Project para que ese cuarto pedestal vacante sirviera para mostrar obras de artistas contemporáneos. La idea cuajó y es la oficina del alcalde la que se encarga de recibir los proyectos y elegir la obra que va a exhibirse durante el año. De entre todos los proyectos que se han llevado a cabo durante estos años, seguramente, el más llamativo y popular haya sido One&Other, de Anthony Gormley, que consistió en que ese altillo fuera ocupado por una persona que quisiera, para hacer lo que le diera la gana (siempre y cuando no fuese ilegal). Estuvo funcionando ininterrumpidamente durante cien días con sus cien noches.

Y ahora que ya sabéis de qué va esto, aquí tenéis la obra expuesta de esta tempora:



Por si acaso:

Mil Veces un Instante está compuesta por moldes de yeso de los rostros de cientos de personas transgénero, no binarias y de género no conforme. Cada molde se creó aplicando yeso directamente sobre el rostro del participante y conserva restos de piel, cabello y pestañas. La erosión transformará el material lentamente con el tiempo.

El 22 de diciembre de 2016, Karla, una mujer transgénero, fue encontrada asesinada en Ciudad Juárez, México. Mil Veces un Instante rinde homenaje a Karla y quiere crear conciencia sobre la violencia y el abuso al que se enfrentan tantas personas transgénero, no binarias o de género no conforme en todo el mundo. 

Esta escultura colectiva se realizó en Londres, Ciudad Juárez y Ciudad de México entre 2021 y 2024. Mil Veces un Instante es la decimoquinta comisión del programa Fourth Plinth de la Alcaldía de Londres. 

[Descubre más sobre esta instalación y las comisiones anteriores en nuestra guía digital en Bloomberg Connects, la aplicación gratuita de arte y cultura. Escanea el código QR para explorarla o visita la página oficial].

***


viernes, 11 de abril de 2025

SERPIENTE BICÉFALA, MÉXICO

British Museum

Advertencia previa: si queréis ver una buena imagen, sin reflejos extraños y con el color natural, id a la fotografía ampliable del museo. El comentario también merece la pena.

Esta serpiente bicéfala es un objeto realizado en madera y recubierto con un mosaico realizado con pequeñísimas teselas de turquesa y concha de ostra. Los dientes, con trozos de caracolas. Tiene una longitud de 43,3 cm y una altura de 20,3 cm. 

La simbología de las serpientes es muy variada (ver Diccionario de símbolos, Cirlot, pp 407-410), es decir, la cantidad de significados, poderes y atributos que la humanidad a lo largo de su historia ha supuesto que tenía este reptil tan temido como admirado ha sido enorme, y tan contradictoria como interesante. Y han sido tanto más abundantes, fascinantes y contradictorios, cuanto mayores han sido el temor y la admiración que la humanidad ha sentido hacia las culebras.

Buena prueba de lo que digo es este mismo objeto que, sin ser uno de esos objetos mundialmente reconocidos, ni tan siquiera uno de los iconos del museo, era necesario esperar un tiempo para poder acercarse a la vitrina y sacar una foto medianamente aceptable.

Sea como fuere, no cabe duda de que existe algún elemento mayor y más poderoso que la propia naturaleza de las serpientes, algo que todavía forma parte de nuestro pensamiento más primitivo, que es lo que nos lleva a suponer poderes y capacidades que las serpientes no tienen. Ese es el origen de que las hayamos utilizado como emblemas mágicos en numerosos rituales.

Esta de aquí, dice la jefa del Departamento de Conservación del Museo, Rebecca Stacey, pudo haber sido usada en el pecho como pectoral. Podría representar una "banda celeste", que simboliza el reino celestial. Era un emblema de autoridad, quizá parte de un elaborado conjunto de atuendos rituales que se usaban o portaban en ocasiones ceremoniales (...) Los intensos tonos azul verdosos de la turquesa evocan asociaciones con Quetzalcóatl ('serpiente emplumada'), una de las deidades y héroes culturales aztecas más poderosos. La imaginería serpentina también se asocia con otras deidades mesoamericanas, en particular con Xiuhcóatl y Tláloc.

