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martes, 16 de agosto de 2022

SOR JUANA INÉS DE LA CRUZ, y 4

Ejemplar del KM
Sor Juana Inés de la Cruz (¿1648/1651?-1695). Con esta entrada en la que tiene cabida un material de lo más variopinto doy por cerrado el ciclo dedicado en este blog a nuestra escritora barroca más destacada. 

Primero, tres títulos para leer en papel la obra de la autora:
  • Poesía lírica. Edición de José Carlos Gómez Boixo. Cátedra, 2020.
  • El sueño. Edición y comentario de Emil Volek. Visor, 2019.
  • Poesía, teatro, pensamiento: lírica personal, lírica coral, teatro, prosa. Edición de Georgina Sabat de Rivers y Elías Rivers. Espasa, 2004. (Es el que aparece en la fotografía. Obra completa. Existe en bibliotecas o libro de viejo).
Después, una bibliografía mínima sobre su obra:
Seguimos con un par de conferencias:

    

Continuamos con un bolero:


Y terminamos en el cine con una película: Yo, la peor de todas, dirigida por María Luisa Bemberg.


*** 


Путин, немедленно останови войну!

lunes, 18 de julio de 2022

SOR JUANA INÉS DE LA CRUZ, 3

Editorial
Las ciencias avanzan que es una barbaridad, cuando avanzan, que no es siempre, o cuánto ha costado llegar a saber lo que sabemos. Estos podrían ser algunos de los titulares para introducir el soneto que sor Juana Inés de la Cruz escribió para celebrar el conocimiento astronómico del jesuita Eusebio Francisco Kino.

Aplaude la ciencia astronómica del padre Eusebio Francisco Kino, de la compañía de Jesús, que escribió del cometa que el año de ochenta apareció, absolviéndole de ominoso.

Aunque es clara del cielo la luz pura
clara la luna, y claras las estrellas,
y claras las efímeras centellas,
que el aire eleva y el incendio apura;

aunque es el rayo claro, cuya dura
producción cuesta al viento mil querellas,
y el relámpago, que hizo de su huellas
medrosa luz en la tiniebla obscura;

todo el conocimiento torpe humano,
se estuvo obscuro sin que los mortales,
plumas pudiesen ser, con vuelo ufano,

Ícaros de discursos racionales,
hasta que al tuyo, Eusebio soberano,
les dio luz a las luces celestiales.


Que sor Juana era una mujer muy inteligente nadie lo pone en duda. Famosa era su enorme curiosidad y su bien merecida fama de polímata —me encanta esta palabreja—. Su sed de conocimiento no tenía límites y eso lo dejó bien claro con la variedad y riqueza de sus escritos. Bien es cierto que carecía de formación matemática y que de Galileo y sus trabajos seguramente la única noticia que llegó a tener fuese la de que afirmar ciertas cosas suponía vérselas con la Inquisición. Pero los tiempos eran los que eran y no hay nadie infalible, por muy bien que nos caiga. Lo sorprendente es otra historia.

El soneto cobra sentido si conocemos la anécdota a la que responde. Estos son los hechos:

1. El jesuita Kino, aficionado a los cielos nocturnos, escribió un texto sobre el cometa de 1680. En él terminaba diciendo que indefectiblemente anunciaba sucesos siniestros.

2. Esa era, precisamente, la creencia popular que venía desde la antigüedad: que los cometas viajaban por el espacio que hay entre la Tierra y la Luna, y que anunciaban desastres y calamidades mil. Es decir, la gente, cada vez que veía un cometa —y el de aquel año se vio muy, muy bien— estaba aterrorizada.

3. Galileo ya había dicho que los cometas no circulaban por la zona sublunar. Pero lo sabían él y otros pocos más. Entre ellos —y aquí viene lo curioso—, Carlos de Sigüenza y Góngora, amigo de sor Juana, quien escribió un Manifiesto filosófico contra los cometas, despojados del imperio que tenían sobre los tímidos.

