Mostrando las entradas para la consulta Louise Glück ordenadas por relevancia. Ordenar por fecha Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas para la consulta Louise Glück ordenadas por relevancia. Ordenar por fecha Mostrar todas las entradas

sábado, 2 de noviembre de 2024

MARIGOLD Y ROSE, Louise Glück

Ejemplar del KM
Resulta difícil calificar como poesía este Marigold y Rose por mucho que esté editado en una colección de poesía y Louise Glück (1943-2023) se reconociera a sí misma como poeta. Sea esto dicho como simple advertencia, porque poco importa en qué género situemos la obra si la escritura es francamente limpia y hermosa. Hermosa sí, pero no poética. Además, no creo que desmerezca un ápice el que califiquemos la obra como narración breve. Su valor literario sigue siendo el mismo.

En diez breves capítulos Glück nos cuenta el primer año de vida de dos niñas gemelas. Durante ese año morirá su abuela, su madre regresará al trabajo y ellas gatearán, andarán después y, por último, hablarán entre ellas.

Esto, que parece un tanto intrascendente y banal, incluso un tanto cursi, sería así si no estuviera manejado por la extraordinaria habilidad de la autora y, fundamentalmente, por su capacidad observadora que nos ofrece siempre un ángulo distinto desde donde contemplar la realidad.

Si dejamos a un lado los brotes humorísticos, que los hay, creo que lo más interesante de la historia de estas dos gemelas es, por un lado, la sensación de atemporalidad que la escritura transmite y que puede reflejar bien la falta de tiempo medible y cuantificable de esa primerísima infancia; por otro, y esto me parece más interesante, es el retrato de la artista por medio de dos hermanas de personalidades muy distintas.

Rose es abierta, extrovertida, hábil, juguetona y la mayor; Marigold, en cambio, es introvertida, silenciosa, observadora y la segunda. (Marigold) sentía que nunca sería tan perfecta como era Rose (...) Rose sabía beber del vaso. (...) Junto al nombre de Marigold había un montón de casillas marcadas de "necesita mejorar".

A lo largo de la historia vamos viendo cómo las gemelas observan las fracasos y los triunfos de la otra con una actitud protectora. A Rose le preocupa la falta de sentido práctico de Marigold. Y luego, porque era como su nombre, precisa y honesta, se alió con su hermana, como si fueran una sola historia de la cual Madre y Padre fueran solamente testigos.

Se puede leer este breve relato como un emotivo análisis de las diferentes formas de transitar la infancia. Una de ellas, por supuesto, es la de ser escritora. Nos lo dice desde el comienzo mismo: Marigold estaba escribiendo un libro. Que no supiera leer era un obstáculo. No obstante, el libro iba tomando forma en su cabeza. Las palabras vendrían luego.

***


lunes, 7 de diciembre de 2020

UNA VIDA DE PUEBLO, Louise Glück

Editorial
Se dice que solamente las grandes figuras son capaces de realizar verdaderos cambios de estilo sin perder la calidad de su expresión y su escritura. En castellano podemos recordar a Neruda, Lorca o Alberti. Los tres realizaron grandes giros estilísticos en su producción literaria sin que esta se resintiese. Louise Glück también ha producido un notable cambio en su expresión con respecto a títulos anteriores, aunque no tan radical como los de Lorca (Romancero-Poeta en Nueva York), Neruda (Veinte poemas-Residencia en la tierra-Canto general) o Alberti (Marinero en tierra-Sobre los ángeles-A la pintura).

Sea como fuere, Una vida de pueblo supone un salto importante desde la escritura más descarnada anterior a esta forma mucho más pausada, rítmica y narrativa. Sí, el libro está compuesto de pequeñas historias escritas mayoritariamente en verso largo y cuyos poemas pueden ocupar más de dos páginas. Es como el fluir mismo de la vida en un pequeño pueblo, lento y contenido.

Pero no confundamos la lentitud y la contención con la apacibilidad. Hay cicatrices por todas partes en este pueblo mediterráneo: la infancia (poca) está llena de secretos, la gente mayor parece al borde del engaño y el resentimiento, hay rabia reprimida y una mirada un tanto lánguida ante la ausencia de pasión. La vida en el pueblo parece que se va a extinguir en cualquier momento. Hay algo del Spoon River de Lee MastersLo podemos ver en "Un día cálido", uno de los poemas más acogedores de toda la colección, poema espléndido que se inicia con una voz suave y refrescante, gentil. Todo es camaradería y complicidad. El uso de la primera persona del plural en la quinta estrofa nos aproxima y envuelve. Todo está bien, pero a medida que vamos avanzando hacia el final...


UN DÍA CÁLIDO


Hoy el sol resplandecía,

así que mi vecina lavó sus camisones en el río;

vuelve a casa con todo doblado en una cesta,

brillando como si su vida recién se hubiera

alargado una década. La limpieza la hace feliz,

dice, puedes empezar de nuevo,

no tienen por qué retenerte los viejos errores.