***


jueves, 10 de abril de 2025

REGALOS DEL DÍA (Diario de un epicúreo agradecido), 25





La luna de ayer y el poema de Blake son motivos más que suficientes para ocupar este espacio.

***


RETRATOS DE AMANTES (Dina Vierny), 5


El río. Aristide Maillol. Fuente: Wikipedia.

De esta escultura que Maillol (1861-1944) tituló El río, existen numerosas reproducciones repartidas por el mundo: en el Jardín del Carrusel, París; en el Citygarden, San Luis; en el MOMA; en el Museo Norton Simon de Pasadena; en la Kunsthalle de Hamburgo; en el Museo de Bellas Artes de Houston; en el Museo de Bellas Artes de Virginia; en algunas colecciones privadas; y también en el barrio de Talacker de Zúrich.

Un breve comentario sobre la misma en la página del MOMA dice lo siguiente: 

Encargado de crear un monumento para un notable pacifista, el escritor francés Henri Barbusse, Maillol concibió la escultura como una obra sobre el tema de la guerra: una mujer apuñalada por la espalda y cayendo. Cuando el encargo fracasó, transformó la idea en El Río. Alejándose de las convenciones habituales de la escultura monumental, la figura yace a ras de suelo y descansa aparentemente de manera precaria sobre el pedestal, incluso colgando por debajo de su borde. Girando y girando, sus brazos alzados sugieren la presión de una poderosa corriente, esta mujer es la personificación del agua en movimiento.

Este comentario nos sitúa muy bien ante el contenido propio de la obra y nos proporciona una información interesante sobre la manera de aprovechar un material ya elaborado al que, con la sencilla fórmula de cambiar el título, se le hace variar de forma rotunda la idea de la que era portador. 

Tan interesante como el significado que pretende transmitir, me ha parecido esta anécdota que recoge la Historia universal del arte (Salvat, 1992, p 35): Periódicamente, la modelo que posó para Maillol durante diez años hasta su muerte en 1944 acudía a los jardines de las Tullerías, donde estaban dispuestas sobre los céspedes dieciocho obras del maestro, para sacar brillo con un producto de limpieza a sus propias formas en bronce expuestas a la intemperie y a los agravios de las palomas.

En esa Historia... no nos dicen quién fue la modelo, sí, en cambio, cualquier pequeña biografía o, incluso, la misma entrada que Wikipedia dedica al artista francés: Dina Vierny (1919-2009), Dina Aïbinder, nacida en Chisináu, antigua Bessarabia, Moldavia en la actualidad. De allí salieron sus padres con ella cuando tenía siete años para huir del régimen estalinista. 

En 1934, en París, por mediación del arquitecto Dondel, a quien le había parecido que ella y las estatuas de mujeres de Maillol tenían un gran parecido, entraron en contacto la adolescente y el artista. Él tenía setenta y tres años; ella quince. Desde entonces, Dina se convirtió en la gran musa del escultor. Pero no queda ahí la cosa. El poder expresivo de sus rotundas formas desnudas de la joven, sirvieron también para que Matisse, Bonnard y el propio Maillol "recuperaran la inspiración", según reconocieron ellos mismos.

Maillol tuvo en cuenta la edad de la modelo y preparó una mesa de estudio en la misma sala, de tal forma que entre posado y posado pudiera atenderlos. Después de acabar la enseñanza secundaria, se matriculó en la facultad de Física y Química de la Sorbona. Durante la Segunda Guerra Mundial fue arrestada por la policía francesa cuando la descubrieron cruzando la frontera con España —ayudaba a que antifascistas en peligro huyeran del territorio galo—. Maillol pagó un abogado para conseguir que la dejaran libre y posteriormente la convenció para que se refugiara en casa de Matisse, pues la habían clasificado como de "raza judía".