4. Sigüenza fue precisamente quien presentó Kino a sor Juana cuando este llegó a México. Juana quedó encantada con los conocimientos de Kino y Kino con los de Juana. Poco después el jesuita de origen italo-austríaco envió el folleto que había escrito a la monja y la respuesta fue este soneto de alabanza a los conocimientos del misionero y a la luz que arrojaba sobre el suceso.

El pobre Sigüenza debió de quedarse perplejo y profundamente apenado ante la aparición del soneto, o así podemos suponerlo, pues no nos ha llegado ningún documento que nos informe. Sí sabemos, en cambio, que a pesar del chasco sufrido la buena relación entre ambos duró muchos años.

Sea como fuere, y dejando las anécdotas a un lado, si queréis leer la obra poética de esta animosa mujer que sentía una verdadera pasión por el conocimiento, aquí están recogidos todos sus sonetos y aquí una amplia selección de cuantas formas estróficas practicó. Yo, en cualquier caso, aconsejo que os hagáis con alguna edición en papel.

***


Путин, немедленно останови войну!

viernes, 1 de julio de 2022

SOR JUANA INÉS DE LA CRUZ, 2 (la cocina y Aristóteles)

Ejemplar del KM

 
Yo diría que este libro es básico para adentrarse en el conocimiento de la vida y de la obra de sor Juana Inés de la Cruz. Como el mismo Octavio Paz dice, ese enigma no es uno solo, sino muchos, y para intentar dar respuesta a todos ellos se lanzó el intelectual mexicano a una investigación exhaustiva con la intención de arrojar un poco de luz sobre estas cuestiones: 
El libro tiene casi 700 páginas, todas ellas vibrantes de excelente investigación y escritura. No voy a descubrir yo ahora nada de este fascinante sabio y poeta que fue galardonado
en 1990 con uno de los más merecidos premios que se hayan otorgado a lo largo de la historia del Nobel. El libro está aún en catálogo y también lo podéis encontrar en internet. Y como ando mandando pistas y herramientas para quien quiera acercarse a la tertulia de octubre, este libro y el texto que aparece más abajo me parece que pueden ser de gran utilidad.

Gracias a él supe en su momento de la  deliciosa Respuesta a sor Filotea, reacción a una carta del obispo de Puebla Manuel Fernández de Santa Cruz que criticaba un opúsculo de la monja, la Carta atenagórica, donde discutía temas de enjundia teológica al erudito jesuita António Vieira. La reacción del obispo provocó la respuesta de la poeta. En ella defiende su labor intelectual y reclama el derecho de la mujer a la educación. Y, además, se apena de la oportunidad perdida por Aristóteles al no saber de fogones y guisos. Buenísimo.

Leed con atención estas palabras de nuestra polímata del barroco: 

Estaban en mi presencia dos niñas jugando con un trompo, y apenas yo vi el movimiento y la figura, cuando empecé, con esta mi locura, a considerar el fácil moto de la forma esférica, y como duraba el impulso ya impreso e independiente de su causa, pues distante la mano de la niña, que era la causa motiva, bailaba el trompillo; y no contenta con esto, hice traer harina y cernerla para que, en bailando el trompo encima, se conociese si eran círculos perfectos o no los que describía con su movimiento; y hallé que no eran sino unas líneas espirales que iban perdiendo lo circular cuanto se iba remitiendo el impulso. Jugaban otras a los alfileres (que es el más frívolo juego que usa la puerilidad); yo me llegaba a contemplar las figuras que formaban; y viendo que acaso se pusieron tres en triángulo, me ponía a enlazar uno en otro, acordándome de que aquélla era la figura que dicen tenía el misterioso anillo de Salomón, en que había unas lejanas luces y representaciones de la Santísima Trinidad, en virtud de lo cual obraba tantos prodigios y maravillas; y la misma que dicen tuvo el arpa de David, y que por eso sanaba Saúl a su sonido; y casi la misma conservan las arpas en nuestros tiempos.