Buena vecina, cada una deja en paz

la privacidad de la otra. Justo ahora

canta para sí misma, colgando la colada en un cordón.


Poco a poco, días así

parecerán normales. Pero el invierno fue duro:

las noches venían temprano, los amaneceres eran oscuros,

con una lluvia gris, persistente —meses de esto—,

y luego la nieve, como silencio cayendo del cielo,

aniquilando árboles y jardines.


Todo eso ya está en el pasado.

Regresaron los pájaros, charlando entre semillas. 

Se derritió toda la nieve; los árboles frutales están cubiertos de suaves brotes nuevos.

Algunas parejas caminan incluso por la pradera, prometiendo lo que sea que prometan.


Nos paramos bajo el sol y el sol nos sana.

No huye. Cuelga sobre nosotros, inmóvil,

como un actor complacido con su recibimiento. 


Mi vecina calla por un momento, ¿de dónde vinieron?

Y mi vecina sigue allí,

enganchándolas al cordón, como si la cesta no se pudiera vaciar.


Todavía está llena, nada se ha terminado,

aunque el sol empieza a descender en el cielo;

recuerda, aún no es verano, solo el inicio de la primavera;

el calor no se ha afincado todavía, y el frío retorna.


Ella lo siente, como si el último trozo de lino se le hubiera congelado en las manos.

Las observa, lo viejas que son. No es el principio, es el final.

Y ahora los adultos están todos muertos.

Nada más quedan los niños, solos, envejeciendo.


Traducción de Adalber Salas Hernández.

miércoles, 28 de agosto de 2024

UN LIBRO, UN POEMA (Louise Glück)

Editorial
Traducción: Andrés Catalán
 #unlibrounpoema

Louise Glück (1943-2023) no necesita ninguna presentación, el Premio Nobel que obtuvo en 2020 es suficiente garantía de publicidad, pero sí quiero hacer un brevísimo comentario sobre el poema que he escogido, "The sensual world", "El mundo sensual". 

Este poema me gusta especialmente porque  recoge muy bien el atractivo de las experiencias sensoriales al mismo tiempo que el engaño que suponen. Son algo así como afirmaciones y negaciones de la vida. La poeta nos lleva a través de un profundo viaje por los deseos terrenales y por la inevitabilidad de sus limitaciones. Es el choque entre la naturaleza fugaz de la satisfacción y la sensación de vacío en que nos sume la insaciable apetencia de más. Esta doble cara de la realidad constituye la tensión central del poema, dejándonos con una inquietante sensación por lo complicado y complejo de la naturaleza humana. La realidad y el deseo infinito, las experiencias sensoriales que unas veces las satisfacen y en otras ocasiones quedan frustradas ante el afán de más.



EL MUNDO SENSUAL


Te llamo a través de un gigantesco río o un abismo

para prevenirte, para prepararte.



La tierra te seducirá, lenta, imperceptiblemente,

con delicadeza, por no decir con complicidad.



Yo no estaba preparada: me quedé de pie en la cocina de mi abuela,

con el vaso en la mano. Compota de ciruelas, de albaricoques;



el zumo vertido en el vaso con hielo.

Y el agua añadida, con paciencia, de poco en poco,



mientras uno a uno los primos opinaban, saboreando

cada adición…



El aroma de la fruta de verano, la intensidad del concentrado:

el líquido colorido iba volviéndose más claro, más radiante,


dejando pasar más luz.

Placer, luego consuelo. Mi abuela aguardaba,


por si alguien quería más. Consuelo, luego un profundo ensimismamiento.

Nada me gustaba más: la honda intimidad de la vida sensual,



el yo que desaparece en ella o que es inseparable de ella,

como suspendido, como flotando, con sus necesidades



a la vista, despiertas, del todo vivas.

Un profundo ensimismamiento, y con él



una misteriosa seguridad. A lo lejos, la fruta brillaba en sus cuencos de vidrio.

Fuera de la cocina, la puesta de sol.



No estaba preparada: el ocaso, el final del verano. Manifestaciones

del tiempo como un continuo, como algo que llega a su fin,



no a un aplazamiento; los sentidos no me protegerían.

Te prevengo como nadie me previno a mí:



nunca tendrás suficiente, nunca te saciarás.

Saldrás lastimado, quedarás marcado, no cesarán tus ansias.



Tu cuerpo envejecerá, no cesará tu deseo.

Querrás la tierra, después más de la tierra:


sublime, indiferente, presente, no obedecerá.

Todo lo abarca, no será tu sirviente.



Es decir: te alimentará, te embelesará,

no te mantendrá con vida.


***

sábado, 19 de diciembre de 2020

VITA NOVA, LOUISE GLÜCK

Editorial
VITA NOVA


Me salvaste, deberías recordarme. 