Después de la guerra y del fallecimiento del artista, el hijo de este, le encargó la gestión y cuidado de la obra de su padre. Aconsejada por Matisse, trabajó como galerista. En los años 60 solicitó al ministerio de Malraux la restauración de una escultura que había en el jardín de las Tullerías, cosa que se hizo, y el propio Malraux le propuso instalar allí mismo las esculturas de gran tamaño. El fotógrafo Doisneau recogió con su cámara el acontecimiento.

En 1983 creó la Fundación Dina Vierny, fundación que más adelante se encargaría de poner en marcha el Museo Maillol, abierto al público en 1995. 

Dina Vierny y Aristide Maillol nunca fueron amantes en el sentido físico de la palabra. El amor tiene muchas maneras de manifestarse. Una de ellas es la simpatía y el agradecimiento mutuo. Tal vez eso que en un sentido lato podemos entender como amor platónico.

***


miércoles, 9 de abril de 2025

UN LIBRO, UN POEMA (William Wordsworth) / LONDRES VISTO POR...

#unlibrounpoema  

#londresvistopor...

Este soneto de Wordsworth inspirado en el momento en que atravesaba la ciudad —verano de 1802— camino de Calais me ha decidido a seguir la serie que inicié con el poema de Byron. Iban él y su mujer Dorothy para entrevistarse con Annette y Caroline. La primera había sido la amante del poeta cuanto estuvo en Francia durante la revolución; la segunda, la hija nacida de la relación amorosa. El momento era propicio porque en el mes de mayo se había acordado la tregua entre ingleses y franceses mediante la firma de la Paz de Amiens




COMPUESTO SOBRE EL PUENTE DE WESTMINSTER



La tierra no tiene nada más bello que mostrar:

insensible sería de alma quien pudiera obviar

una visión tan evocadora en su majestad:

esta Ciudad ahora, como un vestido, porta

la belleza de la mañana; silenciosa, desnuda;

barcos, torres, cúpulas, teatros y templos se extienden

abiertos a los campos, y a los cielos,

todos brillantes y resplandecientes en el aire sin humo.

Nunca iluminó el sol con más belleza,

en su primer esplendor, valle, roca o colina.

¡Nunca vi yo, nunca sentí, una calma tan profunda!

El río se desliza con la dulzura de su propia voluntad:

¡Dios mío! Las mismísimas casas parecen dormidas,

¡y todo este poderoso corazón yace en quietud!



Traducción: Antonio Ballesteros González.


Hoy, desde el puente, se pueden ver algunos de los edificios y construcciones más emblemáticos de la capital del Reino Unido que en 1802 ni tan siquiera estaban en la imaginación de sus habitantes. El Big Ben se comenzó a construir en 1843; el Palacio de Westminster (la sede del parlamento), tres años antes. 

Eso sí, posiblemente cuando Dorothy y él atravesaron el puente puede que hubiera más gente sobre él y más vehículos (carrozas y carros) que los que aquí se ven, porque cuando tomé esta fotografía, la calle estaba cortada donde se inicia el puente debido al rodaje de una película.

Ahora bien, el día en que yo estaba allí lloviznaba, mientras que a ellos, según leemos en el soneto, les salió un día luminoso. Yo estaba allí La fotografía la hice un día de marzo, la pareja cruzó el Támesis un día de verano.


***


martes, 8 de abril de 2025

TU FIRMA PUEDE SALVAR VIDAS


Amnistía Internacional

PakhshanSharifeh y Verisheh son tres mujeres que se encuentran en peligro de ejecución inminente en Irán. Las tres fueron condenadas a pena de muerte en juicios sin garantías.