Pues ¿qué os pudiera contar, Señora, de los secretos naturales que he descubierto estando guisando? Veo que un huevo se une y fríe en la manteca o aceite y, por contrario, se despedaza en el almíbar; ver que para que el azúcar se conserve fluida basta echarle una muy mínima parte de agua en que haya estado membrillo u otra fruta agria; ver que la yema y clara de un mismo huevo son tan contrarias, que en los unos, que sirven para el azúcar, sirve cada una de por sí y juntos no. Por no cansaros con tales frialdades, que sólo refiero por daros entera noticia de mi natural y creo que os causará risa; pero, señora, ¿qué podemos saber las mujeres sino filosofías de cocina? Bien dijo Lupercio Leonardo, que bien se puede filosofar y aderezar la cena. Y yo suelo decir viendo estas cosillas: Si Aristóteles hubiera guisado, mucho más hubiera escrito (la negrita es mía).

***

Путин, немедленно останови войну!

martes, 14 de junio de 2022

EL SUEÑO de SOR JUANA INÉS DE LA CRUZ, 1

Sueño, Primero sueño o El sueño de sor Juana Inés de Cruz es la obra más compleja e importante de esta escritora barroca mexicana, pionera en muchos aspectos y una intelectual que todavía hoy nos sigue sorprendiendo. 

Algunas advertencias: 

Dada la complejidad de la escritura —proliferación de hipérbatos, es decir, la ruptura natural del orden de los elementos de una oración; y la enorme abundancia de paréntesis y digresiones—, así como la abstracción del tema, tal vez lo mejor sea abandonarse a la sugestión de las palabras y dejarse llevar por ellas. 

Para quienes deseen ir un poco más allá es conveniente decir que El sueño se inscribe dentro de lo que en la época era conocido como sueños de ascensión, en los que el alma salía del cuerpo y buscaba el sentido del mundo. En esa tradición está la obra magna de Dante, Divina comedia, la novela de Kepler, Somnium sive Astronomia lunaris, o el Iter exstaticum coeleste, de Kircher

Editorial

Así, pues, el contenido del poema es el siguiente: Llega la noche, todo duerme y el alma sale del cuerpo para descubrir el sentido del mundo. Se describe la quietud de la naturaleza, la de los animales y la del propio cuerpo. Aquí se proyecta la mirada sobre las funciones fisiológicas del corazón, los pulmones y el estómago. El alma fracasa en su intento de conseguir una intuición global del universo. Hemos llegado, más o menos a la mitad del poema (v 560). Cambia de método y recurre ahora al método deductivo. Fija su atención en minerales, vegetales, reino animal y el ser humano. El fracaso es el mismo y termina reconociendo la incapacidad humana para comprender el mundo en su complejidad, aunque el deseo de conocimiento se mantiene. Llega el día, los sentidos se despiertan quedando a luz más cierta/el mundo iluminado, y yo despierta (v 975). 

Además de los precedentes clásicos como Somnium Scipionis (Cicerón), Hercules furens (Séneca) Somnus (Estacio), sería injusto no señalar textos modernos de los que en alguna medida podemos considerar este magno Sueño como antecedente, tal vez lejano, tal vez simbólico, pero precedente al fin y al cabo: la Anábasis de Saint-John Perse, La tierra baldía, de Eliot; Kubla Khan, de Coleridge; Un golpe de dados, de Mallarmée; Altazor, de Huidobro...

En fin, que aquí os dejo la grabación completa del que la crítica especializada considera el mejor y más hermético poema de esta monja ilustre cuya pasión por conocer no tenía límites. Yo, exhausto por el esfuerzo de la lectura; pero aquí está:


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Путин, немедленно останови войну!

miércoles, 4 de noviembre de 2009

JUANA INÉS DE LA CRUZ


La próxima tertulia poética de la biblioteca municipal de Irún se centrará en la obra de la mexicana Juana Inés de la Cruz (1651-1695).

