Mostrando las entradas para la consulta Ofiuco ordenadas por relevancia. Ordenar por fecha Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas para la consulta Ofiuco ordenadas por relevancia. Ordenar por fecha Mostrar todas las entradas

domingo, 22 de noviembre de 2009

Signos del zodiaco: ESCORPIO



Termino con Escorpio la serie dedicada a las constelaciones zodiacales. El Sol ha hecho ya el recorrido entero por las trece constelaciones, desde que dediqué la primera entrada a Ofiuco.
Hoy ha entrado el Sol en esta constelación y estará en ella hasta el 29 de noviembre, es decir, sólo ocho días. Esto quiere decir que ningún escorpio lo es en la actualidad, salvo los nacidos hoy precisamente. Como sabéis los que continuáis el relato mitológico de los signos, este cambio de fechas se debe al movimiento de precesión de la Tierra.

Escorpio es el escorpión que mató con su picadura al gigante Orión. Hay varias versiones del hecho, según leamos a Ovidio, Eratóstenes o Higino; pero poco importan los detalles del desenlace, lo que importa es que fueron colocados en sitios opuestos en el cielo, de tal forma que la rivalidad entre ambos sigue siendo hoy patente. Así, cuando vemos Orión, no vemos Escorpio, y viveversa.

sábado, 24 de enero de 2015

LO QUE EL CIELO NOS CUENTA

Sie sprechen eine Sprache,
Die ist so reich, so schön;
Doch keiner der Philologen
Kann diese Sprache verstehn
H. Heine. Buch der Lieder, 1827.

Dámaso Alonso —cito de memoria— tradujo así los versos del poeta alemán:¡Hablan un lenguaje tan rico y tan hermoso!, pero ningún filólogo puede entenderlo. Heine hablaba del lenguaje de las estrellas, de lo que el cielo nos transmite, de lo que la noche, en su profunda oscuridad y belleza, nos transmite. Pero ¿qué es lo que la cúpula celeste nos dice?, ¿a qué se refería Heine cuando escribe que ningún filólogo es capaz de entenderlo?, ¿cuál es el mensaje de las estrellas? Para contestar estas preguntas es necesario tener en cuenta algunas lenguas diferentes a la que hablamos; lenguas que, cuando ejercemos de filólogos, no somos capaces de entender, seguramente, porque las gramáticas al uso nos lo impiden.

En un principio, las sociedades antiguas unieron en una misma esfera el cielo y la religión, es decir, las creencias. El cielo era lo desconocido, lo incomprensible, lo inabarcable. Era, por tanto, la residencia de los dioses, el espacio inescrutable donde habitaban los dioses. Del cielo nos venían tanto los premios como los castigos, lo que debíamos aprender y lo que teníamos que olvidar. Los seres que dominaban el cielo determinaban nuestro destino. Y de ahí surgen las más antiguas narraciones, y es ahí donde se hallan escritas. Asimismo, podemos encontrar en el cielo la primera interpretación de las relaciones que se forjaron entre nosotros, humildes habitantes de la tierra, y los orgullos seres celestiales. Para descubrir ese mundo casi perdido, sólo necesitamos conocer los nombres de las estrellas y de las constelaciones, y un buen libro de mitología. Esa es la primera y más antigua de las lenguas que podemos hallar en los puntos luminosos de la noche. Ésta es una lengua de símbolos y de correspondencias. La más hablada y la más representada durante la historia de la humanidad. Hoy casi perdida.

Nut, diosa del cielo y creadora del universo

Junto con la religión, es decir, junto a los relatos mitológicos, las estrellas nos muestran otra lengua bien distinta. Es una lengua que nos habla del lugar que ocupamos, es un idioma de localización y de saber dónde nos encontramos, y de cuál es el camino que debemos seguir para llegar a nuestro destino. Es éste un idioma que todavía hoy conoce muy bien la gente de la mar y los habitantes del desierto. A partir de la Polar, en el hemisferio norte, o de la Cruz del Sur, en el hemisferio opuesto, ya estamos localizados en el espacio, y si, además, tenemos un conocimiento relativamente bueno de lo que se puede ver en un cielo nocturno, no sólo podremos saber en qué dirección se encuentran los puntos cardinales, sino también movernos con precisión de grados, e incluso minutos. Y todo eso nos lo hacen saber las estrellas, sin necesidad de otros instrumentos. Claro que si el cielo guarda silencio, es necesario recurrir a otros interlocutores. Ésta otra lengua también está en franca decadencia. Los interlocutores modernos —satélites y GPS— la han arrinconado.