Su situación es terrible y lo único que hicieron fue brindar ayuda humanitaria o defender los derechos de otras mujeres. Por si fuera poco, las tres denunciaron torturas y malos tratos que, por supuesto, no han sido investigados.

Cada año que pasa, son menos los países en los que se aplica, aunque Amnistía Internacional registró 1.518 ejecuciones en 2024. Son muchísimas, demasiadas; necesitamos que, entre todos y todas, vamos a hacer que este inhumano castigo forme parte de algo del pasado de una vez por todas.

Por favor, si puedes ayudar difundiendo y compartiendo la petición:

👉Comparte con tus contactos de FacebookX o Bluesky

👉Copia y pega este mensaje en tus grupos de Whatsapp y Telegram:
 

Para firmar la petición, acude a este enlace: 

 👉 https://bit.ly/StopEjecucionesIran


***



REGALOS DEL DÍA (Diario de un epicúreo agradecido), 24


El simpático descaro de los gorriones, de quienes algunos dicen que cada vez hay menos.

 #regalosdeldía



La esbelta elegancia de esta planta para la que no tenemos nombre y a la que los británicos llaman peace lilly y los botánicos Spathiphyllum.


Las bandas de diferentes colores con que se visten las laderas desnudas de las Bardenas reales, según sea la composición de las rocas de los distintos sustratos.

Y esta cita de G. E. Moore con la que me he encontrado en la página 141 de una guía de Londres

Los placeres de las relaciones humanas y el disfrute de los objetos bellos. Son ellos los que forman el último filón de las relaciones humanas.

De Moore dejó escrito Javier Sádaba en Ensayos éticos (Paidós, 1993) que parte de su ética tuvo una influencia notables en el Círculo de Bloomsbury. Es el caso de Lytton Strachey o de Leonard Wolf. La personalidad de Moore debió de ser realmente atractiva. Russell veía en él incluso la reencarnación del genio (p 14). 

Todos ellos son regalos de un día especialmente generoso conmigo.

***


lunes, 7 de abril de 2025

PASEO POR ARGUEDAS

Nada más llegar, lo primero que me recibe es la esbelta torre de la iglesia y un cielo prácticamente despejado y azul de extremo a extremo, excepto allá a lo lejos, donde unas pocas nubes jugaban al corro con el Moncayo azul y blanco de Machado. 


 Visito la exposición 12 cm en el estupendo espacio cultural La Capilla, que en otro tiempo fue ermita dedicada a san Miguel.



Luego me dirijo hacia ese singular espacio formado por las cuevas excavadas en la ladera, que permanecieron habitadas desde finales del siglo XIX hasta 1965.


Hoy forman parte del patrimonio histórico y son memoria material de otro tiempo. 

Algunas personas, no lo entienden así, y en su más absoluta falta de respeto hacia un bien cultural de la comunidad, se dedican a vandalizarlo.




 ¡Qué triste!

***



domingo, 6 de abril de 2025

SIC DEUS DILEXIT MUNDUM



Miniatura en madera de boj. Museo Británico, sala Waddesdon. Ver ampliación.

Este retablo en miniatura es el causante de que hoy haya colocado el tema renacentista en la sección dominical. 

Se trata de una virtuosa talla en madera de boj que tiene 25 cm de alto y 14 cm de ancho, es decir, si amplias la fotografía, el tamaño de la misma en el ordenador será bastante superior al objeto real. Y ocurre, que es lo que yo hice, que al ampliar se puede leer el texto en latín que aparece a los pies de la escena central, la de la crucifixión, sic Deus dilexit mundum —Juan 3,16: tanto amó Dios al mundo, que le dio su unigénito Hijo, para que todo el que crea en Él no perezca, sino que tenga la vida eterna—.

Puse el texto latino en el buscador y no solo me envió al evangelio de san Juan, sino que me indicó también que era un tema de Andrea Gabrieli (¿1533?-1585), que ha sido interpretado por numerosos grupos vocales, entre ellos el Ensemble Officium, que es el que he elegido para acompañar a esta microscópica pieza de un virtuosismo extraordinario, donde las cabezas más grandes que se pueden ver no llegan a tener ni 5 mm de altura.