Antes de alojar los poemas sobre los que trabajaremos, he preferido dejaros la primera de las redondillas que componen el poema en el que acusa de inconsecuencia a los hombres. Este poema está compuesto por diecisiete redondillas. Es, sin ninguna duda, el más famoso de todos cuantos escribió la ilustre poeta, de quien Menéndez y Pelayo dijo lo siguiente: "No parece gran elogio para Sor Juana declararla superior a todos los poetas del reinado de Carlos II".

He aquí la estrofa con que se inicia el poema:

Hombres necios que acusáis
a la mujer sin razón,
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis.

Espero que sirva para despertar vuestra curiosidad por el poema y por Juana Inés de la Cruz.

jueves, 29 de noviembre de 2018

¿QUÉ ME CABE ESPERAR?

Javier Echeverria, Txelo Ruiz, Humberto Bustince y Elena Lazkano.

Acudo a la primera de las Jornadas sobre feminismo y robótica, en la que Humberto Bustince, fundador y responsable del Grupo de Investigación en Inteligencia Artificial y Razonamiento Aproximado de la Universidad Pública de Navarra, departe sobre Inteligencia artificial hoy: historia, posibilidades y desafíos. La exposición es dinámica, atractiva, llena de datos —él es especialista en ciencia de datos entre otros muchos saberes— y entusiasta. Comunica con pasión y se agradece.

Por la charla van pasando el big datalos cobotsla ciencia de datos, la industria 4.0, la computación cuántica, los procesadores inteligentes, el deep learning..., es decir, todo cuanto hace, es fruto y se refiere a la inteligencia artificial y, como las jornadas son las que son, termina con unos apuntes sobre el sesgo de género, la importancia que tiene que la mujer se incorpore a estas tareas, lo difícil que es ir contra los hábitos culturales y la necesidad de legislar adecuadamente para evitar los rasgos discriminatorios en programas, aplicaciones y algoritmos. Por supuesto, durante la exposición salen también las típicas advertencias sobre redes sociales y la llamada a extremar la discreción a la hora de utilizar información personal. 

Me resulta particularmente chocante que los expertos en inteligencia artificial hagan hincapié en que seamos cautos a la hora de ir dejando rastros de cuanto hacemos y decimos en la red —la prudencia es una virtud que deberíamos practicar en todo momento—, o que nos adviertan sobre los sesgos de género, los rasgos ideológicos y los aspectos discriminatorios e incluso racistas de programas, aplicaciones y demás herramientas virtuales. Sin duda, es obligado señalar el defecto para hacerle frente. Como la prudencia, es necesario tener siempre presentes la ecuanimidad y la justicia, valores esenciales a defender en cualquier ámbito y en cualquier momento. 

Ahora bien, si el rasgo más definitorio de la inteligencia artificial es precisamente el sustantivo y no el adjetivo, esto es, la inteligencia, si hoy ya existen máquinas que son capaces de aprender por su cuenta, si en algunas funciones ya toman pequeñas decisiones, si cada vez que se hacen proyecciones de futuro inmediato esta inteligencia es sin duda más rápida, más segura y más eficaz que la humana, no parece razonable obviar la mayor de las cuestiones: ¿estamos realmente creando máquinas capaces de pensar por sí mismas? Si esto es así, y parece que todo apunta en esa dirección, más preocupante que la máquina tenga voz de mujer o de hombre es que pueda decidir por su cuenta, incluso en contra de nuestra voluntad, como hizo el célebre HAL 9000 en 2001: una odisea del espacio.