La primavera del año; jóvenes que compran billetes para los ferris. 
Risas, porque el aire está lleno de flores de manzano. 

Cuando desperté, me di cuenta de que era capaz del mismo sentimiento. 

Recuerdo sonidos como esos de mi infancia, 
risas sin motivo, simplemente porque el mundo es hermoso, 
algo así. 

Lugano. Mesas bajo los manzanos. 
Marineros de cubierta que izan y bajan las banderas de colores. 
Y a la orilla del lago, un joven tira su sombrero al agua; 
tal vez su enamorada lo haya aceptado. 

Sonidos o gestos 
cruciales 
como un camino trazado ante los temas importantes 

y después enterrado, sin utilizar. 

Islas en la distancia. Mi madre 
sujeta una bandeja con pastelillos— 
por lo que recuerdo, no ha cambiado 
ni un detalle, el momento 
vívido, intacto, ya que nunca ha estado 
expuesto a la luz, por eso desperté eufórica, ávida de vida 
a mi edad, totalmente confiada—. 

Junto a las mesas, manchas de hierba nueva, el verde pálido 
recortado en el terreno oscuro. 

Sin duda me han devuelto la primavera, esta vez 
no como amante sino como mensajera de la muerte, pero 
en cualquier caso es primavera, en cualquier caso lo hacen con ternura.




EL VESTIDO


Se me secó el alma.
Como un alma arrojada al fuego,
pero no del todo,
no hasta la aniquilación. Sedienta,
siguió adelante. Crispada,
no por la soledad sino por la desconfianza,
el resultado de la violencia.

El espíritu, invitado a abandonar el cuerpo,
a quedar expuesto un momento,
temblando, como antes
de tu entrega a lo divino;
el espíritu fue seducido, debido a su soledad,
por la promesa de la gracia.
¿Cómo vas a volver a confiar
en el amor de otro ser?

Mi alma se marchitó y se encogió.
El cuerpo se convirtió en un vestido demasiado
grande
para ella.
Y cuando recuperé la esperanza,
era una esperanza completamente distinta.

Traducción: Mariano Peyrou.



El título del libro ya nos anticipa por dónde va a caminar el contenido. Vita nuova es la primera obra conocida de Dante, la que redactó después de la pérdida de su amada Beatriz. En ella se habla de la profunda transformación que supone el estado de enamoramiento, de la renovación vital tras el conocimiento de la persona amada.

En el libro de Glück también hay pérdida, pero nos quedamos en ella. Es una reflexión sobre la profunda herida que deja la ruptura. En el primer poema del libro, y también de los dos que he copiado, yuxtapone la infancia y el yo adulto que recuerda a su madre recientemente fallecida. Los sentimientos de ambos tiempos, aunque diferentes, no han cambiado de forma. Todos llevamos nuestro yo pasado con nosotros hacia el futuro. No se añora la juventud, sino que la reinventa para usarla en su vida actual: Sin duda me han devuelto la primavera, esta vez / no como un amor sino como un mensajero de la muerte.

A lo largo de todo el poemario se vale de la contradicción para crear un ambiente de misterio y una sensación de triunfo que trasmite calma y sabiduría. Muchos poemas acentúan la importancia del mundo onírico y del mundo subjetivo, de ese que solo existe dentro de nosotros. En el poema "Castilla" dice: Soñé esto, / ¿significa eso que no sucedió? Y unos versos más adelante insiste: Cuando desperté estaba llorando: / ¿eso no es real? 

Glück se vale del telón de fondo que crean las referencias a las ciudades y regiones europeas para plasmar un mundo de realidad en el que la sinceridad de las emociones y los sentidos queda desdibujada. Los detalles de sus sueños no se diferencian gran cosa de los detalles de los viajes. Existe un continuo trasiego entre los dos mundos, las dos realidades. Cuanto leemos nos advierte que el daño emocional ha dejado al yo poético en un lugar donde la precaución anula el deseo de conexión emocional.

En este ambiente adquieren pleno sentido las referencias a Orfeo y Eurídice, más incluso que a Dante, cuya Vita nuova sirve para marcar el contraste. Todo lo que allí era poesía celebratoria, aquí es introspección y pérdida; aunque poco a poco los poemas convierten los recuerdos dolorosos en una risa agridulce y proporcionan al lector cierta sabiduría, una distancia de los altibajos emocionales de la vida que tal vez sea posible lograr.

Glück se mueve en este poemario entre la amargura y la austeridad mientras hace uso de una expresión certera y cuidadosa.

