a las 19.30,
Intervendrán:
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"El espacio puede tener un horizonte y el tiempo un final, pero la aventura del aprendizaje es interminable". Timothy Ferris. La aventura del Universo.
a las 19.30,
Intervendrán:
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Sin embargo, para un aficionado a perderse por los caminos del monte y transitar por senderos en busca de elementos más naturales la primavera verata era toda una fiesta de color. Retamas (la genista de Serrat), espliegos, jaras, amapolas y toda clase de flores silvestres ofrecían un lujurioso festín para la vista y el olfato.
El número de pétalos tiene su importancia para entender el poema. |
Upon this Primrose hill,
Where, if heaven would distil
A shower of rain, each several drop might go
To his own primrose, and grow manna so;
And where their form, and their infinity
Make a terrestrial galaxy,
As the small stars do in the sky;
I walk to find a true love; and I see
That ’tis not a mere woman, that is she,
But must or more or less than woman be.
Yet know I not, which flower
I wish; a six, or four;
For should my true-love less than woman be,
She were scarce anything; and then, should she
Be more than woman, she would get above
All thought of sex, and think to move
My heart to study her, and not to love.
Both these were monsters; since there must reside
Falsehood in woman, I could more abide,
She were by art, than nature falsified.
Live, primrose, then, and thrive
With thy true number five;
And, woman, whom this flower doth represent,
With this mysterious number be content;
Ten is the farthest number; if half ten
Belongs unto each woman, then
Each woman may take half us men;
Or, if this will not serve their turn, since all
Numbers are odd, or even, and they fall
First into five, women may take us all.
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Tal vez la mejor comedia de uno de los mejores dramaturgos franceses de todos los tiempos, Molière. También la que más quebraderos de cabeza le proporcionó, pues su representación provocó un gran escándalo y fue inmediatamente prohibida.
Las obras de Molière se suelen clasificar en comedias de intriga, de costumbres y de carácter. A estas últimas pertenecen Don Juan, El Misántropo, El Avaro y Tartufo, que es una magnífica representación de la hipocresía y en ella desenmascara la falsa devoción. Una obra deliciosa y divertidísima que no gustó nada a los "devotos" de la época e hicieron todo lo posible para que se prohibiera.
Pues bien, el 23 de abril, sábado, a las 19:30, tendremos la ocasión de ver la obra en vivo y en directo en el Teatro Victoria Eugenia de Donosti (todavía hay entradas). Pero si no podéis aguantar las ganas de disfrutar, podéis leerla en una traducción libre de la Biblioteca Virtual Universal, o incluso verla en alguna de estas dos versiones y luego comparar con la más moderna de Pepe Viyuela.
Ejemplar del KM |
A lo largo de las cinco secciones de que consta vamos realizando un viaje de descubrimiento por las distintas edades, por diferentes voces y por ambientes poéticos que van de lo sagrado a lo más próximo y cotidiano, mientras se van mezclando textos en verso y en prosa, siempre poesía de la mejor calidad.
Como Juan Ramón Jiménez, como cualquier poeta que se precie, Kizer busca insistentemente el nombre exacto de la cosas, y aunque dé la impresión de que nunca lo conseguimos, de que estemos operando en falso, como nos lo recuerda el poema que da título a la colección,
la poeta sigue insistiendo en su trabajo:
Y ahora qué ofrecerte, palabra,
qué desear de ti.
Acaso,
aún nos sea dado recordar
las bellas utopías,
algún conjuro
laboriosamente soñado,
a prueba de fuego
impuesto a la realidad.
Ya ves, la rosa ha florecido en el poema
y se ha sabido sombra de otra rosa.
La historia también ha florecido
La historia: aquí hablamos de lo sin flor.
Aquí, entre dientes, mascullamos
el mundo que no es.
Con la cabeza gacha, el rabo entre las piernas,
cada día lucho por reconocerte,
cada mañana, al menos, lo pregunto:
¿realidad, realidad?, ¿palabra, palabra?
Los indigentes llegan al semáforo humanamente:
el hombre sin piernas y rostro de hombre
se echa al piso, se arrastra entre los carros,
golpea las puertas por debajo;
la mujer con su cartera al hombro
se arremanga los pantalones y
se lleva las manos a la boca
en un gesto que alguna vez fue señal de hambre.