Por otra parte, tampoco entiendo que a veces se pongan en plan alarmistas y nos digan cosas como "ya estamos viviendo lo que Orwell denunciaba en su célebre 1984", o "ya está aquí el mundo feliz de Huxley". Y no lo entiendo porque el paralelismo que pueda surgir de alguna situación concreta no es, ni de lejos, lo que realmente se describía en esas novelas. Y tampoco lo entiendo porque si ellos son los expertos y quienes están trabajando en la creación de semejantes programas, aplicaciones, máquinas o lo que sean, ¿por qué siguen haciéndolo en lugar de rebelarse y denunciarlo? Habrá que parafrasear a sor Juana Inés de la Cruz y preguntarles ¿por qué acusáis "al sistema", si sois sus creadores?

Todo esto me confunde sobremanera. ¿Debo esperar, en este estado de perplejidad en que me hallo, a que la inteligencia artificial pueda llegar un día a ser verdaderamente inteligente y decida suprimir del planeta a la única especie que es capaz de planificar su propia autodestrucción? Razón, tal vez, no le iba a faltar. ¿O debo esperar que llegue a realizar juicios morales, demostrar empatía, considerar las cuestiones éticas, valorar lo diferente, el diálogo, la comprensión, tener en cuenta los aspectos no pragmáticos de una cuestión?

¡Socorro, que alguien me ayude!

                                                                 ***

El día que redacté esta breve reflexión no estaba aún subida la charla. Ya sí, Aquí la tenéis.

sábado, 7 de noviembre de 2009

SOR JUANA INÉS DE LA CRUZ

Ya está colocada, en el apartado correspondiente a las tertulias, la colección de poemas de la poeta mexicana Sor Juana Inés de la Cruz.

Junto con la selección de poemas, he introducido el pequeño estudio de homenaje que realizó Octavio Paz, y que apareció publicado en la revista Sur, en diciembre de 1951.

Feliz lectura.

Os espero el día 30, a las 17:30, en la biblioteca.

viernes, 8 de marzo de 2024

CAROLINA CORONADO ("Libertad")

En librerías

Para empezar, un documental de Canal Extremadura, escrito y dirigido por Manuel G. Cano:


Para continuar, una aclaración, una sorpresa y un poema:

Carolina Coronado es un personaje sorprendente por su trayectoria vital, por el contenido y significado de su obra (que puede variar de lo más liberal a lo más tradicional) y hasta por sus patologías. Sea como fuere, y como ocurre con todas las obras, el tiempo y las inclinaciones de cada época van decantando qué parte de ellas permanecen y cuáles serán materia de olvido.

También me resulta sorprendente lo poco reproducido que encuentro este poema, comparable como mínimo en importancia por su denuncia a las famosas redondillas que comienzan con "Hombres necios que acusáis" de sor Juana Inés de la Cruz. Y sorprendente me parece la explicación del origen por parte de la catedrática Anna Caballé cuando afirma (minuto 10') que está escrito al hilo de la ley electoral que acaba de aprobarse (poema y ley son de 1846). 

Muy resumidamente: durante el reinado de Isabel II se producen alternancias entre gobiernos moderados y progresistas. El período 1844-54 es de gobiernos moderados y se aprueba la Constitución de 1845 y la ley electoral del 46. Durante todo el siglo XIX el sufragio era censitario, es decir, restringido a propietarios y de un cierto nivel de rentas, lo que quiere decir que no votaban todos los hombres, ni mucho menos (el voto femenino en España es de 1931, puesto en práctica en 1933). Y aquí está la cuestión: Con la ley electoral de 1837 el cuerpo de votantes era de 635.000; con la ley del 46 se redujo a 99.000 (Historia de España, VVAA, Historia 16, p 793) para una población de más de 15.000.000 de habitantes; es decir, quienes podían votar no llegaba ni al 1%. Es imposible que ninguna persona pudiera hablar de lo contentos que estaban mozos y viejos, porque ni mozos ni viejos iban a poder votar, a no ser que fueran más o menos ricos o pertenecieran a la aristocracia. 