Aquí podéis escucharla leyendo sus propios poemas (en inglés):

10:15 Mock Orange; 11:45 The Red Poppy; 12:45 The Wild Iris; 14:32 Telescope; 18:27 Landscape; 30:58 Before the Storm; 34:34 First Snow; 36:43 A Village Life; 41:57 Crossroads; 46:13 A Foreshortened Journey; 49:43 A Work of Fiction.

sábado, 10 de julio de 2021

AVERNO, Louise Glück

Ejemplar de la biblioteca del KM.

UN MITO SOBRE LA ENTREGA


Cuando Hades decidió que amaba a aquella chica
le construyó una réplica de la tierra;
todo era igual, incluso el prado,
pero con una cama.

Todo igual, hasta la luz del sol,
pues para una joven sería difícil
pasar tan deprisa de la luz a la total oscuridad.

Pensó en introducir la noche poco a poco,
primero como sombras de hojas que se agitan.
Después luna y estrellas. Y más tarde sin luna y sin estrellas.
Que Perséfone se vaya acostumbrando, pensó él,
al final lo encontrará reconfortante.

Un duplicado de la tierra
sólo que en él había amor.
¿No es amor lo que todos quieren?

Esperó largos años,
construyendo un mundo, observando
a Perséfone en el prado.
Perséfone, la que olfateaba, la que degustaba.
Si te apetece una cosa
te apetecen todas, pensó él.

¿No quiere todo el mundo sentir por la noche
el cuerpo amado, brújula, estrella polar,
oír la respiración tranquila que dice
estoy vivo y que significa también:
estás vivo porque me oyes,
estás aquí, a mi lado; y que cuando uno se gire,
se gire el otro?

Eso es lo que sintió el señor de las tinieblas
al mirar el mundo que había
construido para Perséfone. No se le ocurrió siquiera
que allí no se podría olfatear.
Ni comer, eso es seguro.

¿Culpa? ¿Terror? ¿Miedo de amar?
Él no podía imaginarse tales cosas,
ningún enamorado se las imagina.

Él sueña, se pregunta cómo llamar a ese sitio.
Piensa: El Nuevo Infierno. Después: El Jardín.
Al final decide que se llame
La infancia de Perséfone.

Una tenue luz despunta sobre la bien trazada pradera,
detrás de la cama. Él la coge en brazos. Quiere
decirle: Te quiero, nada puede dañarte

pero cree
que es mentira, y al final le dice
estás muerta, nada puede dañarte,
lo cual se le antoja
un inicio más prometedor, más verdadero.


Eso es, Glück utiliza el terrible mito de Perséfone para indagar sobre el amor, las relaciones interpersonales, las materno-filiales e incluso sobre la verdad y la apariencia de verdad. Otro capítulo más de la creación como elemento de reflexión para intentar encontrar respuestas como si fuera el deber / del artista crear / esperanza, pero ¿a partir de qué? ¿de qué? Pero, claro, a veces las palabras fallan y, siendo como es el único instrumento de la poesía, tendremos que recurrir a la Belleza: / la sanadora, la maestra... La belleza no del arte, que es humano, como el amor, y también falla, sino la de la naturaleza.

Glück aprovecha el mito, colectivo y personal, para nutrir su imaginación y reflexionar sobre lo que somos y lo que hacemos, para enfrentarse con algunos de nuestros miedos más antiguos: la soledad, el olvido, la pérdida del amor, el fracaso de la memoria, la ruptura del cuerpo y la destrucción del espíritu. No es una poeta, voy a decirlo claramente, de las que tengan reparos a adentrarse en los recovecos del sufrimiento, ni tampoco de las que se conformen con respuestas simplistas y tranquilizadoras. 

***
En cuanto a la traducción, espero que pronto podamos disfrutar de otra. La de este ejemplar tiene despistes tan engorrosos como este:


This is the moment when you see again
 the red berries of the mountain ash

Este es el momento en que de nuevo ves
las bayas rojas de la ceniza del monte


Ciertamente "ash" es ceniza, pero también es fresno, y no es una palabra rara ni un significado extraño. Y para colmo de la mala suerte, son los dos primeros versos del libro. 

viernes, 2 de julio de 2021

NOCHE FIEL Y VIRTUOSA

Ejemplar del KM
Retomo la lectura de los libros de poesía de Louise Glück. En esta ocasión, a través de los ejemplares de la biblioteca del KM.


En la época a la que me refiero,
mi hermano estaba leyendo un libro titulado, según él,
la noche fiel y virtuosa.

De ahí procede el título del libro y el del poema en que esos versos se encuentran (p 31). Y Andrés Catalán, el traductor, anota: La confusión infantil entre noche (night) y caballero (knight) —el hermano está leyendo sobre el rey Arturo— se pierde en la traducción.

Este tipo de juegos semánticos y confusiones es muy característico de la escritura de Glück. En este caso toma el del niño que aún no ha aprendido a deletrear y, por tanto, confunde una palabra con otra. El contenido del libro que lee se funde, en la memoria, con lo que le rodea. Son recuerdos de la lejana infancia recogidos desde la vejez. Las indeterminaciones y paradojas forman el aglutinante de este hermosísimo libro y nos indican cuál es la lógica por la que discurre. Las visiones oníricas de la noche no se resuelven durante el día y permanecen como símbolos.