Interpreta: Ensemble Officium

Que la música os sea favorable... y las torrijas, también.

***


sábado, 5 de abril de 2025

SALVADOR DÍAZ MIRÓN

Leer a Salvador Díaz Mirón en papel no es fácil porque esta edición, excelente edición, de FCE ya no está disponible, y en las bibliotecas del País Vasco no tienen ningún ejemplar. La única forma de conseguir algún ejemplar es recurriendo a Iberlibro, donde podemos encontrar unos cuantos títulos, bien de su Poesía completa, diversas antologías,  o bien títulos sueltos. Lascas, su obra más importante, está en unos cuantos formatos, y hasta una primera edición de 1901.

Si nos olvidamos de leer en papel, la Universidad Nacional autónoma de México, dispone de una buena colección de cuadernillos sobre poetas de todo el mundo y, por supuesto, de poetas nacionales. El dedicado a Díaz Mirón lo preparó Héctor Valdés y puede valer para una primera aproximación. 

Por suerte, la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes tiene recogido en su página el pdf de Lascas, edición original de 1901. El documento se puede descargar y leer en pantalla o, si se prefiere, imprimirlo en papel. En esa misma página web se encuentran tres ensayos sobre la obra del poeta mexicano: 

Al filo del Novecientos. Estudios de intercomunicación hispánica. De Guillermo Díaz-Plaja.

Díaz Mirón: poeta y artífice. De Alfonso Méndez Plancarte.


Y por si alguien tiene interés en la evolución del territorio mexicano desde lo que fue el virreinato hasta la actualidad, Geacron puede resultar de utilidad.

Y después de tantas advertencias, cierro esta entrada con la 


EPÍSTOLA JOCO-SERIA


                                                    Al editor

Mientras haya en ciudad y cortijo
gallineros que ostenten su rijo;
y por calles, y en lúbricos tratos,
ardentías de perros o gatos;
y en el aire y el muro y el suelo
moscas tiernas, a pares, en celo;
mi librillo en palacios y chozas
ha de ser inocente a las mozas.

Pero quise pecar de discreto;
y en extraño y heroico soneto
dejo dicho a mis trovas que apiñas:
"¡respetad el pudor de las niñas!"
Por "Idilio" y "Avernus", y acaso
algún otro desliz en el paso,
lo demás, que no funda querellas,
¡sufrirá privación de doncellas!

A las chicas ofreces lectura
de un primor: la Sagrada Escritura.
¿Y Sodoma con fieros priapismos
amagando a los ángeles mismos,
que se libran merced a un encanto?
¿Y las hijas de Lot? ¿Y el Rey Santo,
Betsabé y el cadáver de Urías?
¿Y Tamar con Amnán? ¡Fruslerías!

¡Ay! las cosas en sí quedan lejos.
Sólo dan al sensorio reflejos.
En mí el Cosmos intima señales
y es un haz de impresiones mentales.
Pero cunde al través de una lente
comba y tinta y jamás indolente,
que perturba en la imagen virgínea
el matiz, el calor y la línea.

¿Qué cristal el que filtra y altera?
Pues mi humor peculiar, mi manera.
Para mí, por virtud de objetivo,
todo existe según lo percibo.
Y el tamiz proporciona elemento
propio y lírico al gayo talento,
y es quien pone carácter y timbre,
novedad y valor a la urdimbre.

Pese a ti, lo real no anda fuera,
sino en sellos del alma, y espera
que facundia o cincel, brocha o pluma,
tornen diáfano el cerco de bruma.
Externarse con metro gallardo
y en fiel copia es el triunfo del bardo.
La mentira es la muerte y la escoria.
La verdad es la vida y la gloria.