La tercera lengua que podemos escuchar mirando las estrellas nació al mismo tiempo que lo hicieron las dos anteriores. Las sociedades antiguas no discernían entre Astronomía y Astrología. No podían hacerlo, pues carecían de conocimientos e instrumentos suficientes para desarrollar esa tarea y, además, ya lo sabemos, el cielo era la casa de los dioses, y a éstos no se les podía discutir nada, sólo interpretar. Lo que el cielo nos decía o creíamos que nos decía, fuese esto lo que fuese, era suficiente para tomarlo en cuenta, puesto que se trataba del deseo de los dioses. La utilización de esta lengua con cierto grado de codificación podemos situarla en Mesopotamia, hace aproximadamente 4000 años, pero toda sociedad antigua tenía su propio código. Estoy hablando, claro está, del Zodiaco, de la “casa de los animales”, esto es, del horóscopo. Y creencias aparte, la verdad es que, todavía hoy, una infinidad de revistas y periódicos recogen todos los días lo que este oráculo pronostica. 

Aclaración necesaria: el zodiaco no es otra cosa que una franja estrecha del cielo visto desde nuestro planeta. Es una banda de la esfera celeste comprendida entre 8º por encima de la eclíptica de la Tierra y 8º grados por debajo de la misma. En ese espacio es donde vemos moverse el Sol, los planetas y las doce constelaciones antes mencionadas. El problema es que ese espacio, con sus doce casillas, fue fijado por Hiparco hace más de 2.000 años y la precesión del eje de la Tierra ha hecho que hoy las fechas no se corresponden con la realidad. Un ejemplo: según el zodiaco el Sol está en Tauro entre el 21 de abril y el 21 de mayo. En la actualidad, el Sol pasa por Tauro entre el 13 de mayo y el 20 de junio. Esta precesión es la que explica, asimismo, la existencia de una tercera casilla: Ofiuco.

Villa Farnese. Bóveda de la Sala Mapamundi. Giovanni Antonio da Varese

Predicciones aparte, hay otra lengua más concreta y más pegada a la tierra en la que el cielo se manifiesta y es tan antigua como las anteriores. En esta lengua intentan decirnos lo que debemos hacer y cuándo debemos llevarlo a cabo. Difícilmente la entendemos los habitantes de las ciudades, pero la gente del campo todavía hoy la recuerda en buena medida. Mejor la interpretaban las antiguas civilizaciones, porque tenían que valerse de ella para saber cuál era el momento adecuado de la recogida o de la siembra, por ejemplo. De esta manera, en el antiguo Egipto, sabían perfectamente que cuando la brillantísima estrella Sirio asomaba por el horizonte poco antes del amanecer, había llegado el momento de preparar la tierra, pues sabían que poco después llegaría la fértil crecida del Nilo. De esta misma manera, en la Edad Media, por citar otro ejemplo, sabían que cuando el Sol empezaba a meterse en Escorpio, tenían que labrar los campos, porque ese era el momento más adecuado. Hoy podemos disfrutar de esos libros magistralmente iluminados, en los que se ven cada una de las faenas acompañadas de la época del año, expresada mediante los objetos celestes.

En otras ocasiones, el cielo, en lugar de hablarnos, produce música. Pero éste es un sonido ya perdido. El gran místico y matemático Pitágoras estaba convencido de que la Tierra se hallaba en el centro del cosmos. Girando sobre ella se encontraba la Luna, el Sol, los cinco planetas visibles a simple vista (Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno) y las estrellas. Todos estos cuerpos giraban en esferas concéntricas, esferas que, al desplazarse, producían un sonido armónico, audible en las noches más serenas. Él y sus alumnos tenían una concepción ideal del universo, como corresponde a una teoría basada en la relación matemático-musical, más que en la observación directa. De esta forma, suponían que cada esfera, sobre la que se deslizaban los cuerpos celestes, estaba situada en una relación numérica, que era la que correspondía a la relación que se da entre las notas musicales. Cuando Pitágoras descubrió la relación que había entre la longitud de una cuerda y el tono que producía al hacerla vibrar, descubrió también que esta relación es proporcional. Convencido como estaba de que el mundo debe expresar armonía y de que ésta se manifiesta a través de los números, el ilustre griego aplicó este orden a todo el universo. 

