Desconozco quién puede leer a Kierkegaard en la actualidad, no siendo alguien obligado a ello por profesión. Posiblemente hoy lo más conocido de este pensador danés sea el latiguillo que Faemino y Cansado utilizaban para cerrar sus chistes, y es que los tiempos de oscuridad, culpa y angustia religiosa hace muchos años que los dejamos, afortunadamente, atrás.
Puedo decir que, salvo en la adolescencia, cuando empezaba a hacerme cargo de mi propio pensamiento para situarme ante la vida, época en la que leía El concepto de la angustia, Del sentimiento trágico de la vida y similares, nunca he compartido ni esa forma de pensar ni esa forma de afrontar la existencia.
Por razones que no vienen al caso, he tenido que releer Mi punto de vista, y si bien sigo sin compartir lo que el bueno de Kierkeegaar nos ofrece en ese texto, hay una frase que hago mía plenamente: Y ahora..., ahora ya no soy interesante. ¡Qué aburrido que el problema de llegar a ser cristiano sea realmente el pensamiento fundamental de toda mi actividad como escritor!
Lástima que no se diera cuenta antes y que no fuera capaz de superar el exabrupto de su padre contra Dios, tomándolo como una maldición contra su progenitor y su descendencia.
Sé que soy malicioso escribiendo lo que escribo, pero estoy convencido de que poco o nada ayudan algunas de las lacras de conciencia que pensadores influyentes en el ámbito occidental —Kierkegaard figura en todos los manuales de filosofía— han ido dejando en la conciencia, cuando menos, europea.
Feliz fin de semana.
"El espacio puede tener un horizonte y el tiempo un final, pero la aventura del aprendizaje es interminable". Timothy Ferris. La aventura del Universo.
viernes, 17 de abril de 2015
jueves, 16 de abril de 2015
SÁNCHEZ ROSILLO, POETA DE LA CELEBRACIÓN, en la tertulia de mañana
Suele ocurrir que con el paso del tiempo quien escribe se hace más consciente de la gravedad del asunto y tiende hacia el verso nostálgico; se cuela en sus versos la amargura del final consabido y la obra se tiñe de dolor y de pérdida. El tiempo, como un potente ácido, va desgastando lo que en un principio había de vitalidad y entusiasmo.
No es el caso de Sánchez Rosillo, poeta del que nos ocuparemos en la tertulia de mañana, 17 de abril. No es que haya sido nunca un poeta de aire pesimista, más inclinado a cantar la pérdida que a celebrar la vida, pero sí es evidente que en sus últimos títulos —desde La certeza concretamente— cuanto había de elegíaco va desapareciendo y nos encontramos con una gozosa aceptación de la vida.
CERCA
Sucede la hermosura en cualquier parte.
Si estás atento y miras y esperas,
no es preciso que vayas a buscarla
a extrañas ni lejanas latitudes.
Desde el silencio de mi casa, en esta
noche fría y serena de un 22 de enero,
sin moverme siquiera del cuarto en el que escribo,
puedo ver cómo, mágica, en el cielo va alzándose
una gran luna llena, y nada más ansía
mi corazón rendido, nada más
necesitan mis ojos.
No es el caso de Sánchez Rosillo, poeta del que nos ocuparemos en la tertulia de mañana, 17 de abril. No es que haya sido nunca un poeta de aire pesimista, más inclinado a cantar la pérdida que a celebrar la vida, pero sí es evidente que en sus últimos títulos —desde La certeza concretamente— cuanto había de elegíaco va desapareciendo y nos encontramos con una gozosa aceptación de la vida.
CERCA
Sucede la hermosura en cualquier parte.
Si estás atento y miras y esperas,
no es preciso que vayas a buscarla
a extrañas ni lejanas latitudes.
Desde el silencio de mi casa, en esta
noche fría y serena de un 22 de enero,
sin moverme siquiera del cuarto en el que escribo,
puedo ver cómo, mágica, en el cielo va alzándose
una gran luna llena, y nada más ansía
mi corazón rendido, nada más
necesitan mis ojos.
miércoles, 15 de abril de 2015
UN TRAPO ENREDADO EN LAS RAMAS
Un día llega la tormenta
y el trapo pierde el puesto,
la dignidad del equilibrio
que le otorgaba desempeñar
su cometido.
Remolino de afectos
en el aire,
vóragine de miedos,
se agarra como puede
a la intemperie.
Queda expuesto
a las miradas
y al ridículo,
Otro día cambia la luz
y la belleza surge
entre sus pliegues.
No desesperes,
en algún momento
esa misma luz
nos alcanza siempre.
martes, 14 de abril de 2015
JUAN DE LA CRUZ, DIBUJANTE
Desconocía la capacidad expresiva mediante el dibujo del gran místico carmelita, pero a la vista de este pequeño ejercicio podemos suponer que hubiese sido un excelente dibujante, si se hubiera dedicado a ello.
