Mostrando las entradas para la consulta Blake ordenadas por fecha. Ordenar por relevancia Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas para la consulta Blake ordenadas por fecha. Ordenar por relevancia Mostrar todas las entradas

jueves, 18 de abril de 2024

THIS IS POP!, Sala de Exposiciones de las Francesas

Paolozzi

No soy un entusiasta del arte pop, e incluso alguna de sus creaciones me parecen dignas de olvido, pero me gustó mucho esta que encontré en la Sala de Exposiciones de las Francesas por lo bien organizada que estaba, porque recogía manifestaciones artísticas en toda su evolución, porque las obras expuestas eran verdaderamente obras muy significativas del movimiento y porque se hacía acompañar de unos textos realmente buenos y escritos con naturalidad, cosa que no suele ser habitual

Lichtenstein

Murakami

Koons, Blake y Haworth, Warhol


 

Texto de la portada de la exposición.

La exposición 'This is Pop!' presenta el arte pop en toda su magnitud, como un fenómeno cultural que empapó todo tipo de manifestaciones creativas.

La muestra comienza a explorar el movimiento desde sus orígenes, en la Inglaterra de los años 50 como reacción al expresionismo abstracto, representada aquí por Eduardo Paolozzi, Richard Hamilton, Allen Jones y Peter Blake. Con una concepción rupturista del arte que abría las puertas a elementos tomados de la publicidad y la cultura de masas, el pop art lograba una postura estética que implicaba una crítica a la sociedad consumista.

El segundo capítulo muestra la rápida influencia que el movimiento tuvo en los Estados Unidos, donde surgen algunas de las figuras más conocidas del género como Andy Warhol, Robert Rauschenberg o Roy Lichtenstein.

El pop art tuvo su reflejo también en España, si bien asumió un marcado carácter social y un tono político, como dan muestra Equipo Crónica, Equipo Realidad, Eduardo Arroyo y Rafael Canogar.

La muestra camina hacia los artistas que han nutrido el movimiento en décadas posteriores con el apartado ‘La posmodernidad artística y el Neopop’, con piezas del estadounidense Jeff Koons, de los británicos Damien Hirst y Julian Opie y los japoneses Takashi Murakami y Yoshitomo Nara. Influidos por las nuevas tecnologías, el exceso de información y la pluralidad de lenguajes y materiales, profundizan en la producción en masa iniciada hasta el punto de montar sus propias factorías.

El recorrido mira al entorno urbano con el foco puesto en las creaciones de algunos de los muralistas más aclamados de la actualidad, fuertemente influenciados por el pop art: Shepard Fairey (Obey), Brian Donnelly (Kaws), Dean Stockon (D*Face) y los españoles Boamistura, Dulk, Okuda y Ricardo Cavolo.

Por último, ‘This is Pop!’ recuerda la estrecha relación entre el movimiento plástico y la música con la exposición de portadas de álbumes realizadas por algunos artistas presentes en el recorrido y otros como Bansky o Peter Blake para grupos como The Beatles, Rolling Stones, Blur o Lady Gaga; acompañadas por códigos QR que enlazan a temas de estos míticos discos de vinilo.



Horario de 09:00 a 15:00 de lunes a viernes

Entrada libre

***


viernes, 29 de septiembre de 2023

YA SOMOS EL OLVIDO QUE SEREMOS (Borges)

He llegado hasta el espléndido soneto de Borges gracias a Vargas Llosa y su estupendo El fuego de la imaginación, una recopilación de artículos sobre literatura, teatro, cine, arte y arquitectura. En el que titula La amistad y los libros, además de tener palabras muy cariñosas para Javier Cercas y Juan Cruzhabla mucho y muy bien de Héctor Abad Faciolince —acaso os suene más por la película que se hizo con su novela—. De su El olvido que seremos dice, por ejemplo,que ha sido la más apasionante experiencia de lector de mis últimos años —el texto es de 2010—. Continuaba más adelante comentando Traiciones de la memoria, y ahí es donde surgió el argentino ciego y magistral. 