Nicolas Oresme. Livre du ciel et du monde

Esta teoría que consideraba el universo como un colosal instrumento de música se mantuvo a través del tiempo, y todavía en el siglo XVII se encontraba en vigor. Lo curioso es que hace poco tiempo, en 2006, un satélite de la Nasa ha descubierto que la atmósfera solar produce sonidos, ultrasonidos en este caso, que son, aproximadamente, unas 300 veces más bajos (graves) de lo que el oído humano puede captar, pero música de las esferas al fin y al cabo.

La quinta y última lengua es, sin duda, la más hermosa y difícil de las lenguas en la que el cielo nos habla. Es una lengua que todavía hoy no entendemos del todo, no porque la hayamos perdido u olvidado, sino porque aún no hemos sido capaces de descifrarla. Es una lengua que nace con el tiempo y el espacio, la más antigua de todas. Es la lengua primigenia. Frecuentemente decimos que somos polvo de estrellas. Es una frase muy poética. Puede parecer, incluso, un poco cursi, pero es real en todo su significado. Gracias a aquellos primeros elementos provenientes de las estrellas y que se depositaron sobre nuestro planeta hace unos 3.800 millones de años, surgió la vida. Sabemos, es cierto, algunas cosas, pero esta lengua se escribe en caracteres subatómicos y su gramática es totalmente distinta a la lengua que expresa lo grande, lo que se ve a simple vista. Posiblemente, la descodificación de todos sus signos nos ofrezca un conocimiento preciso y exacto del Universo y su comportamiento, de la materia en todas sus manifestaciones. Y no es que vayamos a ser mejores, pero si logramos interpretarla correctamente, como mínimo seremos un poco menos ignorantes.

***

Todas estas lenguas. incluida la científico-técnica, han encontrado expresión artística. Al fin y al cabo, dicha representación nació mucho antes de que lo hiciera la expresión teórica y el propio lenguaje escrito. El impulso por dejar constancia visual de preocupaciones, hallazgos y deseos nos acompaña desde las primeras pinturas prehistóricas, hace aproximadamente unos 40.000 años. Ahora bien, como el pensamiento mítico e intuitivo está mucho más extendido que el racional y ha conformado la mayor parte de la historia de la humanidad —la revolución científica no se inicia hasta el siglo XVI—, las representaciones artísticas, en una desproporción abrumadora, aluden a las lenguas simbólicas, que son, lógicamente, las más sugestivas a la hora de producir significados. Todavía en el siglo XIX Herder y Schleiermacher insistían en la naturaleza religiosa del conocimiento y el artista romántico afirmaba que sólo él podía acceder al infinito.

En la actualidad, teniendo en cuenta lo mucho que nos hemos alejado de la cosmogonía antigua y medieval, leer esas imágenes y disfrutarlas requiere de algunas claves interpretativas, pero no se trata nada más que de un pequeño esfuerzo al alcance de cualquier persona. En todo caso, ese pequeño esfuerzo nos ofrecerá el goce de saber qué querían decir nuestros antepasados y cómo entendían el mundo en el que vivían, lo que, en sí, es ya una gran recompensa.

martes, 31 de enero de 2017

EL CIELO NOCTURNO, FEBRERO 2017

HEMISFERIO NORTE

HEMISFERIO SUR


  • Planetas: Mercurio apenas es visible los primeros días del mes antes de la salida del Sol en el horizonte SE. Venus alcanza su máximo brillo anual y es visible en el horizonte OSO hasta un par de horas después de que llegue la noche cerrada. Marte es visible durante la primera parte de la noche, por encima de Venus, en el horizonte OSO. Júpiter es visble desde la medianoche en que aparece por el E en la constelación de Virgo. Saturno es visible al final de la noche en el horizonte SE. a comienzos del mes está en Ofiuco y pasa a Sagitario a finales de mes. Urano puede localizarse fácilmente con prismáticos el día 26 porque estará situado a 0,5º de Marte.
    Urano y Marte el 26 de febrero. Fuente: Stellarium.org
    Luna: llena, el día 11; nueva, el 26. La noche del 10 al 11 se producirá un eclipse penumbral de la misma, lo que significa que tendrá una pequeña disminución de luminosidad.
  • Eclipse solar anular: el día 26. Es visible en el sur de América y de África. En la mitad meridional de Sudamérica y la zona suroccidental de África podrá verse como eclipse parcial.
  • EEI: Para comprobar dónde y cuándo es visible la Estación Espacial Internacional acudid a este enlace.                            
¡Feliz observación!

