Me abrí las venas: incansablemente,
irreparablemente chorrea mi vida.
¡Poned ahí abajo cuencos y platos!
Todos los platos serán... pequeños,
y el cuenco... plano.
Por su borde... y a su lado...
en la tierra negra se alimentan los juncos.
Irremediablemente, incansablemente,
irreparablemente chorrea mi verso.
6 de enero de 1934.
Marina Tsvietáieva (poemas escogidos). Selección y traducción de Nina Turchenko, Sonia Cornellá y Antonio Alvar Ezquerra. [Disponible, de momento, solo en bibliotecas].
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