Tantas buenas palabras por parte de un grandísimo escritor que al mismo tiempo es un grandísimo lector —no siempre coinciden estas dos habilidades— tuvieron como consecuencia que leyera de una tacada ambos títulos del colombiano. En el de las traiciones es donde aparece el apasionante relato Un poema en el bolsillo —yo también opino, como Vargas Llosa, que de los tres que componen el libro es sin duda el mejor—.

Esta pequeña aventura libresca, que de hecho es bastante representativa de mi caótico proceder lector, es la que ha dado pie a que me interesara por el soneto borgiano —no recogido en su Obra poética 1923-1977—. Pero la cuestión es que, una vez llegado a él, me he encontrado con los otros cuatro que aparecieron en aquella publicación prácticamente artesanal de Ediciones Anónimas. Y, claro, no he resistido la tentación de copiarlos todos, ni tampoco quiero dejar sin agradecer a Vargas Llosa y a Abad Faciolince el haberme ofrecido este hallazgo. 

Estos son los 5 poemas:

I

Encorvados los hombros, abrumado
por su testa de toro, el vacilante
Minotauro se arrastra por su errante
laberinto. La espada lo ha alcanzado
y lo alcanza otra vez, Quien le dio muerte
no se atreve a mirar al que fue toro
y hombre mortal, en un ayer sonoro
de hexámetros y escudos y del fuerte
batallar de los héroes. Ilusoria
fue tu aventura, trágico Teseo;
de la bifronte sombra la memoria
no ha borrado las aguas el Leteo.
Sobre los siglos y las vanas millas
ésta da horror a nuestras pesadillas.


II

Me pesan los ejércitos de Atila,
las lanzas del desierto y las murallas
de Nínive, ahora polvo; las batallas
y la gota del tiempo que vacila
y cae en la clepsidra silenciosa
y el árbol secular donde clavada
por Odín fue la hoja de la espada
y cada rosa y cada primavera
de Nishapur. Me abruman las auroras
que son y fueron los ponientes,
el amor y Tiresias y las serpientes
las noches y los días y las horas.
gravitan sobre la sombra que soy.
La carga del pasado es infinita.



III

Ya somos el olvido que seremos.
El polvo elemental que nos ignora
y que fue el rojo Adán y que es ahora
todos los hombres y los que seremos.
Ya somos en la tumba las dos fechas
del principio y el fin, la caja,
la obscena corrupción y la mortaja,
los ritos de la muerte y las endechas.
No soy el insensato que se aferra
al mágico sonido de su nombre;
pienso con esperanza en aquel hombre
que no sabrá quien fui sobre la tierra.
Bajo el indiferente azul del cielo,
esta meditación es un consuelo.


IV

Los ordenes de libros guardan fieles
en la alta noche el sitio prefijado.
El último volumen ha ocupado
el hueco que dejó en los anaqueles.
Nadie en la vasta casa. Ni siquiera
el eco de una luz en los cristales
ni desde la penumbra los casuales
pasos de vaga gente por la acera.
Y sin embargo hay algo que atraviesa
lo sólido, el metal, las galerías,
las firmes cosas, las alegorías
el invisible tiempo que no cesa,
que no cesa y que apenas deja huellas.
Ese alto río roe las estrellas.


V

¡Cuántas cosas hermosas! Los confines
de la aurora del Ganges, la secreta
alondra de la noche de Julieta.
El pasado está hecho de jardines.
Los amantes, las naves, la curiosa
enciclopedia que nos brinda ayeres,
los ángeles del gnóstico, los seres
que soñó Blake, el ajedrez, la rosa,
El cantar de los cantares del hebreo,
son la flor que florece en el desierto
de la atroz Escritura, el mar abierto
del álgebra y las formas de Proteo.
Quedan aún tantas estrellas.
Suspendo aquí esta vana astronomía.

PS: Otro día me ocuparé de la magistral El olvido que seremos.

***


lunes, 27 de febrero de 2023

BYRON EN CASTELLANO (una selección)



Como aconsejaba Van Dorenal leer a Byron, conviene ser selectivo. No toda su vasta obra poética conserva la frescura que le vieron los lectores de antaño. Tal vez lo mejor sea comenzar con alguna antología e ir después profundizando en la obra. Pero cada persona tiene sus gustos y costumbres, y tampoco está mal lanzarse de golpe e impregnarse del autor hasta hartarse... o quedar prendido de su encanto. 