Cuando pugno en las bregas del arte
por verter en trasunto una parte
del caudal que atesoro por dentro,
y en las voces hurañas encuentro
la precisa expresión y el buen giro
¡qué alborozo y qué orgullo respiro!
¡Cuál me alegra y ufana el acierto!
¡Un oasis hallado al desierto!

¿La moral? ¡Es el ara divina!
Mas escúchame, piensa y atina.
Una cosa en la práctica es fiemo,
es horror, ese feísimo extremo;
Pero exacta en la intensa pintura,
resplandece magnífica y pura,
si allí el vate no insufla malicia,
sino un grito a la eterna justicia.

¿Que la nota poluta y la torva
vibran mucho en el son de mi tiorba?
En el mundo lo dulce y lo claro
son, por ley de la suerte, lo raro.
¿Cómo hacerlos aquí lo frecuente?
No: la cámara obscura no miente.
Además: la tragedia sublime
es piedad y terror, sangra y gime.

Forma es fondo; y el fausto seduce
si no agranda y tampoco reduce.
¡Que un estilo no huelgue ni falte,
por hincar en un yerro un esmalte!
¡Que la veste resulte ceñida
al rigor de la estrecha medida,
aunque muestre, por gala o decoro,
opulencias de raso y de oro.

¿Que repulsas mi código? Basta.
La bandera, prendida en el asta
y undulando a las rachas supremas,
luce y riza colores y lemas;
y debajo a que nadie los toque,
y blandiendo flamígero estoque,
una musa de fuerza y de gracia
yergue a sol su hermosura y su audacia.

Escribe en nota Manuel Sol que los versos 82-88 (los que he subrayado) parecen haber inspirado al pintor catalán Juan Bernadet el dibujo de la primera portada de Lascas; sin embargo, ésta fue sustituida más tarde (...) por una más sobria y simple, que ostentaba el escudo del gobierno del Estado de Veracruz. 

***


viernes, 4 de abril de 2025

JOSÉ MARTÍ Y LA NIÑA DE GUATEMALA

El poema que aquí reproduzco pertenece a Versos sencillos. Este título lo publicó en Nueva York, durante el verano de 1891. Ese mismo verano será la última vez que vuelva a ver a Carmen Zayas Bazán, su esposa, y a su hijo José Francisco, que entonces contaba 12 años.

Me atrae de este poema la cantidad de suposiciones que podemos realizar por la forma en que se cuenta el hecho que se narra, la muerte de una niña. Podríamos preguntarnos, como Kant, aunque en un sentido, menos trascendente ¿qué puedo saber? Leamos primero el poema:


IX


Quiero, a la sombra de un ala,
Contar este cuento en flor:
La niña de Guatemala,
La que se murió de amor.

Eran de lirio los ramos,
Y las orlas de reseda
Y de jazmín; la enterramos
En una caja de seda.

Ella dio al desmemoriado
Una almohadilla de olor:
Él volvió, volvió casado:
Ella se murió de amor.

Iban cargándola en andas
Obispos y embajadores:
Detrás iba el pueblo en tandas,
Todo cargado de flores.

Ella, por volverlo a ver,
Salió a verlo al mirador:
Él volvió con su mujer:
Ella se murió de amor.

Como de bronce candente
Al beso de despedida,
Era su frente ¡la frente
Que más he amado en mi vida!

Se entró de tarde en el río,
La sacó muerta el doctor:
Dicen que murió de frío:
Yo sé que murió de amor.

Allí, en la bóveda helada,
La pusieron en dos bancos:
Besé su mano afilada,
Besé sus zapatos blancos.

Callado, al oscurecer,
Me llamó el enterrador:
¡Nunca más he vuelto a ver
A la que murió de amor!