martes, 1 de enero de 2019

EL CIELO NOCTURNO, ENERO 2019

Galaxia del Sombrero. Fuente: R. Kennicutt, NASA

  • PLANETAS: Mercurio solamente es visible a comienzos de enero muy pegado al horizonte SE. Venus visible de madrugada sobre el horizonte SE; el día 22 Júpiter y Venus se encontrarán a muy poca distancia. Marte es visible desde el anochecer hasta casi la medianoche en Pisicis, y poco a poco va reduciéndonse el brillo. Júpiter es visible de madrugada en Ofiuco (el día 22 máxima proximidad a Venus). Saturno comenzará a ser visibles a mediados de mes sobre el horizonte SE.
  • LUNA: luna nueva el 6 de enero; llena, el 21.
  • ECLIPSES: el 6 de enero eclipse solar visible desde el NE de Asia. Durante la madrugada del 21 eclipse lunar visibles desde España. Comienza a las 3:34 T.U. y acaba a las 06:61 T.U.
  • LLUVIA DE METEOROS: las Cuadrántidas alcanzarán su máxima actividad la noche del 3 al 4 de enero.
  • EEI: para saber dónde y cuándo mirar, consultad aquí:




martes, 30 de septiembre de 2014

EL CIELO DE OCTUBRE, 2014

(Vídeo tomado de La isla de las estrellas)

  • Planetas: Mercurio será visible sólo a finales de mes poco antes de que salga el sol, horizonte ESE. Venus sólo se verá durante los primeros días de octubre poco antes de que aparezca el sol en el horizonte E. Marte se ve entre Ofiuco y Sagitario, poco después de ponerse el sol y durante muy poco tiempo. Júpiter es visible de madrugada hacia el E, en Cáncer la primera parte del mes, en Leo la segunda. Saturno se ve al anochecer en el horizonte OSO.
  • Luna: llena el día 8, nueva el día 23.
  • Oriónidas: visibles durante todo el mes. Mayor actividad entre el 19 y el 21.
  • Estación Espacial Internacional: para consultar los pasos visibles, pinchar aquí.
  • Cometa Siding Spring: el 19, junto a Marte, antes de que se oculte dicho planeta.
¡Feliz observación!

domingo, 2 de junio de 2019

EL CIELO NOCTURNO, JUNIO 2019


  • PLANETAS: Mercurio es visible al atardecer sobre el horizonte ONO, mejor a mitad de mes (el 23, máxima elongación). Venus es visible al amanecer, muy pegado al horizonte ENE. Marte es visible durante el crepúsculo vespertino sobre el horizonte ONO (el 18, muy próximo a Mercurio). Júpiter es visible durante toda la noche en Ofiuco. Saturno es visible toda la noche a partir de la segunda semana, se encuentra en Sagitario. Urano se puede ver a simple vista, aunque con dificultad, en un cielo muy oscuro entre Aries, Piscis y Ballena, dirección E.
  • LUNA: nueva, día 3; llena, día 17.
  • SOLSTICIO DE VERANO/INVIERNO: el día 21 el Sol pasa por el solsticio de junio: comienza el verano en el el hemisferio norte y el invierno en el hemisferio sur.
  • SATÉLITES ARTIFICIALES: para saber dónde y cuándo mirar consultad en esta página.
¡Feliz observación!



domingo, 26 de noviembre de 2017

SAN PEDRO CULTURAL

Fuente de la C/San Pedro. De noche la esfera se ilumina y aparecen en
ella las constelaciones. Al fondo, el edificio de S. Pedro Cultural. 