Don Juan es su obra mayor y última, tanto que está inacabada. Nada que ver con el Don Juan de Zorrilla o el de Tirso. La de Cátedra es una edición crítica —yo echo de menos unas cuantas notas más— y, por lo tanto, bilingüe y con estudio introductorio. En este poema épico-narrativo aprovecha para ofrecer su visión del mundo, proyectarse en el personaje y hasta para poner a caldo a los poetas de su terruño con los que no compartía gustos ni manías. Unos 16.000 versos y multitud de aventuras. El lord no era lo que se dice lacónico.

Librerías.

La publicación en 1812 de los dos primeros cantos del Childe Harold —son cuatro— le convirtieron inmediatamente en el poeta más famoso de Inglaterra. Más asequible que el anterior por su extensión, nos cuenta los viajes y reflexiones de un joven aburrido de su patria, él mismo. El corsario fue el poema que inspiró a Espronceda para componer un pirata bastante más breve y, por eso mismo, más intenso. 


Estos son, posiblemente, sus dos poemas dramáticos más famosos —escribió ocho—, más satánicos y más legibles en la actualidad. La que aquí aparece es una edición crítica de gran calidad y muy cuidada. Se recoge, incluso, la respuesta de W. Blake al Caín de Byron: El fantasma de Abel (1822). Entre iconoclastas rebeldes y heréticos andaba el juego.


Para este tiempo de picoteo y cambio rápido de lectura o de pantalla, cualquiera de estas dos antologías van muy bien —ambas se encuentran fácilmente en las librerías—. Ofrecen una buena selección de la obra lírica breve. Ambas son bilingües. La de Visor ofrece una pequeñísima muestra del Childe Harold y del Don Juan. La de Alba, el poema largo La visión del juicio (tremendo ajuste de cuentas con R. Southey al más puro estilo quevediano, incluso redactó un prefacio firmado como Quevedo Redivivus. Ahí es nada).  


 Ya tenéis Byron para entreteneros.

***


jueves, 9 de febrero de 2023

EL MUNDO COMO OBRA DE ARTE, Frank Wilczek

Ejemplar del KM
Un Keats y un Newton que se escucharan mutuamente podrían oír cantar las galaxias.
                                                      R. DAWKINS

He aquí un libro indispensable para quien guste de la divulgación científica bien hecha, esté convencido o a medio convencer de que la belleza existe y de que una explicación, sea cual sea, gana en belleza y profundidad cuanto mejor combine los conocimientos procedentes de la ciencia, del arte y de la filosofía. 

El mundo como obra de arte es un fascinante viaje por los hallazgos más destacados que el conocimiento humano ha realizado hasta la fecha desde la aparición de la ciencia contemporánea, esto es, la que corresponde a los siglos XX y XXI. Eso incluye incluye lo más extraordinariamente ínfimo —partículas— y lo más grande que podamos pensar. Y todo eso para intentar contestar la pregunta inicial que se formula Wilczek, Nobel en 2004: ¿Encarna el mundo ideas bellas?, ¿Es el mundo una obra de arte?

En cualquier caso, no es Wilczek el primero en acudir a la idea de belleza para explicar el mundo. Einstein o Dirac ya se sumergieron en ella, seguramente porque crearon teorías y fórmulas que toda la comunidad ha descrito posteriormente como extraordinariamente bellas. De hecho, Dirac decía aquello de que la belleza matemática era casi una religión.

Y para responder con solvencia y elegancia a la cuestión de la belleza el autor no tiene ninguna dificultad ni reparo en acudir, por ejemplo, a Platón, Aristóteles, Descartes, Russell, Whitehead, Brunelleschi, da Vinci, Blake, Keats, Galileo, Newton, Maxwell, Faraday, Einstein, Noether o Dirac. Leer textos con semejante capacidad de fusión y síntesis es uno de los placeres más grandes que nos puede dar la divulgación, equiparable al del texto creativo.