La autora ha recordado en varias ocasiones la influencia del psicoanálisis en su trabajo. También el mundo de las leyendas y de la mitología tienen un peso importante en la construcción de su imaginario. Todo esto, más las numerosas veces señaladas influencias literarias de Rilke y Emily Dickinson, entre otras, dan sentido y coherencia al desarrollo de Noche fiel y virtuosa.

Yo diría que el tema central del libro es la vejez, el tiempo vivido y su circularidad, la vejez como segunda infancia. El tiempo que pasa y se observa desde la altura de la edad, donde los recuerdos más antiguos y los más nuevos se confunden, no por la imposibilidad de distinguirlos, sino porque participan de la misma esencia. En primer plano podemos encontrar hechos del pasado lejano, mientras que en plano posterior se encuentra lo ocurrido en un pasado próximo, más difuminado. Las distinciones entre pasado y presente, entre lo real y lo inventado, se nivelan, al igual que la distinción entre la experiencia de leer —o escribir—  y la de encontrarse con uno mismo dentro del libro que se escribe.

La poeta, para contar su propia historia, ha utilizado la historia de dos hermanos ingleses que crecieron bajo el cuidado de una tía después de la repentina muerte de sus padres. El hermano menor, que se convirtió en pintor y ahora es un anciano, es el hablante que registra las impresiones diurnas de su infancia mientras espera impaciente a que la noche regrese, fiel, virtuosa, / a que repare, brevemente, el cisma / entre tú y tus padres. En su cumpleaños, recuerda:

Mi tía dobló el papel de envolver colores,
hizo una bola perfecta con los lazos.
Mi hermano me hizo entrega de una chocolatina
envuelta en papel de plata.

Luego, de repente, me quedé a solas.

Quizás la ocupación de un niño muy pequeño
sea la de observar y escuchar:

en esa sentido, todo el mundo estaba ocupado:
escuchaba los sonidos de los pájaros a los que dábamos de comer,
las tribus de insectos que eclosionaban, los pequeños
que se arrastraban por el alféizar, y arriba
la máquina de coser de mi tía haciendo
agujeros en una montaña de vestidos...

Glück es capaz de pasear por la zona del misterio y la indeterminación con una elegancia y una eficacia poco comunes. Y mientras se desenvuelve por ese difícil territorio nos va aportando conocimiento. Tal vez esa sea la mejor cualidad de la mejor poesía. Leerla es siempre un acto gozoso... e instructivo.

sábado, 26 de diciembre de 2020

EL IRIS SALVAJE, Louise Glück

Editorial

EL IRIS SALVAJE


Al final del sufrimiento 
me esperaba una puerta.

Escúchame bien: lo que llamas muerte 
lo recuerdo.

Allá arriba, ruidos, ramas de un pino vacilante.
Y luego nada. El débil sol 
temblando sobre la seca superficie.

Terrible sobrevivir 
como conciencia, 
sepultada en tierra oscura.

Luego todo se acaba: aquello que temías,
ser un alma y no poder hablar,
termina abruptamente. La tierra rígida
se inclina un poco, y lo que tomé por aves
se hunde como flechas en bajos arbustos.

Tú que no recuerdas
el paso de otro mundo, te digo
podría volver a hablar: lo que vuelve
del olvido vuelve
para encontrar una voz:
del centro de mi vida brotó
un fresco manantial, sombras azules
y profundas en celeste aguamarina.

Traducción: Eduardo Chirinos.


En este poemario nos encontramos con varias voces: la del mundo vegetal (básicamente flores, pero no solo); la de la persona a la que se dirigen las plantas y que podemos entender como la propia de la poeta (en los poemas que llevan por título Maitines y Vísperas); y la de un dios del jardín, un dios creador que responde en poemas que llevan por título sustantivos vinculados con el tiempo (meses, momentos del día...) o con el clima. La  naturaleza, su propio jardín, sirve a Glück para hablarnos del dolor y de la superación. La renovación de la vida en la naturaleza como metáfora para salir adelante, para vencer obstáculos, resiliencia. 

Ya no recuerdo dónde lo leí, pero cuando la matanza de Newtown (2012), alguien llevaba ese poema "El iris salvaje", que leía y releía, porque era lo único que le servía para afrontar tanto horror. Lo necesitaba como el náufrago necesita la tabla a la que asirse para aguantar en medio del agua. La poesía como remedio, como consuelo. He aquí una evidencia. A la autora de esta precisa y preciosa colección de poemas parece que le sirvió para superar una ruptura. A nosotros, para comprender un poco mejor al ser humano solo y desvalido. Otra evidencia.