En el Museo de San Juan de la Cruz, de Úbeda, me encuentro con esta pequeña joya y una copia del Cristo que pintó Dalí a su lado. Allí mismo está la aclaración de que el pintor surrealista se inspiró en el del fraile para realizar el suyo. Busco información sobre este asunto y, efectivamente, así es. El propio Dalí fue quien se encargó de aclararlo.
Sobre el dibujo de Juan de la Cruz debo señalar que el que aparece aquí, el de Úbeda, es una copia del original que se encuentra en Ávila, en el Convento de la Encarnación, en un relicario, como podéis ver si hacéis clic sobre este enlace.
La fotografía que os ofrezco es muy deficiente, pues no había manera de evitar el reflejo en el cristal protector, pero me hizo tanta ilusión el descubrimiento que no pude dejar de fotografiarlo y queda así como testimonio de la misma y de mi desconocimiento sobre el tema.
He estado indagando sobre la perspectiva utilizada y no he encontrado nada que desmienta su absoluta novedad. Todo parece indicar que fue el poeta el primero en representar a Cristo en la cruz desde ese punto de vista tan original y lleno de dramatismo. Siempre genial el "medio fraile".
lunes, 13 de abril de 2015
ESCRITURA DECLARATIVA
Cartel informativo sobre el Castillo de Santa Catalina |
Sobre la mejor atalaya de la ciudad de Jaén se levanta el Castillo de Santa Catalina. Hermoso castillo, hermoso cerro y hermoso paseo. En la actualidad, sobre lo que eran el castillo de Abrehuy y el Alcázar Viejo se erige un parador de turismo. Ya sabéis, esos alojamientos estupendos y deficitarios que con los recortes han estado a punto de cerrar unos cuantos.
Pues bien, mientras estaba paseando por el lugar y disfrutando de las vistas, di con este panel informativo sobre el castillo y su historia. Empiezo a leer y no puedo evitar la sonrisa al encontrarme con esto: Las dos primeras fortalezas fueron arrasadas en 1965 para construir el Parador Nacional de Turismo. Se salvó el Alcázar Nuevo (las negritas son mías).
Desconozco si con arrasar se quiere indicar que fueron allanadas. Lo dudo. Pero la utilización del verbo arrasar, seguido en la frase siguiente del verbo salvar, nos connota más bien barbarie, la barbarie de Paradores ante los restos históricos de un castillo medieval.
No sé si quienes se hospeden en el parador comparten o no esa opinión. No sé si la Junta de Andalucía y la Diputación de Jaén, firmantes del texto, tienen un contencioso con él. No sé si quien lo ha redactado es un nostálgico de la historia y ha encontrado en la redacción la manera de protestar contra el turismo.
Sea como fuere, a Neni, activista de la declaración amorosa, eso le importa poco. Lo que le importa es su chico, y para que su sentimiento quede claro ha llenado literalmente el paseo que va desde este panel hasta el Mirador de la Cruz de mensajes de amor.
Tal vez el Ayuntamiento de la ciudad debería promocionar la Ruta Neni como otro atractivo más del paseo por el alcor. Su insistencia y su variedad son dignas de una recompensa, aunque no sé si Juan —destinatario de sus declaraciones—, el paisaje y los inmuebles opinan lo mismo que ella.
domingo, 12 de abril de 2015
SORPRESA TRAS LA VENTANA
Ventana del Palacio Villardompardo, Jaén |
Así me encontraba, cuando al cambiar de una sala a otra, di de bruces con esa estupenda ventana que se asoma al caserío de la ciudad y, ante mis ojos, una composición que no era la de ningún artista, la de ningún ser humano que, jugando con los colores, hubiera decidido elaborar un cuadro en azules, blancos y ocres. Y es que, a veces, la realidad se encarga de fingirse a sí misma. Un simple visillo tamizando la luz sureña de la tarde dejó ante mí esta agradable vista en tonos pastel.
sábado, 11 de abril de 2015
PELLO OTXOTEKO
Pello Otxoteko. Irún, 1970.
Obra poética:
Anphora baita. Traducción del autor.
Obra poética:
- Haraindiko begiradaren bila. Bermingham, 1999.
- Itzalaren ñabarduretan. Hiria, 2001.
- Arnasa galduaren ondarea. Elkar, 2003.
- Goizalbaren argitan. Erein, 2007.
- Anphora baita. Alberdania, 2010.
HAUTSI da ANPHORA
eta mila ispilutan multiplikatu;
eta ispiluak eta kopula erabat deitoragarriak dira
gizakion kopurua multiplikatzen dutelako;
eta gizakiok kopulen kopurua dugu multiplikatzen;
eta mila ANPHORA hautsi arren
ezin daitezke kopulen kopuruak ispilutan multiplikatu;
ispiluen tartean kirtenkeria multiplikatzen da,
baina ANPHORAK ez dauka isla faltsurik;
horregatik ANPHORAK gizakion kirtenkeria xurgatzen du bere poroetan barrena;
hortaz, Uqbar-eko heresiarkak pozik daude
eta ANPHORA laudoriotzen dute.