Seguramente Picasso no estaría de acuerdo con Wilczek, pues afirmaba que no existía la belleza y odiaba el juego estético entre ojo y mente al que decía que jugaban los mandarines que la apreciaban. Él solo amaba u odiaba algo —¿Amaba el Partenón, pero era incapaz de apreciar su belleza?—. Es lo que tienen las afirmaciones pasionales del arte. Solo admiten la adhesión incondicional o el rechazo absoluto. Excluyen toda racionalidad. Tanta pasión puede matar la belleza... y la verdad. Prefiero a Wilczek, que además de apreciar la belleza enseña a reconecerla en multitud de objetos, espacios, acciones y pensamientos.

***


lunes, 6 de febrero de 2023

T.S.ELIOT, La aventura sin fin

Ejemplar de la biblioteca de Okendo.
Se puede estar de acuerdo o no con el análisis que Eliot realiza de la obras literarias que comenta, se pueden compartir o no sus opiniones, pero es indudable que la lectura que hace es una lectura rigurosa, profunda, original y bien argumentada. En cualquier caso, nunca desorienta, expone claramente cuáles son sus ideas y los fundamentos teóricos en las que están asentadas, y sus comentarios tienen un interés pedagógico indudable. Otra cosa es que los gustos y tendencias cambien de una generación a otra (él lo sabía) y que en función de esos gustos se produzcan giros o se entronicen y se destronen tendencias, estilos y autores. 

Esta selección de ensayos realizada por Andreu Jaume para Lumen (desde hace un tiempo integrada en Penguin) recoge trabajos sobre Marlowe, Blake, los metafísicos, Andrew Marwell, Lancelot Andrewes, Shakespeare y el estoicismo de Séneca, Dante, Baudelaire, Byron, Yeats, Milton, además de otros de carácter genérico como ¿Qué es un clásico?, La música de la poesía, Religión y literatura, Poesía y drama, Las tres voces de la poesía y la famosa conferencia que impartió en 1961 Criticar al crítica. En definitiva, una estupenda selección para conocer el pensamiento de Eliot sobre literatura y una invitación a la siempre grata tarea de descubrir nuevas lecturas.

Se pueden leer un buen puñado de páginas en este enlace antes de decidir si interesa o no.

***

lunes, 30 de enero de 2023

SUBIR AL ORIGEN. Antología comentada de poesía occidental no hispánica (1800-1941)

Editorial
El profesor de la universidad de Oviedo, José María Castrillón, ha publicado hasta ahora los siguientes títulos de creación:
-La sonrisa de un delfín (Heracles y Nosotros, 1991), 
-Animal de compañía (Nómadas, 1998), 
-Aún por recorrer (Magua, 2004), 
-La vieja munición (Idea, 2005), 
-el círculo y la piedra (Trea, 2006), 
-gramos (Trea, 2010).

Todos ellos son poemarios. Este último, en cambio, es una antología que tiene un fuerte carácter didáctico (o si lo preferís, divulgativo), pues al mismo tiempo que ofrece una selección de textos de la época de la que se ocupa, realiza una introducción de carácter general sobre las características más sobresalientes de ese período histórico, así como otra individual para que ayudar a colocar los textos personales dentro del paorama de la época o de la tendencia en la que se inscriben y a la que aportan nuevos elementos estilísticos y poéticos. Sabido es que toda expresión creativa de alguna relevancia tiene su origen en una tradición sobre la que se construye y a la que, a su vez, modifica. 

Además del recorrido que hace —Wordsworth, Novalis, Leopardi, Keats, Baudelaire, Verlaine, Rimbaud, Whitman, Dickinson, Mallarmé, Rilke, Yeats, Cavafis, Apollinaire, Pessoa, Eliot, Saint-John Perse, Stevens, Eluard, Montale, Benn, Ajmátova— y que no tiene ninguna intención de convertirlo en canónico, ofrece otro itinerario posible para recorrer lo que fue la poesía occidental no hispánica durante ese crucial siglo y medio. En este caso sin selección de textos, pero sí con comentarios precisos y relevantes que ayudan a quien se quiera iniciar en la otra lectura de esa misma tradición occidental y tener así una panorámica más completa —Hölderlin, Heine, Coleridge, Byron, Shelley, Blake, Nerval, Hopkins, Laforgue, Poe, Pound, W. C. Williams, Moore, Frost, Crane, Valéry, Ungaretti, Trakl, Mayakovski, Breton, Tzara, Tsvetáieva—.

