Pintada en Kieran's St, Kilkenny |
A veces, de tanto soñar,
queda suspendida la conciencia
en algún lugar desconocido
entre el deseo y el pasmo.
A veces, de tanto celebrar,
aparecen monstruos en la fiesta
y queda un intenso olor irracional
adherido a la piel,
y una profunda sensación de vacío
en la entrañas.
A veces, de tanto levitar,
se nos olvida pisar la tierra.