Acabo de llegar a casa de mi visita a Palencia. El sábado por la mañana estuve en el hermoso y coqueto pueblo de Becerril de Campos. Allí se encuentra, entre otras muchas gratas sorpresas, un singular edificio dedicado a la astronomía; una antigua y semiderruida iglesia, hoy recuperada magistralmente para servir a la cultura, a la ciencia y al desarrollo del pueblo. Todavía estoy bajo los más agradables efectos del trabajo bien hecho. 

No os voy a contar lo que podéis encontrar mucho mejor explicado en la página de San Pedro Cultural —merece la pena recorrerla detenidamente—. Pero sí quiero mencionar algunas cosas. Si sois gente atenta a la astronomía, podéis realizar la visita por vuestra cuenta, pero no perdéis nada si os dejáis atender por la guía, que es encantadora, y tendréis la oportunidad de preguntarle cosas que no forman parte de la charla ni de los folletos.

Sorprendido por tanto y tan buen hacer, me entero de que la chispa que enciende la mecha es una visita del alcalde de Becerril a Roma, donde se encuentra con una meridiana —¿la de la Plaza de S. Pedro?, ¿la del Vaticano?, ¿la de Sta. María de los Ángeles?—. Espoleado por la curiosidad y uniendo el tema con la posible recuperación de la iglesia de San Pedro, se ponen en marcha las consultas y las personas adecuadas. Resultado: una magnífica recuperación arquitectónica y un estupendo lugar para la astronomía. ¡Y un 10% más barato del presupuesto inicial!

Trampantojo sobre el muro sur. Este muro se había caído totalmente. 

Tal vez os estéis preguntando qué es una meridiana. Simple: una línea meridiana es una línea norte-sur representada en el suelo de un lugar. El meridiano más famoso es el de Greenwich, línea imaginaria a partir de la cual  marcamos el este y el oeste.
Fuente: circulosolar.wordpress
El Sol sale por el este y se pone por el oeste. Según el momento del año y la hora del día, va a estar más alto o más bajo, más a la izquierda o más a la derecha de un punto determinado.

Eso hace que la sombra de un objeto sea más o menos larga. Pero si en un espacio cerrado —pongamos una iglesia— abrimos un pequeño agujerito, por él entrará un delgado rayo de sol que se irá moviendo al tiempo que se desplaza el Sol por el cielo, o para ser más exactos, a medida que gira la Tierra sobre su propio eje. De esta manera, el rayo de sol proyectado en el interior, alcanzará la línea que hemos marcado en el suelo durante el mediodía solar, es decir, durante el momento más elevado del Sol en el cielo. Pero en invierno, como el Sol está muy bajo, el reflejo aparecerá más alto, o más pegado al muro norte del edificio. En verano, en cambio, lo veremos mucho más abajo, o más pegado al muro sur. 






Y, además, el extraordinario péndulo de Foucault, que prueba de forma sencilla y elegante el giro de la Tierra sobre sí misma, el trozo de meteorito que les regalaron procedente del que cayó el 4 de enero de 2004 en la zona de la Peña, los relojes de sol, los eventos que realizan de forma continua, la bóveda pintada con las constelaciones...
Una pista: la Osa Mayor está abajo y a la derecha.
Solamente me quedé con una pena: que no apareciera colocado el símbolo de la constelación zodiacal Ofiuco donde corresponde. ¿Cesión a la ignorancia mayoritaria? Me consta que además lo tienen preparado, pero en el último momento no se decidieron a colocarlo. Me alegraría verlo colocado en una próxima visita. Al fin y al cabo, el desconocimiento solamente se vencen a base de explicaciones y buenos comentarios. Y eso es algo que saben hacer muy bien.

martes, 1 de marzo de 2016

EL CIELO NOCTURNO, MARZO 2016


Marte, Saturno, la Luna y Antares, el 30 de marzo,
mirando al sur, a las 06:30.