Y por si todo esto resultara poco, cada poeta antologado se cierra con un apartado que Castrillón titula como Homenaje en la poesía hispánica. Aquí se recoge un brevísimo comentario sobre la incidencia que ha tenido en la poesía escrita en castellano más un poema que algún poeta ha escrito a manera de homenaje o que ha surgido por la influencia que el poeta antologado ha ejercido en el autor de escritura hispana.

Una antología especialmente recomendable para quienes deseen tener una visión panorámica inicial acerca de la poesía que se practicaba durante ese período.

PS: No transcribo ningún texto porque en este mismo blog podéis encontrar muchos poemas de la casi totalidad de los autores recogidos o citados en la antología.

***


miércoles, 14 de diciembre de 2022

DESPUÉS DE LEER A BLAKE


1. No sé nada acerca del funcionamiento del cerebro. Ignoro, por tanto, si Blake padecía algún tipo de dolencia mental.

2. Toda literatura se hace con palabras. Las palabras tienen significados. Solo la gran literatura es capaz de situarse por encima de los significados sin importar que recurra a enunciados y expresiones simples o complejas:

Estos días azules y este sol de la infancia

(A. Machado). 

Para ver un mundo en un grano de arena 
y un paraíso en una flor silvestre,
sostén el infinito en la palma de la mano
y la eternidad en una hora.

(Augurios de inocencia. W. Blake).

3. Cuando un texto es capaz de capturar instantáneamente nuestra atención, cuando penetra en nuestro ser más íntimo y despliega un cúmulo de sensaciones, cuando rememora mundos, imágenes e ideas que se encuentran más allá de las palabras con las que ha sido compuesto, cuando puede explicar aquello que se sitúa en la zona más íntima del ser...; entonces y solo entonces estamos ante la gran literatura, estamos ante el esplendor de lo sublime, ante la expresión de la belleza (ya sea insondable, terrible o francamente amable).

4. Blake parte de una doctrina artística basada en la negación de la razón urizénica (Urizen), es decir, empírica. En su opinión es necesario ver con la Imaginación. Que cada cual se sitúe donde mejor le convenga para comprender el mundo y sus gentes. Eso no afecta a la creación literaria.

5. Es innegable que la poesía de Blake tiene un fuerte componente filosófico. Dicho de otra manera: parte de una forma de entender la realidad que no es ni la de los ilustrados ni la de la física newtoniana.

6. Determinar si Blake construye una mitología para explicar el universo trascendente o no es algo que quizás no pueda explicarse nunca. Eso tampoco afecta a la literatura.

7. Termino recordando las palabras de Goethe, quien, por cierto, se sitúa bastante lejos del pensamiento de Blake (o, tal vez, no tanto): una buena obra de arte tiene y tendrá siempre consecuencias morales; pero exigir fines morales a un artista significa malograrle su oficio (Poesía y Verdad, Alba, 2017).

***


viernes, 2 de diciembre de 2022

WILLIAM BLAKE Y SUS ILUSTRACIONES


[Nota previa: todas las traducciones de los poemas que aquí se recogen han sido realizadas por Jordi Doce para Visor. Los grabados de Blake, han salido de Wikiart. El óleo de John Martin, de Wikipedia]


No creo que haya en toda la historia de la literatura un caso como el de W. Blake, un poeta al que podemos leer en sus textos al mismo tiempo que en sus ilustraciones. Sí, es cierto que hay más escritores que también han pintado, pero no hay ninguno que alcance su extraordinaria calidad artística ni que haya ilustrado de manera tan directa y amplia su obra.

EL NIÑO PERDIDO

Oh padre, padre mío, ¿a dónde vas?
No camines tan rápido.
Dile algo a tu hijo, padre, háblame,
o acabaré perdiéndome.

La noche era oscura, el padre no estaba.
La escarcha mojó al niño.
El cieno era hondo, el niño lloraba,
y huyó sin más la bruma.


EL NIÑO ENCONTRADO

El chiquillo perdido en el marjal desierto, 
guiado por la luz errante, 
rompió a llorar, mas Dios bajó de blanco
con la figura de su padre.