LA AMAPOLA ROJA


Gran cosa
carecer
de mente. Sentimientos:
oh sí; ellos
me gobiernan. Tengo
un señor en el cielo
llamado sol, y me abro
para él, le muestro
el fuego de mi propio corazón, fuego
igual que su presencia.
¿Qué podría ser tal gloria
sino un corazón? Oh hermanos y hermanas,
¿fueron como yo alguna vez, hace tiempo,
antes de ser humanos? ¿Se permitieron
abrirse una sola vez, ustedes
que nunca volverían a hacerlo? Porque en verdad
estoy hablando ahora
como lo hacen ustedes. Hablo
porque estoy destrozada.

lunes, 14 de diciembre de 2020

ARARAT, LOUISE GLÜCK

Editorial

 MONTE ARARAT


Nada es tan triste como la tumba de mi hermana

salvo la tumba de mi prima, junto a ella.

No soporto venir con mi madre y mi tía,

mirarlas,

pero cuanto más trato de evitar

su sufrimiento, más se me aparece

el destino de nuestra familia:

cada rama ha de dar una hija en la tierra.


Mi generación pospuso el matrimonio, los hijos.

y cuando los tuvimos, cada una tuvo el suyo;

hijos casi todos, no hijas.


Nunca hablamos de ello.

Pero es siempre un alivio enterrar a un adulto,

alguien lejano, como mi padre.

Una señal de que la deuda, tal vez, está saldada.


Lo cierto es que nadie lo cree.

Como la tierra misma, cada piedra aquí

pertenece al dios de los judíos

que no vacila en arrancar

a un hijo de una madre.

(Traducción de Abraham Gragera)


Amor y muerte. Eros y Tánatos. Impulso vital e impulso destructivo. El texto como proceso, autoconciencia y herramienta para sanar (Julia Kristeva al fondo —Sol negro. Depresión y melancolía).

Ararat es el nombre del monte en el que paró la barca de Noé tras el diluvio (Génesis, 8,4); pero también es nombre de mujer cuyo significado es "tierra santa". Bueno, en realidad, es el nombre del cementerio judío donde reposan los restos de los familiares la poeta. 

Este poemario de fácil lectura, pero de contenido no tan fácil, nos habla de la muerte. El fallecimiento del padre precipita un recorrido por fallecimientos anteriores en la misma familia. La herida de la muerte, la herida del amor. Se abre con un primer verso que dice: Hace mucho tiempo, fui herida. Y la herida dura hasta el último poema que comienza, precisamente, con ese mismo verso.

Glück no ofrece un lenguaje demasiado afectivo. Antes bien, cuantos recursos pueda ofrecer el lenguaje para envolver lo que nos cuenta son rechazados. Predomina el análisis frío, distante, objetivo y hasta meticuloso. Hay voluntad de dominio. Confesionalidad metódica y estricta.

Inmensa lección de la poeta: si queremos escribir poemas de amor, debemos empezar por bucear detrás de nuestros afectos. Relaciones personales, historias familiares, costumbres sociales, todo ello construye nuestra mirada. Ararat nos lleva hasta el fondo; es un texto fundacional más que terapéutico. 

PRIMER REUCUERDO

Hace mucho tiempo, fui herida. Viví
para vengarme 
de mi padre, no 
por lo que él fue
sino por lo que fue de mí: desde el principio,
desde niña, creí
que el dolor quería decir
que no me amaba.
Que amaba, quería decir.


Ya os lo decía: la herida de la muerte, la herida del amor.

viernes, 9 de octubre de 2020

GENTE QUE TRABAJA EN LOS TEJADOS

Editorial: Fundación Ortega Muñoz.

No he podido resistir la tentación. Esta fotografía de los días del confinamiento se me vino a la memoria en cuanto di de bruces con la antología de Harkaitz Cano, que no conocía. No lo dudé un momento. Me lo llevé.


TEILATUETAN LAN EGITEN DUEN JENDEA

Zure agendan egonagatik sekula
ezagutu ez duzun jende hori da.
Gogoratzen saiatu arren arrotzak zaizkizun
izen eta zenbaki horiek guztiak.

Teilatuetan lan egiten duen jendeak 
ez dizu sekula aitortuko, baina badaki
zerua ez dela urdina,
samuraien izarekin egindako banderen zurrumurrua 
bereizten badaki
haizearen menera dagoenean.
Teilatuetan lan egiten duen jendeak, jende horrek du
benetako bertigoa.
Teilatuetan lan egiten duen jendeak ezingo luke
gau-club batean edo 
kafetxe bateko hormen artean lan egin.
Teilaren bat aske egon daitekeen susmoa dutenean
trazatu keinuak adierazten du
teilatuetan lan egiten duen jendea tango zalantzatien
irakasle izan zela
ez hain aspaldiko bizitza batean.
Teilatuetan lan egiten duen jendeak presa-orduak eta 
jende pilaketak saihesten ditu;
jendetzak eta autobusek eta leuzemiaren usainak eta 
gehiegi hitzak
mundua bere buztinezko artesietatik
amilarazteko arriskua balego bezala.

