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| Peñas de Haya |
Esta mañana me he dado una vuelta por los alrededores de Peñas para ver cómo andaban los colores otoñales y sobre la foto os he dejado el resultado.
También os dejo este poema de Machado que refleja bien el ambiente otoñal:
Amanecer
de otoño
Una
larga carretera
entre grises peñascales,
y alguna humilde pradera
donde pacen negros toros.
entre grises peñascales,
y alguna humilde pradera
donde pacen negros toros.
Zarzas,
malezas, jarales.
Está la tierra mojada
por las gotas del rocío,
y la alameda dorada,
hacia la curva del río.
Tras los montes de violeta
quebrado el primer albor:
a la espalda la escopeta,
entre sus galgos agudos,
Está la tierra mojada
por las gotas del rocío,
y la alameda dorada,
hacia la curva del río.
Tras los montes de violeta
quebrado el primer albor:
a la espalda la escopeta,
entre sus galgos agudos,
caminando
un cazador.
Qué bella fotografía. Qué bello poema de Machado. Mira, ahora que escribo estas palabras, recuerdo que la poesía de Antonio Machado si me marcó una época de mi vida, en la adolescencia. Me acompañaba en muchos momentos de soledad, entendía y sentía muy dentro su poesía.
ResponderEliminarY es que yo tengo cierta debilidad por el otoño. ¿será que nací un mes de octubre? Pero no por la tristeza, sino por la melancolía o el recogimiento al que invita. Esa sensación de estar a gusto viendo llover desde una ventana.
Leí este poema, en la calle, a través del móvil. Precisamente una tarde de lluvia, una tarde que iba a las clases de guitarra de tu hijo. Pero me faltaba comentarte algo, porque me gustó. Gracias.