Besó al niño, tomó su mano fría
y hasta su madre lo condujo,
quien, pálida y llorosa, por el valle desierto
a su niño buscaba.


ALEGRÍA INFANTIL

"No tengo nombre,
nací hace dos días".
"¿Cómo habré de llamarte?"
"Soy feliz;
alegría es mi nombre".
"¡Que la dulce Alegría te acompañe!

¡Bella alegría!
Dulce alegría sin edad.
Dulce alegría he de llamarte:
tú sonríes,
yo te canto.
Que la dulce alegría te acompañe".

Por eso, no hay mejor edición de su poesía que la que se acompaña de los grabados que el propio autor diseñó para sus versos. En este sentido, la que realizó Atalanta con los Libros proféticos es ejemplar, aunque no sea precisamente barata. Pero merece la pena hacerse un regalo. Ahí vamos a encontrarnos con una de las más impresionante creaciones del artista inglés, El anciano de los días, es decir, Urizen. Una obra que por sí misma requeriría un comentario que no voy a realizar ahora.


Lo mismo que la dedicada a Newton y que Paolozzi reprodujo a su manera para la entrada de la Biblioteca Británica de Londres.

Sin embargo, hay al menos un poema en el que la representación artística realizada por el poeta-grabador ha sido superada por un contemporáneo suyo. Y no me refiero a la calidad del dibujo, sino al significado, a la conexión entre lo que el poema y la imagen quieren comunicarnos. Estoy hablando del poema

LA VOZ DEL ANTIGUO BARDO

Acércate, muchacho alegre,
y admira la mañana desvelada:
de la verdad recién nacida imagen.
Se disipan la duda y la razón nublada,
y las negras disputas y las mañas arteras.
Laberinto sin fin es la locura.
Intrincadas raíces confunden sus caminos,
¡y cuántos han caído!
Tropiezan de noche con los huesos de los muertos,
sienten no saben qué, mas se preocupan:
y desean guiar a los demás cuando debieran ser guiados.

Ampliad y comparad:




Curiosamente, la obra de Martin nació para representar un poema del escritor inglés Thomas Gray, no el de Blake; no obstante, el espíritu irracionalista romántico está más explícitamente recogido.

***


Путин, немедленно останови войну!

sábado, 29 de octubre de 2022

WILLIAM BLAKE, Augurios de inocencia

Editorial

 Edición, traducción y notas de Fernando Castanedo

LA SONRISA

Hay una sonrisa de amor
y hay una sonrisa engañosa
y una sonrisa de sonrisas
en que ambas sonrisas se tocan

también existe un ceño de odio
y existe un ceño de desdén
y existe el ceño de los ceños
que olvidar quieres sin poder

pues se enquista en el corazón
y del espinazo en la médula
con él no hay sonrisa que valga
salvo una única y risueña

que de la cuna al hoyo solo
se puede sonreír una vez
pero esa vez que se sonríe
a toda pena pone amén


Nos recuerda Fernado Castanedo en la introducción que en la Inglaterra de mediados del XVIII ya empezaba a extenderse entre la población la sensibilidad de respeto hacia los animales. Si habéis oído ya el audio, os habréis dado cuenta de que Blake dedica la primera parte de sus Augurios a denunciar la crueldad hacia los animales. Hogarth compone Las cuatro etapas de la crueldad en 1751. Será en 1832 cuando el Acta de Anatomía pondrá fin a la disección de asesinos, y la mayoría de las torturas de animales representadas en las imágenes de Hogarth fueron proscritas por el Acta de Crueldad contra los Animales de 1835.