GALITINGA-KO HAMABI ZAHARREK.
***
Se ha roto el ANPHORA
y se ha multiplicado en mil espejos;
y los espejos y las cópulas son completamente despreciables
pues multiplican el números de humanos;
y los humanos multiplicamos el número de cópulas;
y a pesar de romper miles de ANPHORAS
no se pueden multiplicar en espejos el número de cópulas;
entre los espejos se multiplica la estupidez,
pero el ANPHORA no tiene reflejo falso;
por ello el ANPHORA
absorbe la estupidez humana a través de sus poros;
así pues,
los heresiarcas de Uqbar están contentos
y alaban el ANPHORA
Se ha roto el ANPHORA
y se ha multiplicado en mil espejos;
y los espejos y las cópulas son completamente despreciables
pues multiplican el números de humanos;
y los humanos multiplicamos el número de cópulas;
y a pesar de romper miles de ANPHORAS
no se pueden multiplicar en espejos el número de cópulas;
entre los espejos se multiplica la estupidez,
pero el ANPHORA no tiene reflejo falso;
por ello el ANPHORA
absorbe la estupidez humana a través de sus poros;
así pues,
los heresiarcas de Uqbar están contentos
y alaban el ANPHORA
LOS DOCE ANCIANOS DE GALITINGA
Anphora baita. Traducción del autor.
viernes, 10 de abril de 2015
AMAIA ITURBIDE
Amaia Iturbide. Bilbao, 1961.
Obra poética:
- Eskailerarenbi aldeetan. Erein, 1986.
- Itzulbidea. Erein, 1992.
- Gelak eta zelaiak. Erein, 1994.
- Loremutuak eta tuaren ezkontzak. Centro de Lingüística Aplicada Atenea, 2006.
- Lore mutuak eta tuaren ezkontzak. Centro de LingüísticaAplicada Atenea, 2007.
- Labirintoarenorduak. Erein, 2008.
- Eszenatokietakoaztarnak hasten direnean. Erein, 2011.
Naizearen ataburuan
itxaroten egongo natzaizue
argi iraungiaren baitan
zauri zabal baten gisa
irribarre zabalaz
giltzarik gabe
sakela hutsik
soil-soilik arnasa hartzen
***
En este dintel
os estaré aguardando
en forma d eluz consumida
a modo de abierta herida
con sonrisa amplia
sin llave alguna
con el bolsillo vacío
sintiendo sólo el latido
Gelak eta zelaiak. Traducción de Patricio Hernández.
jueves, 9 de abril de 2015
ITXARO BORDA
Itxaro Borda. Bayona, 1959.
Obra poética:
con el aliento
entrecortado
cuando todavía en el horizonte no se anuncian
las velas de la libertad?
Bestaldean. Traducción de Patricio Hernández.
Obra poética:
- Bizitza nola badoan. Maiatz, 1984
- Krokodil bat daukat bihotzarenordez. Susa, 1986.
- Just Love. Maiatz, 1988.
- Bestaldean. Susa, 1991.
- Orain. Susa, 1998.
- Hautsak errautsa bezain. Maiatz, 2002.
- Noiztenka. Maiatz, 2007.
- Ogella line. La Malle d'Aurore, 2009.
- Medearen iratzartzea. Maiatz, 2012.
- Zure hatzaren ez galtzeko. Elkar, 2014.
Zilegia dea amodioari oinarri sentimentalik
ez aurkitzea
non ez den herri zapalduen elkartasunean?
ilunaren bularrak ausikitzen ahal direa
iraultza etorriko
delako esperantzaz globoa zartarazi artean
amodioaren oinarriak aurkitzeko?
esklabotasunaren musuak sabel antzutuetako
arroiletan eztiak direla
nork sinets lezake
kateek mihiseak herdoiltzen dituztelarikan
minaren erresuman?
itsas gainetan lasterka ibil gaitezkea ere
hegoaren haizea
biloetan ahizpatasunaren mugetaraino
hats
hatsanturik
askatasunaren belak ortzaizean ez direnean
oraindik iragarriak?
***
¿Es lícito no encontrar base sentimental
al amor
a no ser en la unidad de los pueblos oprimidos?
¿deben ser mordidos los pechos de la oscuridad
porque la revolución
vendrá llena de esperanza entre el estallido
para encontrar las bases del amor?
¿quién puede creer que los besos de la esclavitud
son suaves en las cavidades
de las entrañas estériles
mientras las cadenas oxidan los lienzos
en el reino de la mina?
¿el viento sur puede pasear
por encima del mar
hasta el límite d ella hermandadcon el aliento
entrecortado
cuando todavía en el horizonte no se anuncian
las velas de la libertad?