Martí no quiere decirnos nada más que lo que nos dice, que no es mucho y se reduce a esto: 
  • La niña es una mujer joven de Guatemala (donde "de Guatemala" puede indicar que era guatemalteca o que residía allí. Doy por implícito que "niña" es una forma afectiva de referirse a su corta edad, a su juventud, aunque tampoco se nos indique)
  • Ella "murió de amor", signifique esto lo que signifique (cuando se produjo la muerte ella estaba enamorada, se quitó la vida por amor, murió de profunda tristeza...).
  • La joven, en algún momento anterior, había hecho un regalo para demostrar su afecto a un hombre que después resultó que estaba casado (estrofa 3ª).
  • Era una persona importante y reconocida desde el punto de vista social, pues al entierro acudieron muchas personalidades y numeroso público(estrofa 4ª).
  • Una tarde se fue al río y apareció muerta.
  • Cuando él la niña se despidieron (¿qué tipo de despedida fue?¿podemos suponer que fue una despedida para siempre?) ella estaba afiebrada (6ª estrofa).
  • Según las dos últimas estrofas, el yo poético (¿podemos pensar en Martí?) y no la tercera persona del singular anterior, estuvo presente en el entierro y fue requerido por el enterrador.
La primera impresión que podemos recibir en una lectura rápida es que se trata de un poema de amor y de pérdida. Pero no de él, sino de ella. Ella es, claro, la que va a morir de amor porque, según todos los indicios, el hombre del que está enamorada se ha descubierto como un hombre casado y sujeto a otra fidelidad. O bien, ya lo sabía, pero se negaba a perder la esperanza.

A partir de ahí podemos realizar cuantas suposiciones queramos para dar coherencia y credibilidad a lo que no se nos cuenta. Todo ello envuelto en un aire romántico, y con la palabra romántico englobo tanto los poemas de esa tendencia como la concepción del amor romántico. Ahí están la idea vaga, enigmática y profundamente anímica de lo subjetivo como elemento principal de la creación de relaciones e ideas, y también el aire de tristeza y desánimo que empapa casi toda la literatura romántica.

Pero vayamos a los hechos históricos y documentados. Sabemos que Martí, en 1877, sale de México tras la subida al poder de Porfirio Díaz. En Guatemala conoce a María García Granados y Saborío, hija del expresidente guatemalteco Miguel García Granados —lo que explica el boato y amplitud del cortejo fúnebre—, a quien da clases en la Academia de Niñas de Centroamérica. Ese mismo año, en diciembre, vuelve a México y se casa con Carmen Zayas, con la que ya estaba comprometido. En enero de 1878 el matrimonio está ya en Guatemala y él retoma las clases que estaba impartiendo. Al terminar el curso, y debido a la insistencia de la familia, en julio parten Carmen y él hacia Cuba.

María, la Niña de Guatemala, muere ahogada el 10 de mayo de 1878. Este hecho y el poema de Martí, de 1891 (13 años después de la desaparición de María), provocan el nacimiento de la leyenda en torno a lo que el poema dice y no dice.

No sabemos qué pasó entre ellos ni hasta dónde llegó el afecto que pudo surgir entre alumna y profesor. Lo que yo me pregunto es ¿por qué escribe un poema tanto tiempo después de la muerte de María?; ¿por qué insiste (es nada menos que el estribillo) en que ella murió de amor, permitiendo de esta manera interpretar su muerte como suicidio, por desesperación?; ¿por qué introduce una tercera persona del singular, que es la persona referente de los afectos de la joven?; ¿por qué es él (el yo Martí) quien besa mano y zapatos y no el otro?; y por último, ¿por qué le llamó en un aparte el enterrador?

Se me ocurren varias respuestas a todos esos interrogantes, pero ninguna de ellas sirve para aliviar la verosimilitud del poema, ni hacerle perder esa apariencia un tanto afectada de poema escrito para quitarse de encima un brumoso sentimiento de culpabilidad, años después de lo acontecido, cuando ya había roto definitivamente con su mujer.

***