***


Путин, немедленно останови войну!

lunes, 10 de octubre de 2022

WILLIAM BLAKE

Editorial
Charles Van Doren escribe en su Breve historia del leer: Cuando William Blake falleció en 1827, fue enterrado en una tumba sin inscripción. Este anonimato era simbólico de la soledad que le había correspondido en suerte durante la mayor parte de su vida. Publicó varios libros, pero ninguno de ellos convenció a un público que carecía por completo de todo conocimiento de su grandeza como poeta, artista y hombre; y durante casi cien años más fue un autor apenas leído ni estudiado. William Butler Yeats contribuyó a publicar una edición anotada de las obras mayores de Blake en 1893, y T.S.Eliot incluyó un ensayo sobre él en El bosque sagrado (1920), que invitó a muchos lectores (muchos más de los que lo habían leído hasta entonces) a acercarse a Blake como un autor valioso. El centenario de su muerte, en 1927, acarreó la publicación de una multitud de artículos, ediciones y estudios. Hoy Blake forma parte indudable del panteón más selecto de la poesía inglesa (p 306).

Además, Blake está muy bien publicado y traducido en castellano. Los libros proféticos de Atalanta son magníficos, y son la primera edición completa bilingüe y con todas sus imágenes en color. El sustancioso prólogo es de Patrick Harpur; la traducción, de Bernardo Santano Moreno.

Editorial. Ejemplar del KM


Editorial. Ejemplar del KM
Para bolsillos menos pudientes, siempre está la muy austera edición de Orbis, de 1986, que fue una cesión de la traducción publicada seis maños antes por Libros Río Nuevo.

En Iberlibro
Pero quien verdaderamente ha hecho un trabajo excelente para explicar la poesía de este poeta y grabador singular ha sido Kathleen Raine, quien con estos Ocho ensayos publicados por primera vez en 1991 en inglés (2013 en castellano) reveló el significado profundo de su obra y lo puso al alcance de cualquiera. Indispensable para adentrarse en el complejo mundo espiritual del poeta inglés.

Editorial. Ejemplar del KM

Podéis encontrar una brevísima colección de poemas en amediavoz.com y en ciudadseva.com.

Y un breve artículo sobre su tan traída y llevada locura.

***


Путин, немедленно останови войну!

lunes, 5 de septiembre de 2022

WLLIAM BLAKE, El negrito

A mí del visionario Blake la obra que más me gusta es la primera, la del difícilmente clasificable y divertido Una isla en la Luna, o los poemas breves de las colecciones Cantos de inocencia y Cantos de experiencia. En la primera de ellas se encuentra uno de los poemas que el profesor Pujals calificó como temprana censura del racismo. Estamos hablando de 1789, el año de la Revolución francesa.


Mi madre me engendró en el salvaje sur
y soy negro. Pero ¡ah!, mi alma es blanca.
Blanco como un ángel es el niño inglés;
pero yo soy negro, como desposeído de luz.

Mi madre me instruyó bajo un árbol
y allí sentada, antes del pleno calor del día,
me atrajo a su seno, besándome.
Luego, señalando al este, comenzó a decir:

"Mira el sol naciente. Allí mora Dios
e imparte su luz y regala su calor
y flores y árboles y bestias y hombres reciben
solaz por la mañana y dicha al mediodía.

Y se nos puso en la tierra
para que aprendamos a soportar los rayos del amor;
y estos negros cuerpos y estos rostros tostados
son sólo una nube y semejantes a un umbrío bosquecillo.

Pues cuando nuestras almas hayan aprendido el calor a soportar
la nube se desvanecerá. Oiremos su voz
que nos dirá: Salid del bosque, mis bien amados,
y en torno a mi tienda de oro, como corderos, regocijaos".

Así habló mi madre, besándome
y así lo cuento al niñito inglés.
Cuando yo me libere de mi nube negra y él de la suya blanca
y como corderos nos regocijemos en torno a la tienda de Dios,

le protegeré del calor hasta que pueda soportarlo
y se incline dichoso sobre la rodilla de nuestro padre.
Y entonces me estaré de pie, acariciando su plateado cabello
y seré como él; y en adelante me amará.

(Traducción: Pablo Mañé Garzón).

William Blake falleció en 1827. Digamos que pasó sin pena ni gloria hasta que, como le ocurrió a Góngora, llegó su centenario en 1927 —otra coincidencia— y una multitud de estudios y ediciones de sus obras lo hizo surgir del olvido, sobre todo, gracias al aprecio que le hicieron escritores de la talla de W.B.Yeats o T.S.Eliot.

Si queréis escuchar el poema en versión original, pinchad aquí.

***

Путин, немедленно останови войну!