Bestaldean. Traducción de Patricio Hernández.
miércoles, 8 de abril de 2015
HARKAITZ CANO
Harkaitz Cano. Lasarte, 1975.
Obra poética:
Obra poética:
- Kea behelainopean bezala. Susa, 1994.
- Norbait dabil sute-eskaileran. Susa, 2001.
- Dardaren interpretazioa. Olerti Etxea, 2003.
- Malgu da gaua. Etxepare Institutua, 2014.
- Compro oro (castellano). Huacanamo, 2011.
VIVIR CON UN TIGRE
En vano indagarás cómo vino a parar aquí.
Si lo abandonó por descuido o malicia el anterior inquilino,
si se introdujo por la ventana subrepticiamente,
si se trata, por qué no,
de una mala jugada del vecino que odia nuestra colección de discos
o del trabajador de mono azul que contabiliza todos los meses
el agua, el gas, la electricidad.
Wittgenstein, Cioran, Steiner;
he leído a mis pensadores de cabecera sin hallar respuesta.
Pero lo sé: tenemos un tigre en casa.
Pese a sus días sin dar señales de vida,
ya no nos mostramos, como antaño,
esperanzados ante su posible marcha;
sabemos que ha de volver, y vuelve.
Un tigre no es un gato, difícil acertar,
cuándo se acabarán por extinguir todas sus vidas.
Su mera presencia nos disuade a menudo de abandonar la cama.
El tigre debió de habernos despertado la vocación de cazador, pero no lo hizo.
Tantos hermanos que fuimos, no estamos ya todos,
mas, ¿hemos de culpar al tigre?
Siempre hubo alguna riña antes de la partida definitiva
y no pudimos con certeza acusar al felino de su marcha,
si bien en ocasiones sale a cuenta tener en casa
a un tigre a quien culpar.
Llegamos tarde al trabajo y nos decimos: “De no ser por el tigre…”
A veces es cierto, otras veces no.
Los relojes se retrasan cuando vives con un tigre,
parece tan temprano que, de pronto, se ha vuelto demasiado tarde.
Nunca es tan temprano como crees.
Parece mentira que un tigre, con esas garras,
tenga la capacidad de hacer girar las manecillas del reloj.
Frase grandilocuente, pero cierta: un tigre puede parar el tiempo.
Quizá no interpretamos bien los signos:
cosas que iban faltando en el frigorífico, armarios revueltos,
prendas rasgadas.
Hay que andarse con mucho ojo, cuando tienes un tigre en casa.
No es un cachorro, pero quizá fuese más joven antes.
¿Creció junto a nosotros? ¿Era un tigre ya adulto desde el principio?
¿No serán, a falta de uno, dos tigres? ¿Tres tigres, decís?
Vivimos sin poder despejar la incertidumbre.
En casa no nos ponemos de acuerdo,
apenas si lo hemos visto alguna vez de cuerpo entero:
a veces no es sino una leve sombra a nuestras espaldas,
ora aliento, ora pestilencia:
espía nuestras celebraciones,
escruta nuestros sueños,
recela de nuestras carcajadas,
le intrigan nuestros llantos.
Al girar la cabeza, a duras penas llegamos a distinguir su cola
arrastrándose suavemente, desapareciendo.
Huellas en la moqueta,
rugidos selváticos,
crujidos de tarima,
pequeños rastros, casi imperceptibles,
evidencian que sigue ahí.
Oigo hablar a expertos en la radio:
que si el tigre esto, que si el tigre lo otro, que si el tigre lo de más allá…
Y yo me digo: “no hablaríais así del tigre,
si tuvieseis a uno en casa”.
Tenemos un tigre en casa pero jamás
hemos cruzado una mirada franca.
Nos dimos prisa por enseñar a caminar al más pequeño;
temíamos ofender al tigre si otro diferente a él
gateaba por los pasillos.
Pocos se atreven a visitarte cuando tienes un tigre en casa.
A menudo olvidamos que vivimos con un tigre,
las jornadas transcurren sin apenas acordarnos,
hasta que te lo encuentras de frente
el día menos pensado:
por ejemplo un miércoles, digamos que en otoño,
de camino a casa tras el trabajo, cansados y silbando.
¿Decís que son nobles algunos tigres?
Un tigre es un tigre, más allá no me atrevo a afirmar nada.
No es de protección oficial la vivienda, pero tenemos a un tigre en casa.
Lo hemos pensado a menudo: vender la casa sin advertir al comprador.
Dejar todas las puertas abiertas y esperar a que se vaya,
abrir todos los grifos y escapar nosotros.
Mil cosas hemos pensado, pero al final, ésa esa la verdad,
puede que nos hayamos acostumbrado a vivir con él.
¿Puede nacer y desarrollarse el cariño con respecto a un tigre?
Puede nacer y desarrollarse, pero un tigre es un tigre
y jamás se desvestirá sus rayas.