El poema tiene un significado e intención mucho mayores que el de ser respuesta puntual a una ley electoral, menos aún a una ley que restringía de manera ostensible la población con derecho a voto con respecto a la anterior. Se trata de una denuncia general sobre un sistema que ponía todo tipo de trabas a la participación de las mujeres en cualquier espacio colectivo fuera del ámbito familiar y que impedía directamente la participación de la mujer en la política. La primera que se produce en la literatura española de este signo

Es cierto que el poema comienza con el regocijo general de la población masculina, pero esa alegría no encuentra ningún fundamento en el año en concreto en que está escrito y en territorio español. Únicamente podemos entenderlo como una manera de expresar rechazo y denuncia ante ciertos avances políticos y sociales que se venían produciendo a lo largo del siglo por toda Europa, pero que no acogían nunca a la población femenina, lo que sirve de elemento de contraste para aumentar el efecto final; esto es, una hipérbole como recurso estilístico. Carolina es consciente de esos avances políticos, pero recuerda que los logros —pocos, muy pocos mirados desde nuestra época— solamente afectaban a una parte más bien escasa de la mitad de la población. 



LIBERTAD

Risueños están los mozos,
gozosos están los viejos
porque dicen, compañeras,
que hay libertad para el pueblo.

Todo es la turba cantares,
los campanarios estruendo,
los balcones luminarias,
y las plazuelas festejos.

Gran novedad en las leyes,
que, os juro que no comprendo,
ocurre cuando a los hombres
en tal regocijo vemos.

Muchos bienes se preparan,
dicen los doctos al reino,
si en ello los hombres ganan
yo, por los hombres, me alegro;

Mas, por nosotras, las hembras,
ni lo aplaudo, ni lo siento,
pues aunque leyes se muden
para nosotras no hay fueros.

¡Libertad! ¿qué nos importa?
¿qué ganamos, qué tendremos?
¿un encierro por tribuna
y una aguja por derecho?

¡Libertad! ¿de qué nos vale
si son los tiranos nuestros
no el yugo de los monarcas,
el yugo de nuestro sexo?

¡Libertad! ¿pues no es sarcasmo
el que nos hacen sangriento
con repetir ese grito
delante de nuestros hierros?

¡Libertad! ¡ay! para el llanto
tuvímosla en todos tiempos;
con los déspotas lloramos,
con tributos lloraremos;

Que, humanos y generosos
estos hombres, como aquellos,
a sancionar nuestras penas
en todo siglo están prestos.

Los mozos están ufanos,
gozosos están los viejos,
igualdad hay en la patria,
libertad hay en el reino.

Pero, os digo, compañeras,
que la ley es sola de ellos,
que las hembras no se cuentan
ni hay Nación para este sexo.

Por eso aunque los escucho
ni me aplaudo ni lo siento;
si pierden ¡Dios se lo pague!
y si ganan ¡buen provecho!


Si a mí se me diera la posibilidad de salvar del paso del tiempo tan solo cinco poemas de la autora, el que aquí he copiado, formado por una sucesión de trece coplas, sería uno de ellos.

Para disfrutar, su poesía toda recogida en Internet Archive.

Para ver, el album de recuerdos del Museo del Romanticismo sobre Carolina coronado y el catálogo de la exposición que la Biblioteca Nacional dedicó a la
poeta extremeña en 2011.


Y para finalizar, Loretta García Montuenga realiza una lectura de los poemas que hoy más no pueden interesar, acompañada de una breve contextualización:



***


domingo, 13 de octubre de 2019

IV EDICIÓN DEL DÍA DE LAS ESCRITORAS:


El texto de presentación de la Biblioteca Nacional dice así:

El Día de las Escritoras es una conmemoración promovida por la Biblioteca Nacional de España junto a la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias (FEDEPE) y la Asociación Clásicas y Modernas que, desde el año 2016, busca reivindicar la labor y el legado de las escritoras a lo largo de la historia a partir de la lectura de fragmentos representativos de sus obras.

Cada año, esta celebración se lleva a cabo el lunes más cercano a la festividad de Teresa de Jesús, el 15 de octubre, en el Salón de la Actos de la Biblioteca Nacional de España y en otras entidades e instituciones nacionales e internacionales que se suman a la iniciativa.