  • Planetas: Mercurio no es visible, está demasiado cerca del Sol. Venus es visible al alba, cada vez más cerca del horizonte. Marte es visible durante la segunda mitad de la noche; en Libra la primera quincena, en Escorpio la segunda. Júpiter visible durante toda la noche en Leo, el 8 alcanza su mayor brillo pues se sitúa a tan solo ¡664 millones de km! de la Tierra. Saturno se ve durante el último tercio de la noche los primeros días del mes; a finales de mes aparece a medianoche situado en Ofiuco.
  • Luna: día 9, luna nueva; día 23, luna llena.
  • Lluvia de meteoros: a finales de mes, en torno al equinoccio, se produce un aumento de bólidos, superior al que suele ser habitual en otras épocas del año. Su brillo está por encima del de Venus.
  • Comienzo de la primavera: día 20, a las 04:30, hora peninsular.
  • EEI: para consultar los pasos visibles haced clic aquí.

martes, 30 de enero de 2018

EL CIELO NOCTURNO, FEBRERO 2018

Fuente: NASA
Los poetas dicen que la ciencia hurta la belleza de las estrellas. Yo no soy poeta, pero puedo ver las estrellas en una noche en el desierto y emocionarme igualmente. No hace ningún daño al misterio saber un poco más de él.
FEYNMAN. Conferencias sobre Física  

PLANETAS: Mercurio solamente podremos verlo a finales del mes, sobre el horizonte O y con dificultad. Venus se irá viendo cada vez un poco mejor a medida que transcurren los días en el horizonte OSO, y vaya levantando poco a poco. Marte es visible unas tres horas antes de la salida del sol y va pasando de Escorpio a Ofiuco. Júpiter es visible de madrugada en Libra. Saturno es visible al final de la noche en Sagitario. Urano visible con unos pequeños prismáticos; el 20 de febrero estará a la derecha de la Luna (6,2º).

LUNA: (Llena, el 31 de enero); nueva, el 15 de febrero.

ESTACIÓN ESPACIAL INTERNACIONAL: Para saber dónde y cuándo mirar, consulta en este enlace los pasos visibles. tienes que introducir el país y la ciudad más próxima a tu punto de observación.

Estos vídeos de La costa de las estrellas os ayudarán a saber lo que se ve en el cielo nocturno.




¡Feliz observación!

viernes, 15 de mayo de 2020

INVITACIÓN A LA NOCHE (TODOS LOS AUDIOS E ILUSTRACIONES)


Ya he terminado de grabar todos los poemas. Como no he podido realizar la grabación en un solo audio, y para que no andéis buscando por un sitio u otro, dejo aquí agrupadas las cinco secciones y el índice de lo que váis a encontrar cuando os pongáis a escuchar el contenido. 

Primera parte:

Dedicatoria, epígrafe de T. Tasso, "Cúpula primigenia" y primera sección, Donde la mirada aprende que comprende los poemas Osa Mayor, Osa Menor y Dragón. 



Segunda parte: 

Sección Invierno —Orión, Can Mayor, Can Menor, Géminis, Tauro y Auriga— y Primer escolio.


Tercera parte:

Sección Primavera —Boyero, Corona, Hércules, Cabellera de Berenice y Leo— y Segundo escolio.

 

Cuarta parte: 

Sección Verano —Águila, Ofiuco, Cisne, Lira y Escorpión— y Tercer escolio.

 

Quinta parte:

Sección Otoño —Andrómeda, Pegaso, Perseo, Cefeo y Casiopea— más Cuarto escolioEpílogo y ¿Dónde la realidad?


Y para que esté completo el contenido, los dibujos que acompañan a alguno de los poemas, realizados por Irene Rodríguez cuando tenía 14 años (la ilustración de la portada también es suya):

Página 14.

Página 22.

Página 34.

Página 44.

Página 50.

domingo, 31 de marzo de 2019

EL CIELO NOCTURNO, ABRIL 2019

Cadena de MarkarianSergio Kaminsky. Fuente: NASA.
  • PLANETAS: Mercurio es visible, con dificultad, durante la primera quincena en el horizonte ESE, poco antes de la salida del Sol. Venus es visible al alba sobre el horizonte ESE. Marte es visible durante la primera parte de la noche en Tauro. Júpiter sale sobre las 02:30 (hora peninsular) y se encuentra en Ofiuco. Saturno sale unas dos horas después de Júpiter.
  • LUNA: nueva el día 4; llena el 19.
  • LLUVIA DE METEOROS: la máxima actividad de las Líridas se espera para la noche del 22 al 23.
  • EEI: para saber dónde y cuándo mirar, consultad aquí.
Y no dejéis de ver los vídeos de La costa de las estrellas.