¿Es macho o hembra? ¿Tiene cincuenta años?
¿Quince? ¿Setenta y dos? ¿Quinientos?
En la sobremesa, mientras rebuscamos entre las nueces
por él mordisqueadas, especulamos acerca de su edad:
si ha envejecido, si perdió reflejos o destreza,
si no se tratará de un gran engaño,
si no será, al fin, más que un diablo parásito
oculto tras la careta de un tigre.
Quisiera escribir con recta concisión sobre las rayas torcidas del tigre.
Mientras observo a la gente por la calle, apenas si me atrevo a preguntar:
¿Tienen ustedes tigre en casa? Confiesen: ¿existe casa sin tigre?
¿No será, quizá, Arañazo el nombre de la nación que todos habitamos?
¿No dicen, acaso, que todas las mujeres y todos los hombres somos semejantes?
Vivo con un tigre y, francamente,
a estas alturas no sé si acertaría a vivir
sin tigre alguno.
En vano indagarás cómo vino a parar aquí.
Si lo abandonó por descuido o malicia el anterior inquilino,
si se introdujo por la ventana subrepticiamente,
si se trata, por qué no,
de una mala jugada del vecino que odia nuestra colección de discos
o del trabajador de mono azul que contabiliza todos los meses
el agua, el gas, la electricidad.
Wittgenstein, Cioran, Steiner;
he leído a mis pensadores de cabecera sin hallar respuesta.
Pero lo sé: tenemos un tigre en casa.
Pese a sus días sin dar señales de vida,
ya no nos mostramos, como antaño,
esperanzados ante su posible marcha;
sabemos que ha de volver, y vuelve.
Un tigre no es un gato, difícil acertar,
cuándo se acabarán por extinguir todas sus vidas.
Su mera presencia nos disuade a menudo de abandonar la cama.
El tigre debió de habernos despertado la vocación de cazador, pero no lo hizo.
Tantos hermanos que fuimos, no estamos ya todos,
mas, ¿hemos de culpar al tigre?
Siempre hubo alguna riña antes de la partida definitiva
y no pudimos con certeza acusar al felino de su marcha,
si bien en ocasiones sale a cuenta tener en casa
a un tigre a quien culpar.
Llegamos tarde al trabajo y nos decimos: “De no ser por el tigre…”
A veces es cierto, otras veces no.
Los relojes se retrasan cuando vives con un tigre,
parece tan temprano que, de pronto, se ha vuelto demasiado tarde.
Nunca es tan temprano como crees.
Parece mentira que un tigre, con esas garras,
tenga la capacidad de hacer girar las manecillas del reloj.
Frase grandilocuente, pero cierta: un tigre puede parar el tiempo.
Quizá no interpretamos bien los signos:
cosas que iban faltando en el frigorífico, armarios revueltos,
prendas rasgadas.
Hay que andarse con mucho ojo, cuando tienes un tigre en casa.
No es un cachorro, pero quizá fuese más joven antes.
¿Creció junto a nosotros? ¿Era un tigre ya adulto desde el principio?
¿No serán, a falta de uno, dos tigres? ¿Tres tigres, decís?
Vivimos sin poder despejar la incertidumbre.
En casa no nos ponemos de acuerdo,
apenas si lo hemos visto alguna vez de cuerpo entero:
a veces no es sino una leve sombra a nuestras espaldas,
ora aliento, ora pestilencia:
espía nuestras celebraciones,
escruta nuestros sueños,
recela de nuestras carcajadas,
le intrigan nuestros llantos.
Al girar la cabeza, a duras penas llegamos a distinguir su cola
arrastrándose suavemente, desapareciendo.
Huellas en la moqueta,
rugidos selváticos,
crujidos de tarima,
pequeños rastros, casi imperceptibles,
evidencian que sigue ahí.
Oigo hablar a expertos en la radio:
que si el tigre esto, que si el tigre lo otro, que si el tigre lo de más allá…
Y yo me digo: “no hablaríais así del tigre,
si tuvieseis a uno en casa”.
Tenemos un tigre en casa pero jamás
hemos cruzado una mirada franca.
Nos dimos prisa por enseñar a caminar al más pequeño;
temíamos ofender al tigre si otro diferente a él
gateaba por los pasillos.
Pocos se atreven a visitarte cuando tienes un tigre en casa.
A menudo olvidamos que vivimos con un tigre,
las jornadas transcurren sin apenas acordarnos,
hasta que te lo encuentras de frente
el día menos pensado:
por ejemplo un miércoles, digamos que en otoño,
de camino a casa tras el trabajo, cansados y silbando.
¿Decís que son nobles algunos tigres?
Un tigre es un tigre, más allá no me atrevo a afirmar nada.
No es de protección oficial la vivienda, pero tenemos a un tigre en casa.
Lo hemos pensado a menudo: vender la casa sin advertir al comprador.
Dejar todas las puertas abiertas y esperar a que se vaya,
abrir todos los grifos y escapar nosotros.