Teilatuetan lan egiten duen jendea ez da fido
goizeko bostetan kale hutsez ere,
eta teilatuetatik jaisten den apurretan,
espaloia utziz errepideko zebrabidea 
zapaldu aurretik,
oin bakar batez ziurtatzen du lehenbizi
asfaltuaren gogortasuna, zer gerta ere,
oinen pean ibai izoztu bat
hondoratuko zaion beldurrez.


Como esta antología es bilingüe y el mismo autor se ha encargado de traducir sus propios textos, aquí os la dejo:

GENTE QUE TRABAJA EN LOS TEJADOS

Es esa gente que, si bien figura en tu agenda, 
no reconoces.
Todos esos números y nombres que te son extraños,
aunque intentes recordar.

Ellos, la gente que trabaja en los tejados,
jamás lo confesarán, pero conocen 
el color del cielo.
Saben que no es azul sobre las aves.
La gente que trabaja en los tejados, esa gente sí
tiene verdadero vértigo.
La gente que trabaja en los tejados
no podría trabajar en un club nocturno
ni entre las cuatro paredes de un café.

Del gesto que dibujan
al sospechar que una teja puede estar suelta,
intuimos que, en una vida no tan lejana,
fueron indecisos profesores de tango.

La gente que trabaja en los tejados odia
las horas punta, evita aglomeraciones,
como si la multitud, los autobuses, el olor a leucemia
o la palabra demasiado tuviesen la culpa del sobrepeso,
de que el mundo se despeñe poco a poco
por sus rendijas de arcilla.

La gente que trabaja en los tejados no se fía
ni de las calles vacías a las cinco de la mañana,
y las pocas veces que se aventura a descender de los tejados,
antes de pisar el paso de cebra abandonando la acera,
tantea con un pie la consistencia del asfalto,
por si acaso, no vaya a ser que un río helado
se resquebraje bajo sus pies.

La selección de textos que esta antología recoge ha sido realizada por Javier Irazoki

A mí la poesía de Cano me recuerda —aunque quizá sea a la inversa, pues antes que la de ella leí la de él— la de Louise Glück, la recientemente galardonada con el Nobel. Eso que el jurado destaca de la poeta estadounidense, por su inconfundible voz poética que con austera belleza universaliza la existencia individual, es, justamente, una de las características de la poesía del guipuzcoano. 

Y es que la aparente sencillez de situaciones, palabras y contextos —no hay nada que una persona por desinformada que esté no entienda— estalla en mil añicos dentro del poema, porque cuando leemos por segunda vez nos damos cuenta, si no lo hemos hecho ya en la primera, que el punto vista, que el lugar desde donde el poeta mira y nos cuenta lo que acontece no es el punto de vista tópico y manido. 

La mirada del escritor individualiza el ser humano sobre el que mira y nos ofrece ese otro ángulo, ese otro aspecto en el que no habíamos reparado. Es uno de los ingredientes más difíciles de manejar en poesía, cómo hacer para descubrir, para poner de manifiesto, los aspectos más recónditos de la realidad... y hacer universal la existencia individual, con elementos tan austeros como palabras y situaciones comunes y corrientes.

domingo, 6 de diciembre de 2020

LIBROS PARA REGALAR O REGALARTE

Visor
POESÍA: 

De Karmelo Iribarren lo he leído todo, y como este es un espacio que se dedica con especial interés y cariño al género poético, mi primera recomendación es su Poesía completa (1993-2019). 

Poesía asequible a todo el mundo. A medida que pasa el tiempo, va creciendo su presencia. Iribarren se ha hecho con un estilo propio, perfectamente reconocible, que no solo tiene multitud de seguidores, sino que ha creado escuela. Es el poeta vasco en castellano con mayor más proyección y reconocimiento.

Ahora que nos metemos en campaña navideña, llevarse a casa o regalar la recopilación de poesía que ha realizado Visor es una opción inaplazable. 

Casi todos sus versos caben en 764 páginas. 22 €.





Cincotintas
DIVULGACIÓN (Astronomía):

Para iniciarse en la observación del cielo nocturno y comenzar a reconocer las constelaciones.

Sara Gillingham ha compuesto un libro muy atractivo y muy sencillo que se articula en torno a una ilustración luminosa, una característica principal, la ubicación en el cielo, cómo encontrarla sin saber nada y, cómo no, la historia mito o leyenda que le pertenece.

Desde los siete u ocho años en adelante. 216 páginas. 27,95€.






