Páginas

miércoles, 15 de febrero de 2023

UN LIBRO, UN POEMA (Luis Felipe Comendador)

Libros publicados por L.F.Comendador

#unlibrounpoema


PALABRAS PARA CINTIA III


Hoy, Cintia, veo el río
del tiempo que se arruga
en meandros deformes
queriendo como huirse
del final predecible
que le espera mañana.

Yo, mi musa,
nunca pude quejarme
de la vida regalada que llevo.
No me han faltado amigos
ni mujeres dispuestas
a dejarse morir
porque yo las mirase,
incluso algún efebo
me ha tirado los tejos
—y aunque a mí no me van
las caricias de Adonis,
he de reconocer
que me sentí halagado—.
Tuve, Cintia, bebida
—la que hubiera deseado
el Baco más floral—
y el tabaco más caro
que expenden los estancos,
y aún tengo las dos cosas
—de inestimable ayuda
para escribirte versos—.
gocé conversaciones
en noches como parcas
con poetas excelsos
—y con otros menores—,
cerré miles de veces
los peores garitos,
hice el amor pagando
—y sin pagar—
con putas de la corte
y con otras baratas,
negocié con tahúres
partidas imposibles
de mus y de julepe;
tuve chancros y fiebres,
dolores e infecciones
de la más rara casta
que me curó con pócimas
un viejos hijo de Hipócrates.
tuve trabajos fáciles
con sueldos elevados
y troqué en funcionario
—nunca vida mejor
pudiera imaginarse—
del Cuerpo de justicia,
y Cintia, bella Cintia,
te escribo entre legajos
que, finiseculares
—pues no se saldarán
con pena en los noventa—,
acompañan mi viaje
al Leteo final.

Hoy le ofrezco a Afrodita
mirto, amapolas, rosas
—y manzanas chilenas—
con la fe más intensa
pidiendo me procure
lo que queda a este cuerpo
—gastado por los años—
por hacer en el mundo:
un viaje a Tailandia
y un masaje completo
al estilo oriental…

…y luego, Cintia mía,
encontrar ese lecho
de mármol de Carrara
donde posar mi cuerpo
bajo un arco que diga:
“Aquí aguarda Felipe
el paso de las horas,
y lo hace como siempre:
inmarcesible
e inmortal”.


(Luis Felipe Comendador. De Banda sonora, 1997).

***


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Este blog es personal. Si quieres dejar algún comentario, yo te lo agradezco, pero no hago públicos los que no se atienen a las normas de respeto y cortesía que deben regir una sociedad civilizada, lo que incluye el hecho de que los firmes. De esa forma podré contestarte.