Mil cosas hemos pensado, pero al final, ésa esa la verdad,
puede que nos hayamos acostumbrado a vivir con él.
¿Puede nacer y desarrollarse el cariño con respecto a un tigre?
Puede nacer y desarrollarse, pero un tigre es un tigre
y jamás se desvestirá sus rayas.
¿Es macho o hembra? ¿Tiene cincuenta años?
¿Quince? ¿Setenta y dos? ¿Quinientos?
En la sobremesa, mientras rebuscamos entre las nueces
por él mordisqueadas, especulamos acerca de su edad:
si ha envejecido, si perdió reflejos o destreza,
si no se tratará de un gran engaño,
si no será, al fin, más que un diablo parásito
oculto tras la careta de un tigre.
Quisiera escribir con recta concisión sobre las rayas torcidas del tigre.
Mientras observo a la gente por la calle, apenas si me atrevo a preguntar:
¿Tienen ustedes tigre en casa? Confiesen: ¿existe casa sin tigre?
¿No será, quizá, Arañazo el nombre de la nación que todos habitamos?
¿No dicen, acaso, que todas las mujeres y todos los hombres somos semejantes?
Vivo con un tigre y, francamente,
a estas alturas no sé si acertaría a vivir
sin tigre alguno.
Traducción de autor. Poema original, aquí.
martes, 7 de abril de 2015
IBON SARASOLA
Ibon Sarasola. San Sebastián, 1946.
Obra poética:
CCLXXVI
Ni ez naiz poeta.
Ni bertso-asmatzaile naiz,
poema egile,
edo hobeki,
poema konstruktore
AGROMAN CONSTRUCTORA DE POEMAS S. A.
Poeta outsider.
Chrisosthomos.
CCCLXII
Arruntkerien kontra jardun ondoren
lapitza hartu dut. Hitz
bakan batzuek arreratu ditut
paper batetan
«ere ez»
«zergatik»
«hau eta hura»
«ez»
«eta gero ere»
idatzi dut.
Sentidurik ez du
ten hitzak
paroles sans suite
idatzi ditut. Jeiki
egin naiz. Besoak
mugitu ditut, jestikula
tu egin dut.
(in tribulationen meam eta ez dakit zer gehiago)
Gero adiskide
bati telefonoz deitu
diot
Eta lasai gelditu naiz
*** ***
CCLXXVI
Yo no soy poeta.
Soy un inventor de versos,
artesano del poema,
o mejor,
constructor de poemas
AGROMAN CONSTRUCTORA DE POEMAS S.A.
Poeta outsider.
Chrisosthomos.
CCCLXII
Después de arremeter contra las banalidades
he tomado la pluma. He
aventurado algunas palabras
sobre un papel.
He escrito
"tampoco"
"por qué"
"esto y aquello"
"no"
"y además".
Palabras sin sen
tido
paroles sans suites.
Me he incorporado. He
movido los brazos, he
gesticulado
(in tribulationen meam eta ez dakit zer gehiago)
Obra poética:
- Poemagintza. Lur, 1969.
CCLXXVI
Ni ez naiz poeta.
Ni bertso-asmatzaile naiz,
poema egile,
edo hobeki,
poema konstruktore
AGROMAN CONSTRUCTORA DE POEMAS S. A.
Poeta outsider.
Chrisosthomos.
CCCLXII
Arruntkerien kontra jardun ondoren
lapitza hartu dut. Hitz
bakan batzuek arreratu ditut
paper batetan
«ere ez»
«zergatik»
«hau eta hura»
«ez»
«eta gero ere»
idatzi dut.
Sentidurik ez du
ten hitzak
paroles sans suite
idatzi ditut. Jeiki
egin naiz. Besoak
mugitu ditut, jestikula
tu egin dut.
(in tribulationen meam eta ez dakit zer gehiago)
Gero adiskide
bati telefonoz deitu
diot
Eta lasai gelditu naiz
*** ***
CCLXXVI
Yo no soy poeta.
Soy un inventor de versos,
artesano del poema,
o mejor,
constructor de poemas
AGROMAN CONSTRUCTORA DE POEMAS S.A.
Poeta outsider.
Chrisosthomos.
CCCLXII
Después de arremeter contra las banalidades
he tomado la pluma. He
aventurado algunas palabras
sobre un papel.
He escrito
"tampoco"
"por qué"
"esto y aquello"
"no"
"y además".
Palabras sin sen
tido
paroles sans suites.
Me he incorporado. He
movido los brazos, he
gesticulado
(in tribulationen meam eta ez dakit zer gehiago)
Luego he telefoneado
a un amigo
Y me he quedado tranquilo.
Poemaginta. Traducción de Gerardo Markuleta.
domingo, 5 de abril de 2015
KOLDO IZAGIRRE
Koldo Izagirre, 1953, Pasaia (Pasajes).
