Páginas

lunes, 19 de diciembre de 2022

GRAN HISTORIA VISUAL DE LA FILOSOFÍA

Ejemplar de la biblioteca de Egia.
Si a la capacidad explicativa sumamos la capacidad sintética y la imaginativa, nos encontramos con resultados tan divertidos, atractivos y didácticos como esta Gran historia visual de la filosofía que el profesor Masako Tanaka se ha sacado de la manga en un juego de prestidigitación intelectual verdaderamente brillante. 

Es cierto que existen otros manuales muy claros y sintéticos, que el Atlas de filosofía utilizaba muchos gráficos y dibujos para representar ideas, que Filosofía en viñetas como herramienta para introducir el tema fue todo un acierto, e incluso el muy anterior y más amplio programa de Filosofía para niños creado por Matthew Lipman. Es cierto, y todos ellos son necesarios, pero existe un hueco para esta Gran historia que tiene el rigor de los manuales y del Atlas, y el atractivo visual del cómic. No va dirigido a ningún sector del público en particular porque puede ser usada como elemento de consulta sobre un concepto, como repaso rápido para situarnos en una época del pensamiento, como chuleta de revisión de ideas ante un examen, como manual siempre al alcance de la mano... o para presumir mientras se viaja en algún medio de transporte atestado de libro chulo e intelectual ¿por qué no?

Ah, y como todo libro académico, dispone de un índice analítico utilísimo, de un bibliografía excelente y no descuida ningún concepto ni pensamiento contemporáneo: feminismo, género, orientalismo, imperio, bioética... está todo. Os dejo un par de páginas para que veáis cómo está organizada la información. Aquí una línea del tiempo con el personal de la época contemporánea: 


Y aquí la explicación de la famosa navaja de Ockam:


Yo creo que hasta alguien poco interesado en la filosofía puede disfrutar con un libro así. Y supongo que el alumnado de Tanaka estará encantado con su profe.

***


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Este blog es personal. Si quieres dejar algún comentario, yo te lo agradezco, pero no hago públicos los que no se atienen a las normas de respeto y cortesía que deben regir una sociedad civilizada, lo que incluye el hecho de que los firmes. De esa forma podré contestarte.