Editorial
DIVULGACIÓN (Arte):

Es año pasado Taschen sacó este título en formato pequeño: Tapa dura, 14 x 19,5 cm, 1,24 kg, 788 páginas. 15€.

Los autores, Rainer y Rose Marie Hagen, han publicado varios títulos en esta misma editorial y cualquiera de ellos es altamente recomendable. Son especialistas que saben muy bien ofrecer todo el atractivo que una obra de arte encierra, y lo comunican con un estilo moderno y muy versátil. a la altura de los mejores especialistas del Museo del Prado, que es mucho decir.

Por supuesto, la edición, a pesar de ser en formato reducido, es magnífica: mismo papel, misma calidad fotográfica, impresión excelente. Un lujo.





Editorial

ARTE/FILOSOFÍA:

La colección Centellas, de Olañeta, Editor, me encanta. Son esos libros pequeñitos y muy bien editados que se pueden llevar en cualquier bolsillo:  9,5 x 14 cm (como una cajetilla de tabaco). Están encuadernados en rústica. Reproducción de láminas a color. Este tiene 276 páginas y vale 12€.

Indispensable para amantes del romanticismo, la psicología de Carl Gustav Jung, Caspar David Friedrich y Joseph Mallord William Tunner.

El artista oficia de mediador entre el hombre y el misterio, porque tiene el don de hacerlo visible a través de su sufrida sensibilidad y de su técnica. Creo que con esta cita entenderéis perfectamente cuál es la posición estética del autor, Antoni Amaro.





Editorial
HISTORIA (Ensayo):

Julián Casanova es uno de nuestros grandes historiadores y este es su último libro publicado. 424 páginas. 21,90€.

Gran análisis del siglo que nos dejó y que nadie puede desear que vuelva. Si alguien tenía alguna duda sobre si ha sido o no el siglo que más cadáveres ha dejado a sus espaldas, no tiene nada más que leer esta obra. 

Una mirada profunda sobre los orígenes y desarrollo de esta feroz pandemia que los seres ¿humanos? llevamos inserta en nuestro comportamiento: violencia colonial y de estado, terrorismos varios, violencia sexual, limpieza étnica, genocidio... 

Un recorrido lúcido y necesario por los aspectos más terribles del ser humano.




Editorial
GEOGRAFÍA/BIBLIOFILIA/RELATOS:

Para amantes de mapas, relatos geográficos, curiosidades, anécdotas de todo tipo y descubrir errores, metiduras de pata y falsedades.

Edward Brooke-Hitching recoge un buen manojo de mitos y otras fantasías que la humanidad ha ido construyendo a lo largo del tiempo con la intención de entender mejor el mundo que habitaba. 

Muy bien editado, con todo lujo de detalles y mapas, muchos mapas para recorrer una geografía tan verdadera como inexistente. Una auténtica fuente de ideas para quienes se dediquen a la narración.

256 páginas. Formato: 19 x 24,5 cm. 24,90€.




¿PEDAGOGÍA?:

Ahora que Blakie Books ha publicado El libro de Gianni Rodari. Versos, cuentos y vidas, aprovecho para recomendar aquí el genial Gramática de la fantasía, el libro que enseñó a miles de personas que trabajaban en la educación, o en cualquier otro sitio, a divertirse inventando historias. Fuera del ámbito educativo, conozco talleres de escritura que han utilizado este libro como manual para sobrevivir.

Todos los usos de la palabra para todos me parece un buen lema, con un bonito toque democrático. No porque todo el mundo sea artista, sino para que nadie sea esclavo. G. Rodari.

Ahora está en Kalandraka. Formato: 15 x 21,5 cm. 196 pág. 15 €.

FILOSOFÍA: 

A punto de cumplir cien años, Edgar Morín se mantiene lúcido e intelectualmente muy activo. La pandemia en la que estamos sumergidos provoca esta reflexión que dirigentes políticos y creadores de opinión deberían leer con detenimiento. 

Según este pensador, la necesidad de generar un cambio es inmediata en tres esferas: la política, la protección del planeta y la humanización de la sociedad. Insiste, como lo viene realizando desde hace ya muchos años, en reconocer la complejidad del conocimiento y no simplificarlo, y para eso subraya la importancia que tiene la educación, una educación globalizadora, holística, para llegar a formar personas críticas, conscientes y solidarias, porque se necesita de la contribución de todas las partes, tendencias y pensamientos para construir un mundo mejor.

112 páginas. 14 €.

***

Por supuesto, hay miles de libros más. En este mismo blog puedes encontrar cientos de referencias y recomendaciones, algunas realizadas por librerías; otras, por mí mismo. Solo quiero terminar aconsejándote que, si encuentras en tu librería habitual algún título de Louise Glück editado por Pre-Textos, lo compres, antes de que todo este vergonzoso episodio de agentes, representantes, editoriales y dimes y diretes haga que sus títulos aparezcan en Visor.