Obra poética:
Obra poética:
- Itsaso ahantzia, Kriselu, 1976.
- Oinaze zaharrera, Ustela Saila, 1977.
- Guardasola ahantzia, Ustela Saila, 1978.
- Balizko erroten erresuma, Susa, 1989.
- Non dago Basques' Harbour, Susa, 1997.
- Teilatuko lizarra, Susa, 2005.
- Rimmel, Susa, 2006.
- Parisen bizi naiz, Susa, 2013.
ATLAS GALGARRIA
Sufritzen dakigunak bakarrik bizi gara
Hemen ez dago lekurik
Oinazeaz zientzia bat egin dutenentzat
Malutu ziren beleak eta egia defendatzen dute
Baina harriari hegalik eman gabe
Eta orain lumaztatu egin behar ditugu
Erroton paretak suntsiezinak egitearren
Egia edertu ere egin behar baita
Gezurra bezain eder
Liburutegi bat bezala kartzelan
Liburutegi baten kartzela bezala
Egia asmatzen ausartzen dena
Bakarrik bizi liteke hemen
Balizko errotak Benazko derrotak
***
ATLAS TRAIDOR
Vivimos los que sabemos vivir vivimos solos
Aquí no hay sitio
Para los que del sufrimiento hicieron ciencia
De nieve son los cuervos y ahora defienden la verdad
Pero sin dar alas a las piedras
Debemos desplumarnos
Para hacer intumbables estas paredes
Porque la verdad también hay que embellecerla
Hermosa como la mentira
Como un libro en la cárcel
Como la cárcel de un libro
Sólo quien se atreve a crear la verdad puede vivir solo aquí
Molinos imaginarios Derrotas palpables
Balizko erroten erresuma. Traducción del autor.
sábado, 4 de abril de 2015
JOAN MARGARIT, TODOS LOS POEMAS (1975-2012)
Se acaba de publicar en la colección Austral la obra poética de Margarit —muy buena página la suya— traducida al castellano. Una buena ocasión para leer a este arquitecto de profesión, que resulta ser uno de los poetas catalanes más leídos en su tierra.
Su estilo claro y sustancioso, su dominio de la técnica, sus imágenes próximas, su defensa de lo humano, su manera de afrontar el dolor de la pérdida filial, su conocimiento del mundo de la técnica y mil cosas más hacen de Joan Margarit uno de los poetas vivos más interesantes y personales.
De Misteriosamente feliz
Su estilo claro y sustancioso, su dominio de la técnica, sus imágenes próximas, su defensa de lo humano, su manera de afrontar el dolor de la pérdida filial, su conocimiento del mundo de la técnica y mil cosas más hacen de Joan Margarit uno de los poetas vivos más interesantes y personales.
LEER POESÍA
Al terminar el libro de poemas
de Paul Celan, no sé ni qué me ha dicho
ni qué quiso decirme.
Ni si era a mí a quien quiso decir algo.
Hay tanto miedo en un poema hermético.
Pongo la mano encima del libro ya cerrado
y juro rechazar para siempre este miedo.
Porque la poesía, que al principio
puede ser paisaje
al que a veces llegamos ya de noche,
ha de acabar siendo el espejo
donde uno ha de leer sus propios labios.
¿Y qué razón de ser tiene el contenedor
si esta vacío?
Vacíos y silencios se hicieron para el ángel.
Y también para el miedo a la basura.
Y para la basura de ese miedo.
De Misteriosamente feliz
viernes, 3 de abril de 2015
EL LIBRO DE LOS ABRAZOS, Eduardo Galeano
Este es uno de esos libros que se puede leer como un libro de poesía: a sorbitos cortos y dejando que el texto impregne de sabor todos los afectos.
Es un libro construido con abrazos, con muchos abrazos, pequeñas reflexiones, fotografías instantáneas, denuncias, sugerencias de la más fresca pluma de Galeano.
El libro se publicó por primera vez en España en 1989. Desde entonces se han hecho 33 reimpresiones. Tiene ya mucha vida vivida.
El libro de los abrazos es un hermoso libro para leer, releer, regalar y llevarlo encima, abrirlo por donde se tercie y recoger un chispazo de inteligencia y humanidad.
Os dejo un par de abrazos recogidos al azar:
La pequeña muerte
No nos da risa el amor cuando llega a lo más hondo de su viaje, a lo más alto de su vuelo: en lo más hondo, en lo más alto, nos arranca gemidos y quejidos, voces de dolor, aunque sea jubiloso dolor, lo que pensándolo bien nada tiene de raro, porque nacer es una alegría que duele. Pequeña muerte, llaman en Francia a la culminación del abrazo, que rompiéndonos nos junta y perdiéndonos nos encuentra y acabándonos nos empieza. Pequeña muerte, la llaman; pero grande, muy grande ha de ser, si matándonos nos nace.