Para cada edición se designa una comisaria, que elige el tema en torno al cual realiza una selección de textos de destacadas escritoras españolas e hispanoamericanas, que posteriormente son leídos por personas de reconocido prestigio social y cultural, entre las que hay una especial representación de creadoras en activo.

A la celebración de este día se suman otras muchas bibliotecas e instituciones culturales. En este enlace podéis encontrar alguna próxima a vuestra ciudad o, tal vez, en la misma localidad en la que residís.

domingo, 30 de abril de 2017

COMO EL QUE DICE SIEMPRE, antología de ensayos de García Marruz

Fina García Marruz es relativamente bien conocida en el lado occidental del Atlántico como poeta y, seguramente, algo tuvo que ver en ello la concesión en 2011 del premio Reina Sofia de Poesía Iberoamericana. En la orilla oriental, en cambio, no necesita presentaciones porque está considerada como lo que es, una figura destacada de la poesía cubana contemporánea y una ensayista de envergadura. Claro que para saber de su trabajo necesitamos tener acceso a sus libros y, por desgracia, estos no se encuentran con facilidad a este lado del océano.


Hace poco tiempo cayó en mis manos este Como el que dice siempre, recopilación de algunos ensayos de la cubana a cargo de Adolfo Castañón, que he estado leyendo con gran placer y mayor provecho. En él podemos encontrar análisis brillantes y amenos sobre Quevedo, Cervantes, Martí, Sor Juana Inés de la Cruz, Lezama Lima, Bécquer, Silvina Ocampo... En fin, un baúl lleno de tesoros que disfrutará cualquier aficionado a la reflexión literaria.

Sobre la agudeza de la mirada de García Marruz sirva como ejemplo, aunque cualquier otro hubiera valido, el primer párrafo del trabajo que lleva por título Góngora y Quevedo (pp 69-99):

¿Qué podían tener en común el genial cordobés, para el que el tema era apenas un pretexto para la creación verbal insólita y este apasionado, al que le palabra le salta, espumeante y colérica, ofendida de la verdad que a diario ven sus ojos, deslustrada por la máscara que la suplanta? ¿Qué de semejante entre los grandes vitrales de Góngora, en que el asunto es sólo materia de la luz que lo traspasa y el color que lo decora, y este censor de su siglo que lo pintó, también genialmente, con todas sus sombras y como al resplandor rojizo de una invisible hoguera? Es verdad que Quevedo "ahondó tanto" en su propia sangre, y tanto supo de sus tonos fundamentales, que los despliega en toda su irisada gama de carmines tierra y carmesíes relámpagos, pero no a la manera del iris en arco sucesivo, sino irrumpiendo en los adentros ya, con su tono volcán. No, no podía gustar de su ceño fruncido a lo mordaz de su palabra el poeta de "Goza, goza el color, la luz, el oro".

Para disfrutar aprendiendo.

martes, 13 de octubre de 2020

DÍA DE LAS ESCRITORAS 2020

 

Vuelve a convocarse un año más —y van cinco— el Día de las Escritoras, día que la BNE puso en marcha en 2016 apoyada por la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias y por la Asociación Clásicas y Modernas. La convocatoria parece que va cuajando y ya son muchas otras bibliotecas e instituciones quienes realizan alguna actividad. Preguntad, pues, allá donde viváis, que seguramente podréis encontrar alguna lectura, recital, teatro o cualquier otra actividad cultural en torno a la obra de las escritoras.

El vídeo de la BNE recoge la celebración del año pasado. Si queréis ahorraros las presentaciones y explicaciones varias, id directamente al minuto 27:50, que es donde Ana Belén comienza la lectura del texto de Teresa de Ávila, autora que da origen al día, pues se celebra siempre el jueves más cercano al 15 de octubre, fecha que se admite como la de su defunción, y que la Iglesia Católica celebra como onomástica de la primera doctora de la misma.