Recostado en la pared,
aquel hombre también se lleva las manos a la boca.
Me mira y ríe a carcajadas.
Ha visto en mis ojos el espanto
y le da risa.
Agachada en la basura,
la mujer orina o defeca mientras
come y rebusca desperdicios
a la vista de todos los transeúntes.
¿Quién puede mirar,
quién puede voltear al otro lado?
Esta es tu estrofa, palabra,
¿qué harás con ella?
Chisporrotean, rotos, bajo la lluvia, los anuncios de neón.
Esta es la ciudad que ven los ojos.
Los huecos en el cemento,
camuflados a veces por la lluvia.
Los huecos dentro de los ojos.
***
En el recorrido por La Vera, nos acercamos la tarde del miércoles a Jarandilla. Antes de hacer nada, fuimos a información para pedir un mapa, situarnos e iniciar la visita. La persona que atendía, después de preguntarnos —ya sabéis, para estadística— de dónde veníamos y decirle que de San Sebastián, nos obsequió con un arratsalde on (buenas tardes) y un ongi etorri (bienvenidos) que nos dejó deslumbrados. Luego nos dijo que no sabía más que tres palabras (bat, bi, hiru) y que eso era todo. Pero hay más.
Inmediatamente colocó el mapa que estáis viendo sobre el mostrador y sin parar de darnos información oralmente, iba realizando las anotaciones oportunas por si se nos olvidaba más adelante el qué, el cómo, el dónde o a qué hora era eso de lo que nos hablaba. El mapa estaba colocado tal y como aparece aquí, es decir, hacia nosotros; él estaba al otro lado del mostrador, frente a nosotros, y en ningún momento tuvo que voltearlo para realizar ninguna anotación. ¡Era capaz de escribir al revés! Y lo hacía mientras hablaba.
Me di cuenta cuando colocó la fecha (arriba, izquierda) 3-II-1557, día en que terminaron las obras del palacio de Yuste, junto al monasterio del mismo nombre, en lo que sería la residencia de retiro del emperador Carlos V. Al verlo, exclamé ¡pero si está escribiendo al revés! Él, muy tranquilo, no, al derecho. Sí, efectivamente, al derecho para quien lee, pero él estaba escribiendo (y dibujando) desde su posición frontal a la nuestra.
Por si no sois conscientes de la dificultad que tiene, probadlo en casa. No es nada sencillo. Y realizarlo a gran velocidad mientras se está explicando me parece una habilidad al alcance de muy poca gente. Menos aún, cuando no se enuncia lo que se escribe y, además, se escribe en otro idioma distinto del que se habla. Porque Manuel, responsable de la oficina de información de Jarandilla, sabe algo más de tres palabras en euskera. Conoce bastantes más que las mencionadas arriba (osteguna, jueves; larunbata, sábado; ezk., abreviatura de izquierda).
Cuando terminó de explicarnos los encantos y particularidades de su localidad, yo, todavía perplejo, le pregunto cómo se llama. Me dice, Imanol, que es la forma vasca del castellano Manuel. Le damos las gracias, eskerrik asko, Imanol. Él, con una sonrisa: ez horregatik (de nada).
Era obligado darle las gracias públicamente y demostrar mi admiración.
***
Me gusta mucho la guitarra y me gusta mucho cómo la toca esta extraordinaria guitarrista croata, Ana Vidović. Y tenía reservado desde hace meses este concierto organizado por Omni Foundation, pero por unas razones o por otras lo he ido posponiendo. Hoy me toca promocionarlo.
Este es el estupendo programa que interpreta:
Si acabáis de ir o de venir y no tenéis una peli que echaros al coleto porque no encontráis nada que os guste en las salas o por lo que sea, aquí tenéis El enigma de Agustina, una peli que solamente encontraréis aquí, o sea, en internet, más concretamente en Vimeo, yo solo reproduzco y ayudo a divulgar. Por cierto, en FilmAffinity tiene un 7,5 por parte de los usuarios, aunque sospecho que quienes han votado son los del equipo 😅