Dicen las paredes/3
En Montevideo, en el barrio Brazo Oriental:
Estamos aquí sentados, mirando cómo nos matan los sueños.
Y en la escollera, frente al puerto montevideano del Buceo:
Mojarra viejo: no se puede vivir con miedo toda la vida.
En letras rojas, a lo largo de toda una cuadra de la avenida Colón, en Quito:
¿Y si entre todos le damos una patada a esta gran burbuja gris?
Leedlo como queráis. O tal vez no queráis leerlo. Pero si lo hacéis, no lo hagáis en ebook. Os perderíais los dibujos y filigranas con que Galeano acompaña las palabras.
Prueba de humanidad: probad a leer el cuentecito Nochebuena sin conmoveros.
Es un libro construido con abrazos, con muchos abrazos, pequeñas reflexiones, fotografías instantáneas, denuncias, sugerencias de la más fresca pluma de Galeano.
El libro se publicó por primera vez en España en 1989. Desde entonces se han hecho 33 reimpresiones. Tiene ya mucha vida vivida.
El libro de los abrazos es un hermoso libro para leer, releer, regalar y llevarlo encima, abrirlo por donde se tercie y recoger un chispazo de inteligencia y humanidad.
Os dejo un par de abrazos recogidos al azar:
La pequeña muerte
No nos da risa el amor cuando llega a lo más hondo de su viaje, a lo más alto de su vuelo: en lo más hondo, en lo más alto, nos arranca gemidos y quejidos, voces de dolor, aunque sea jubiloso dolor, lo que pensándolo bien nada tiene de raro, porque nacer es una alegría que duele. Pequeña muerte, llaman en Francia a la culminación del abrazo, que rompiéndonos nos junta y perdiéndonos nos encuentra y acabándonos nos empieza. Pequeña muerte, la llaman; pero grande, muy grande ha de ser, si matándonos nos nace.
Dicen las paredes/3
En Montevideo, en el barrio Brazo Oriental:
Estamos aquí sentados, mirando cómo nos matan los sueños.
Y en la escollera, frente al puerto montevideano del Buceo:
Mojarra viejo: no se puede vivir con miedo toda la vida.
En letras rojas, a lo largo de toda una cuadra de la avenida Colón, en Quito:
¿Y si entre todos le damos una patada a esta gran burbuja gris?
Leedlo como queráis. O tal vez no queráis leerlo. Pero si lo hacéis, no lo hagáis en ebook. Os perderíais los dibujos y filigranas con que Galeano acompaña las palabras.
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Prueba de humanidad: probad a leer el cuentecito Nochebuena sin conmoveros.
jueves, 2 de abril de 2015
SUEÑO DE UNA TARDE DOMINICAL EN LA ALAMEDA CENTRAL
Imagen tomada de news.urban360. |
Me gustan mucho los muralistas mexicanos porque practicaban una forma de expresión inmediata y próxima que llegaba fácilmente a toda la población. Además, siendo militantes del movimiento comunista o próximos a él, supieron desembarazarse de esa retórica grandilocuente y acartonada del realismo socialista que se hace tan machacona y aburrida desde el punto de vista estético. Y de todos ellos prefiero a Diego Rivera, porque nunca le falta un aire infantil, es profundamente colorista y siempre percibo en sus obras un toque de humor y aire naíf que a mí me atrae mucho.
De este Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central hay muchas y buenas explicaciones en internet. Os dejo aquí abajo un vídeo que comenta cuáles son los personajes principales que aparecen él, del canal de difusión cultural de la UNAM.
Como se recuerda en el vídeo, el mural estuvo tapado durante unos años, ya que en su origen el papel que sostiene Ignacio Ramírez —a la derecha de los globos y por debajo de Benito Juárez— tenía escrita la frase "No hay Dios", lo que provocó las protestas de la Iglesia y la ocultación de la pintura. Rivera cambió el texto por "Conferencia en la Academia de Letrán, el año de 1836", que era una forma oculta de decir lo mismo, pues Juárez difundió su tesis atea en 1836, cuando era estudiante en dicha academia. Cosas de la censura y de los subterfugios que los artistas utilizan.
Podéis ver el mural en el Museo Mural de Diego Rivera.
Como se recuerda en el vídeo, el mural estuvo tapado durante unos años, ya que en su origen el papel que sostiene Ignacio Ramírez —a la derecha de los globos y por debajo de Benito Juárez— tenía escrita la frase "No hay Dios", lo que provocó las protestas de la Iglesia y la ocultación de la pintura. Rivera cambió el texto por "Conferencia en la Academia de Letrán, el año de 1836", que era una forma oculta de decir lo mismo, pues Juárez difundió su tesis atea en 1836, cuando era estudiante en dicha academia. Cosas de la censura y de los subterfugios que los artistas utilizan.
Podéis ver el mural en el Museo Mural de Diego Rivera.
(Al terminar el vídeo 1, haced clic en el 2 para continuar con la explicación)
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