Este año se leerán fragmentos de obras de: Teresa de Jesús, Rosalía de Castro, Dulce María Loynaz, Blanca Varela, Errose Bustintza (Mañariko), Elena Fortún, Sor Juana Inés de la Cruz, Ana María Matute, Josefina Carabias, Pura Vázquez, Luisa Carnés, Gloria Fuertes, Mercè Rodoreda, Idea Vilariño, Circe Maia, Emilia Pardo Bazán, Victorina Durán, Ida Vitale, Carmen Baroja y Nessi y Concha Méndez.

lunes, 10 de noviembre de 2014

NUESTRA POESÍA EN EL TIEMPO (Una antología)

Es de sobra conocido el cuidado con que Siruela edita sus libros. Papel, tipografía, interlineado, tapas, presentación... todos los elementos contribuyen para convertir la lectura en un acto agradable y sugerente. 

Esta antología preparada por Antonio Colinas, como él mismo advierte en el prólogo y la colección en que se inscribe nos lo recuerda —Las tres edades—, es una antología dirigida a primeros lectores en este género. Lo que quiere decir que se ha primado la claridad y la sencillez en el momento de elegir textos.

Tiene también otra particularidad que a mí me agrada mucho y es la presencia continua de poetas latinoamericanos desde la mexicana Sor Juana Inés de la Cruz (1651-1695) hasta el venezolano Eugenio Montejo (1938-2008), con quien se cierra la antología.

No comparto la forma en que Colinas entiende la poesía y que en el prólogo expresa, pero, como él mismo nos recuerda, cada poeta tiene su propia poética y, seguramente, añado yo, cada época también tiene la suya. En cualquier caso, de este tema mejor me ocupo otro día.

Ahora os dejo el penúltimo poema antologado. Es del salvadoreño Roque Dalton (1935-1975).

EL DESCANSO DEL GUERRERO

L
 os muertos están cada día más indóciles.
 Antes era fácil con ellos:
 les dábamos un cuello duro una flor
 loábamos sus nombres en una larga lista:
que los recintos de la patria
que las sombras notables
que el mármol monstruoso.

El cadáver firmaba en pos de la memoria:
iba de nuevo a filas
y marchaba al compás de nuestra vieja música.

Pero qué va
los muertos
son otros desde entonces.
Hoy se ponen irónicos
preguntan.

Me parece que caen en la cuenta
de ser cada vez más la mayoría.

domingo, 8 de noviembre de 2009

RENÉ DESCARTES

Ignoro por qué extraña asociación de ideas, mientras tenía entre manos la obra de Sor Juana Inés de la Cruz, me venía continuamente a la memoria la obra del filósofo y matemático R. Descartes (1596-1650). Hagásmole aquí, pues, un pequeño recordatorio, a ver si así puedo quitármelo de encima.

Dicen los expertos que el invento tanto de la geometría analítica como de las coordenadas, está íntimamente unido a sus intuiciones filosóficas sobre el conocimiento y la representación del espacio. Dicen, también, que su gran logro como pensador fue haber inaugurado el racionalismo y la filosofía moderna.

Así será, sin duda. Pero a mí lo que me gusta de verdad de este pensador tranquilo es la capacidad para explicar con sencillez cómo debemos utilizar el raciocinio para conseguir ideas claras, para hallar la verdad de las cosas. Ideas claras y distintas, que diría él en sus Meditaciones.
Y también me gusta ese continuo ejercicio de sentido común que rezuma su obra, al menos la que yo he leído, y que se reduce al Discurso del método y a la citada en el párrafo anterior. Es esa actitud equilibrada, sabia, racionalista y sensata, en las antípodas del fundamentalismo, la que le lleva a abandonar la publicación de su primera obra El mundo, cuando se entera de que Galileo había sido condenado en 1633.
Gracias a personas como él, esta sociedad es un poco menos caótica, un poquito más racional y menos mezquina.