Tahar Ben Jolloun, de quien lo desconocía todo antes de leer este libro y de quien me entero que es el escritor en francés más traducido, recoge en él (p 53) un manifiesto de intelectuales, artistas, escritores y profesores universitarios del mundo musulmán (11 de enero de 2015), del que también ignoraba su existencia y del que copio el texto:
Es indispensable introducir reformas en el mundo musulmán para responder a esta guerra (la de los yihadistas). El ejercicio de la ciudadanía, la igualdad, la libertad de conciencia, el Estado de derecho y todos los derechos humanos son unos antídotos indispensables (...). La respuesta a esta guerra consiste en reconocer y afirmar la historicidad y la imposibilidad de aplicar cierto número de textos que contiene la tradición y extraer conclusiones oportunas (...). Esos combatientes se nutren de unos textos islámicos que llaman a la violencia, como ocurría en otras religiones, y que forman parte de otro contexto, de tiempos ya pasados. Todos los responsables, principalmente los religiosos y las autoridades de cada país, deben declarar esos textos inadaptados, desfasados e inaplicables. Esta posición debe ser el inicio de una auténtica reforma del ámbito religioso y, más allá de éste, de una actualización de las legislaciones (...). Se deben criminalizar todos los discursos o las iniciativas encaminadas a promover o fomentar esas radicalizaciones, el odio, el racismo. Los programas escolares y el lenguaje de los medios de comunicación, así como los sermones en las mezquitas, deben cumplir con esos ideales universales de libertad de conciencia y de respeto de los derechos individuales. No existe una religión superior a las demás. La humanidad es una e indivisible.
El manifiesto completo, en francés, podéis leerlo, y suscribirlo, aquí. En ese mismo espacio podéis ver quiénes fueron los primeros firmantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Este blog es personal. Si quieres dejar algún comentario, yo te lo agradezco, pero no hago públicos los que no se atienen a las normas de respeto y cortesía que deben regir una sociedad civilizada, lo que incluye el hecho de que los firmes. De esa forma podré contestarte.